Tenemos el placer de conversar con la psicóloga valenciana Sara Navarrete. Navarrete tiene una intensa trayectoria como terapeuta, y ha definido su carrera profesional sobre todo por asistir a parejas en momentos de crisis.
Porque, de hecho, la terapia de pareja es una de las grandes desconocidas y muchas veces ignoramos cómo funciona y cuáles son los puntos clave a la hora de atender una situación conyugal tensa, ayudando a cada miembro a conocerse mejor y a mejorar en ciertos aspectos comunicativos y relacionales.
Entrevista a Sara Navarrete: la terapia de pareja y sus claves
Habiendo atendido más de 500 casos de parejas que querían mejorar su relación, hemos querido plantear a Sara Navarrete algunas preguntas frecuentes sobre este tipo de terapia, por qué es útil y así conocer más sobre su experiencia en este ámbito.
Bertrand Regader: ¿En qué sentido la lógica desde la que se parte en terapia de pareja es diferente a la de la terapia para pacientes individuales?
Sara Navarrete: Para poder responder a esta pregunta, tenemos que entender el mito de la media naranja. El mito de la media naranja, defiende que la pareja no quiere otra cosa que estar juntos. Este mito implica que tenemos un alma gemela por ahí danzando y que tenemos que encontrarla para así ser de nuevo un ser completo.
Realmente esta idea de la media naranja trasmite una imagen poco realista de lo que verdaderamente es una pareja, sin tener en cuenta además el daño que produce para la autoestima considerar que somos incompletos sin no tenemos una persona a nuestro lado. Por ello, el primer paso de la terapia de pareja será diferenciar entre el amor y la dependencia emocional.
En primera instancia se tratará de contextualizar que una relación de pareja no se basa en la relación entre dos seres incompletos que se unen creando un ser completo, si no, más bien, se basa en dos seres completos que deciden ser felices el uno al lado del otro, es algo que se construye en el día a día. Por ello, contestando a la pregunta, vemos que en la terapia de pareja aparece una tercera entidad (la pareja), trabajamos con el “tú”, con el “yo” y el con el “nosotros”.
Mientras que en una terapia individual trabajamos con el paciente de “tú” a “tú”.
¿Cuáles son los principales tipos de problemas que se tratan en terapia de pareja? ¿Es posible reconocer grandes fuentes de malestar?
Es muy importante tener presente que cada persona y cada pareja es un mundo, por lo que cada persona y cada pareja tiene unos conflictos distintos y muy personales, tendremos que dedicar un tiempo a conocer las distintas circunstancias que envuelven a cada pareja. Sin embargo, es cierto que podemos reconocer varias fuentes de malestar o problemas de pareja más frecuentes.
Las razones más comunes que desembocan en crisis en la pareja son el nacimiento de los hijos, problemas en las relaciones sexuales, problemas en la comunicación, etc. Podríamos resumir algunas fuentes comunes de malestar en los siguientes puntos:
- Agotamiento de la relación por cansancio (la convivencia en lugar de fortalecer la relación, la dificulta).
- La presencia de una tercera persona.
- Conflicto de intereses (familiares, economcias, enfermedad).
- Diferencias sociales (educacionales y culturales).
- Incompatibilidad de caracteres.
- Desenamoramiento.
Por tu experiencia, ¿hay diferencias en el tipo de quejas que expresan hombres y mujeres heterosexuales durante esta clase de sesiones?
A lo largo de los años, me he ido dando cuenta de que si bien como he dicho antes, cada pareja es un mundo y cada pareja presenta distintas quejas y recursos para afrontar las crisis. Es cierto que hay un común dialogo que se repite en muchas parejas. En general, para los hombres heterosexuales que vienen a la consulta, parte del conflicto podría comenzar en que sienten que su pareja no se siente atraída sexualmente por ellos, ya que la frecuencia de los encuentros sexuales no es la que a ellos les gustaría.
Por otro lado, vemos que en las mujeres heterosexuales es de suma importancia sentirse escuchadas y comprendidas, y no prestan tanta atención a los encuentros sexuales.
¿Hay momentos en los que un pequeño cambio de actitudes propiciada por la terapia conlleva grandes mejoras en la relación, en cuestión depocos días?
Sí, cuando la pareja cumple unos requisitos, vemos que en una media de tres a cuatro sesiones se puede producir un gran cambio. Para ello, será necesario que la pareja tenga un nivel bajo de conflicto, es decir, aunque exista el conflicto el número de interacciones negativas es al menos igual al de las positivas, también es importante que exista compromiso y un nivel alto de amistad. Cuando la pareja reconoce el problema antes de que éste se agrave y la pareja busca ayuda profesional, suele tratarse de sesiones cortas.
¿Qué tipos de personas o de parejas tienden a responder de un modo más favorable a este tratamiento?
Son muchas las razones que hacen que una pareja responda de modo favorable al tratamiento, pero lo más importante es la aceptación del hecho y evitar la distorsión por ambas partes. Se considera que una pareja con problemas debe cumplir los siguientes requisitos para que el tratamiento sea favorable:
- Reconocerse como pareja con problemas o que al menos un miembro de la pareja lo perciba.
- Que la tasa de intercambios negativos sea igual o menor a la de los positivos.
- Que la pareja presente problemas en distintas áreas (áreas sociales, comunciacion, relación sex, etc) pero que no presente problemas de compatibilidad de caracteres.
¿Y qué clase de creencias o actitudes actúan como obstáculo para el progreso de la terapia de pareja?
Lo más importante para que la terapia sea exitosa es que ambos miembros de la pareja tomen la decisión de manera conjunta, que los dos reconozcan el problema y estén enfocados en solucionarlo.
En muchas ocasiones me he encontrado con parejas que presentan la creencia de que no hay un problema o de que el problema realmente es individual de su pareja y que como tal ha de tratarlo su pareja de forma individual. Esto dificulta la terapia de pareja ya que, por un lado, tendremos que dedicar unas primeras sesiones para realizar un correcto encuadre del tratamiento.
¿Con qué idea importante acerca de la terapia de pareja te gustaría que se quedase la gente que está leyendo esto?
Me gustaría transmitir la idea de que la crisis en muchas ocasiones es sinónimo de cambio, vivimos en una sociedad en la que nos cuesta esforzarnos y ser pacientes con el proceso de cambio y sin darnos cuenta solemos darle una connotación negativa a este. Si entendemos las relaciones de pareja como relaciones lineales, donde siempre he de disfrutar, sentirme enamorado y con mariposas en el estómago... si entendemos la pareja como un espacio donde no cabe la crisis ni el cambio, entonces nos costará superar la crisis de la pareja.
Día a día veo como muchas parejas salen reforzadas de una crisis, por ello si piensas que tu relación de pareja vale la pena, te animaría a trabajar en ella.
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