José Alaniz

¡Hola! Mi nombre es José Ernesto, nicaragüense de nacionalidad y soy el profesional a cargo de los Servicios de Orientación Psicológica. Como orientador psicológico independiente, laboro de manera privada, bajo las modalidades presencial (en días sábados) y a distancia (de lunes a viernes).

Como profesional de la Orientación Psicológica, hago uso del enfoque integrativo, también conocido en filosofía como "eclecticismo teórico". De manera autodidacta, me he formado en diversas vertientes teóricas como el psicoanálisis, la terapia humanista, el enfoque sistémico, las terapias posmodernas (en especial la centrada en soluciones y la narrativa); así como, del enfoque cognitivo conductual, la psicoantropología, el análisis transaccional, la biodanza, la hipnosis ericksoniana, la imágenes del alma, la consejería sexual y de parejas, etc. Lo anterior, me ha facilitado despertar la sensibilidad necesaria para trabajar con jóvenes, adultos/as, parejas y familias en la recuperación de su bienestar intersubjetivo para una vida más plena y consciente. He manejado problemáticas propias del desarrollo, duelos, trastornos en el estado del ánimo y/o conducta alimentaria, asesoría en temas de adicciones, ser mentor para emprendedores, gestión emocional, manejo del estrés, problemas de índole sexual y relacional, trastornos del estado del ánimo, trastornos de personalidad, etc.

Algo que considero yo que me hace especial de otros/as terapeutas es: 1. La mayor cantidad de mi trabajo está digitalizado. 2. Hago más asesoría psicológicas virtuales que presenciales. 3. Me gusta el trabajo con grupos terapéuticos. 4. Soy de los psicólogos que mandan tareas, como leer libros, ver películas, series, llevar un diario psicológicos, etc. Y discutir sobre tus aprendizajes en terapia. 5. Me gusta que el espacio terapéutico contenga tres elementos esenciales, siempre que se pueda: La ventilación emocional, una charla psicoeducativa, un ejercicio terapéutico y culminar con la evaluación de la sesión. 6. El humor, es esencial, me encanta hacer reír a la persona y crear un ambiente de seguridad y confianza basado en el respeto, pero donde la risa no haga falta. 7. Inspirar a la gente, no sé si hacer feliz o no, pero que al menos tenga fe en sí misma, y que las cosas mañana pueden ser mejor y si empeoran, es parte del proceso de transformación.