Ana Paola Gordillo Lobo De Oliveira

Licenciada en Psicología y Máster en Psicoterapia en formación, acompaño a personas que atraviesan momentos difíciles, ayudándolas a reconectar con su bienestar emocional y fortalecer sus recursos internos. Mi enfoque se basa en terapias de tercera generación, integrando herramientas de la terapia cognitivo-conductual, de aceptación y compromiso, terapia integrativa y feminista. Trabajo con personas que enfrentan ansiedad, depresión, baja autoestima, violencia de género, abuso sexual y otros desafíos vitales. Mi compromiso es ofrecer un espacio seguro, respetuoso y libre de juicios, donde cada paciente pueda sentirse escuchado y comprendido. Creo en la psicología como una herramienta de transformación personal y social. Por eso, mi práctica combina el rigor científico con una mirada humana, sensible y ética.

Dominio de herramientas estandarizadas para la evaluación integral del funcionamiento psicológico, con enfoque ético y científico. Intervención terapéutica basada en evidencia, aplicando modelos como la Terapia Cognitivo-Conductual, de Aceptación y Compromiso, y enfoques integrativos adaptados a las necesidades individuales. También realizo acompañamiento emocional y contención, creando espacios seguros para el procesamiento de experiencias traumáticas, crisis vitales y conflictos relacionales. En cuanto a mis habilidades, destacan la contención emocional y la escucha activa, sosteniendo procesos terapéuticos con empatía, respeto y sensibilidad. Practico una comunicación efectiva, explicando conceptos complejos en lenguaje claro, facilitando la comprensión y el vínculo terapéutico. Aplico la adaptabilidad terapéutica, integrando enfoques como la Terapia Cognitivo-Conductual, de Aceptación y Compromiso, Integrativa y Feminista, según las necesidades de cada paciente. Por último, tengo sensibilidad social y cultural; reconozco las dinámicas de género, poder y contexto en los procesos psicológicos.

Me especializo en sostener espacios terapéuticos seguros, donde cada persona se sienta escuchada, validada y respetada. Pensamiento crítico y ético, reflexionando constantemente sobre la práctica profesional, integrando principios deontológicos y filosóficos. Rigor técnico y sensibilidad clínica: Combino precisión diagnóstica con una mirada humana, adaptando cada intervención a la singularidad del caso. Compromiso ético y profesional: Me guío por principios deontológicos, priorizando el bienestar del paciente y la responsabilidad social de la psicología. Apertura al aprendizaje y mejora continua: Mantengo una actitud de formación constante, actualizando mis conocimientos y habilidades para ofrecer una atención de calidad.