Ana Maria Barb

Desde bien pequeña he tenido interés por la psique humana y el mundo de las emociones. Considero que fui una niña muy sensible y, ya desde entonces, sentía mucha empatía por los más desfavorecidos. Esto me llevó a estudiar Terapia Gestalt, Constelaciones Familiares, PNL, Eneagrama, Terapia de Trauma y en el presente estudio Psicología. Estas terapias me ayudaron a iniciar un proceso de sanación personal a la vez que empecé a trabajar con mis propios clientes creando mi propio modelo. Desde hace 4 años doy formación para Psicólogos y Trabajadores sociales que acompañan a adolescentes en situación vulnerable y adolescentes inmigrantes. También doy varios talleres de Constelaciones Familiares, Teatro y Gestalt y Meditación que son en formato presencial en Barcelona. Me dedico principalmente a dar terapia individual presencial y online, formaciones y talleres grupales.

Estoy acompañando procesos con personas que están pasando por momentos de ansiedad, estrés, estrés post-traumático, gestión emocional, trauma, duelos, perdidas etc. Por mi experiencia, haber migrado acompaño a muchas personas que están pasando por un proceso parecido de migración. En este proceso hay muchos cambios a los cuales una persona esta expuesta y no son fáciles de gestionar. Un duelo va acompañado por emociones como: la tristeza, el enfado, la rabia, el dolor. Y estás emociones necesitan ser acogidas e integradas porque si no las vamos cargando con nosotros y estas van transformándosela en varios síntomas: dolor muscular, insomnio, problemas con la alimentación etc.

El acompañamiento tiene que ir primero con amor porque es lo que nos sana y es lo que más necesitamos hoy en día. Paciencia porque los cambios se van dando paso a paso. Siempre digo que el proceso de la terapia se parece a cuando estás plantando una semilla, vas viendo cambios pequeños hasta que un día llega a florecer la planta. Transparente, es una cualidad que se necesita en terapia tanto como terapeuta como cliente. Flexible y ecuánime a la hora de manejar temas dentro de la terapia. Compasiva y humilde porque es importante saber vivir con los pies en el suelo, cómo dice Dalai Lama: con sentido común.