Xaviera Valenzuela Aravena

A veces vivimos con el corazón en silencio, con el pecho aplastado cargando emociones que no sabemos nombrar o dónde expresar. Nos acostumbramos a adormecer lo que sentimos, olvidando que dentro de nosotros y nosotras hay lugares que necesitan ser escuchados. Aquí encontrarás un espacio cálido donde tu sentir puede manifestarse y ser comprendido, donde el dolor se puede acompañar y transformar, y donde poco a poco podrás reconectar con tu esencia y recuperar tu voz interior.

Mi nombre es Xaviera, soy psicóloga, mujer TDAH, amante de la música, el arte y la expresión emocional. Desde muy temprano aprendí a conectar con la emocionalidad de los demás, lo que me llevó a comprometerme para conseguir estrategias que me permitan brindar un acompañamiento compasivo, respetuoso y consciente, que considere las desigualdades sociales, culturales y de género presentes en cada historia de vida. Ha sido un proceso de introspección y autoconocimiento, de reconocer y desvanecer, de descubrir y descubrirme junto a quienes se han permitido y me han permitido conectar con su dolor. Como profesional, he sostenido a personas en momentos de confusión, bloqueo emocional, tristeza profunda, miedo, desconexión con el entorno e incluso desesperanza, falta de motivación o de deseos de vivir. Principalmente, he escuchado y guiado para resignificar experiencias transformando lo vivido, encontrando en ello aprendizaje, fuerza y un nuevo sentido que permita avanzar con claridad y esperanza.

Asimismo, desde el área de protección de las niñeces, he trabajado en el abordaje de experiencias adversas en la infancia, buscando resguardar y potenciar un desarrollo pleno en niños, niñas y adolescentes. Acompaño tanto a ellos como a sus familias, favoreciendo la comprensión mutua, el diálogo y el fortalecimiento de los vínculos que sostienen su bienestar emocional. Mi labor se centra en potenciar la autonomía, la confianza y la capacidad de transformación, a través de un acompañamiento cercano, empático y profesional. Mi compromiso es orientar desde una mirada integral y con suma consideración al respetar el ritmo y la disposición de cada consultante, proporcionando un espacio para explorar sus emociones e historia de manera gradual. Guardo esperanza en que la palabra y la comunicación siempre nos acompañe y nos sane, porque aunque no lo veamos, siempre tenemos dónde y cómo sostenernos.