Hace tiempo que YouTube es mucho más que un lugar al que subir vídeos improvisados hechos por aficionados. En la actualidad son muchos los profesionales que utilizan esta plataforma para difundir información útil, por ejemplo, y por ello existe ya un "ecosistema" virtual de divulgadores de todos los ámbitos del saber: la Astronomía, la Biología, la Música, etc.
En este caso hablamos con alguien que dedica parte de su tiempo a divulgar sobre aquello a lo que se dedica: la psicología. Se trata de Guillermo Orozco, autor del canal "Psicología en Serio con Guillermo Orozco", en el que habla combinando sus conocimientos obtenidos desde su experiencia como psicoterapeuta, con los que surgen a partir de la investigación científica y los descubrimientos a nivel global.
- Artículo relacionado: "Las 12 ramas (o campos) de la Psicología"
Entrevista a Guillermo Orozco: divulgando sobre Psicología a través de YouTube
Guillermo Orozco es Psicólogo General Sanitario con consulta en Las Palmas de Gran Canaria, desde donde ofrece sesiones presenciales o mediante el formato de terapia online. Desde hace un tiempo, también ha empezado a aprovechar el potencial de Internet como divulgador sobre temas relacionados con la Psicología como ciencia. En esta entrevista nos habla acerca de lo que propone a través de su canal de YouTube, "Psicología en Serio con Guillermo Orozco".
¿Cuál fue la idea principal que te llevó a empezar con este proyecto?
Como ya he comentado en otras entrevistas mi trabajo como psicólogo es, principalmente, vocacional. Hace años trabajaba en el mundo del marketing y decidí dejarlo todo para dedicar mi vida a ayudar a las personas a sufrir menos.
Actualmente tengo la fortuna de poder atender a muchos pacientes en mi gabinete de psicología en Las Palmas de Gran Canaria, pero las ganas de poder ayudar a más gente siempre me ronda la cabeza.
El trabajo terapéutico individual y personalizado es mi pasión y la divulgación en masa nunca podrá sustituir a la terapia individualizada. Aún así y, teniendo en cuenta que no todo el mundo puede permitirse la atención psicológica personalizada, hacer estos vídeos puede ayudar a personas que estén sufriendo y no encuentran la manera de poder salir de ese atolladero, ya sea por motivos económicos, familiares o por la propia vergüenza a hablar de estos temas.
Precisamente este es otro de los motivos que me llevaron a hablar de mi trabajo en una plataforma como YouTube, intentar que la sociedad deje de estigmatizar a las personas con trastornos mentales y se vean como otros problemas más del ser humano.
Comencé escribiendo en el blog de mi página web, donde llevo unos años publicando artículos y, también, colaborando con algunos portales de psicología y salud, como vosotros, Psicología y Mente, AZSalud y otras páginas del sector. Aún así, seguía con la necesidad de poder llegar a más personas, dada la cantidad de desinformación que existe hoy en día en las redes acerca de la psicología científica.
Podemos ver en Internet constantemente como se se trivializan los tratamientos para los trastornos mentales con pseudoterapias basadas en la “mentalidad positiva”, “trucos secretos” para eliminar tu ansiedad para siempre, gurús que afirman que “querer es poder” y un largo etcétera de métodos rápidos e infalibles para aliviar tu sufrimiento.
Toda esta avalancha de métodos alternativos puede llegar a ser muy dañina en algunos casos y quería poner mi granito de arena y aportar un poco de luz. Esto es lo que me motiva a seguir realizando este esfuerzo y hablar de la psicología en términos científicos y avalados empíricamente.
La Psicología se caracteriza, entre otras cosas, por tener muchos ámbitos de investigación y aplicación. ¿En qué tipo de temas se centra más tu canal de YouTube?
Los temas que trato en mi canal son, principalmente, los que trabajo en consulta a diario: ansiedad, depresión, estrés, problemas de autoestima, habilidades sociales, problemas de pareja y sexualidad… Asimismo, también me gusta hablar sobre psicología social y neurociencia, ya que son temas muy interesantes y que nos ayudan a entender muchos de nuestros comportamientos habituales.
La psicología social ha descubierto numerosos efectos psicológicos que se producen en las interacciones humanas y que pueden ser claves a la hora de poder disfrutar, más, de la vida. Teorías como la de la “disonancia cognitiva”, el “efecto halo”, la “difusión de la responsabilidad” o “el efecto Pigmalión”, son solo algunas de las numerosas aportaciones que la psicología social lleva a la comprensión del comportamiento humano.
La neurociencia es un campo relativamente reciente, y nos ayuda a comprender la mente humana relacionando los pensamientos, emociones y conductas con diferentes estructuras cerebrales.
Los temas que trato tienen que ver con la memoria, el aprendizaje, la atención, la emoción o la percepción, entre otros. Esto nos ayuda a entender cómo funciona nuestro cerebro, conociendo su verdadero potencial, pero también las limitaciones que tiene, y esto nos puede ayudar a sufrir menos y tener un mayor bienestar. En este campo, también podemos encontrar numerosos mitos y gran cantidad de creencias sesgadas que pueden resultar perjudiciales para la gente, por eso creo que es necesario hablar de estos temas de una forma rigurosa y ofreciendo información lo más veraz posible.
¿Qué temas notas que generan un mayor impacto en la audiencia, y cuáles crees que son más necesarios tratar para educar a la sociedad en temas importantes?
A pesar de que hablo sobre todo tipo de trastornos y problemas emocionales, la ansiedad es, sin duda, el tema estrella tanto en mi consulta como en los vídeos que publico. Hay cientos de personas en el mundo sufriendo ansiedad, en alguna de sus variantes, y esa es una situación muy alarmante.
Que tantas personas padezcan este problema y los miles de millones de ansiolíticos que se consumen en nuestra sociedad, nos avisan de que algo grave está pasando. Es por esto que vi la necesidad de que, información basada en datos científicos, se difundiera en Internet, ya que la ansiedad se ha convertido, desgraciadamente, en un negocio millonario.
Esto está pasando con todo tipo de problemas y trastornos psicológicos y la picaresca no para de aprovecharse del sufrimiento humano. Miles de cursos, remedios milagrosos y gurús inundan las redes, ofreciendo la cura a todo tipo de trastornos por poco esfuerzo y mucho dinero. Por eso, la información veraz, es necesaria en Internet. Cuanta más, mejor. Es prioritario que la gente conozca cómo funcionan realmente los trastornos psicológicos y que busquen la ayuda adecuada.
Otros temas que atraen mucho la atención de las personas que ven mis vídeos son los trastornos de personalidad, y creo que es muy necesario hablar de ellos, ya que es un problema muy difícil de tratar y que provoca mucho sufrimiento. Los familiares y amigos de individuos con trastornos de personalidad necesitan saber a lo que se enfrentan y tener herramientas para poder manejar las crisis, que son habituales en estas problemáticas.
¿Qué crees que tu canal aporta a la comunidad de divulgación en español de YouTube?
Realmente lo que espero es que mi canal aporte información clara y concisa sobre los problemas psicológicos y emocionales. De una manera entretenida y comprensible, pero sin caer en la simplicidad.
Los trastornos, problemas o desórdenes emocionales y psicológicos son complejos y multifactoriales, y es terrible ver como muchísimos “divulgadores” y “YouTubers” se aventuran a hablar, sin una formación ni fundamento científico, sobre cómo “combatir”, “eliminar” o “curar para siempre”, y de forma rápida y sencilla la ansiedad, la depresión o el estrés.
Sé que mi canal no será el más popular, ya que en él soy riguroso y cauto, como lo es la ciencia. En él no encontrarás métodos mágicos ni milagrosos, pero lo que verás es la cruda realidad, y esto no suele resultar atractivo.
La terapia cognitivo conductual, que es la que practico, se basa en el trabajo y el esfuerzo, y eso no se vende tan bien como las curas rápidas y milagrosas, pero sé que este es el camino. Estoy acostumbrado a vivirlo en mi consulta a diario, personas desesperadas y frustradas que vienen habiendo pasado por todo tipo de terapias y pseudoterapias.
El verdadero cambio se consigue con trabajo, esfuerzo y tiempo, ese es el mensaje que me gustaría que la gente interiorizara. Quiero que las personas cultiven un pensamiento crítico y aprendan a discernir entre la información contrastada y los “mundos de fantasía y color, donde todo es posible”.
¿Te ha resultado complicado adaptarte a este nuevo canal en el que comunicar?
Estoy relacionado con las nuevas tecnologías y las redes sociales, con lo que estoy habituado a ver y consumir este tipo de formatos. Por otro lado, en mi consulta suelo ser bastante directivo y la parte de la psicoeducación me gusta mucho, así que en esos momentos me veo cómodo explicando cómo funcionan los problemas psicológicos, qué se puede esperar de la terapia, de la vida, etc.
Realmente disfruto de esa parte de mi trabajo así que, adaptarlo a los vídeos, ha sido bastante fácil y me he sentido muy cómodo, lo difícil ha sido acostumbrarme a verme y escucharme. Sólo me había visto grabado en algunas entrevistas de televisiones locales y, siéndote sincero, no me sentía nada cómodo ante las cámaras.
Grabé el primer vídeo sin demasiada convicción, llevado por mis ganas de ayudar y de difundir mi experiencia en la consulta psicológica. No me gustó nada cuando lo vi terminado, pero mi pareja, que lo estaba viendo conmigo me dijo: “pues está muy bien, seguro que a mucha gente le ayudará a entender mejor cómo va lo de la ansiedad” y, aunque a mí no me convencía, lo subí a YouTube.
Poco después vi que el vídeo tenía aceptación y que los comentarios recibidos eran positivos y, lo más importante, que estaba ayudando a personas a entender mejor lo que les pasaba. Eso fue crucial, el feedback con la gente. Leer cómo personas de todo el mundo me animaban a subir más contenidos y me decían que gracias a estos vídeos estaban entendiendo y mejorando sus síntomas, esto fue, es y será, el motor de este canal.
Hay algunos testimonios muy potentes en los comentarios de mis vídeos, donde se puede apreciar el sufrimiento profundo que hay en nuestra sociedad. Personas de todo el mundo están ahora conectadas con mis palabras y me agradecen la ayuda prestada con la información que transmito en los vídeos. Esto es lo único que importa.
Hacer un vídeo para YouTube con los estándares de producción actuales suele ser bastante laborioso ¿Cómo combinas esta tarea con tu trabajo principal llevando tu gabinete de psicología?
Por suerte estoy familiarizado con las herramientas necesarias para grabar y editar los vídeos, ya que me dediqué muchos años al marketing, así que yo hago todo el trabajo, desde el guion, pasando por el montaje final, hasta la publicación y promoción en redes sociales.
Suelo grabar los vídeos y montarlos durante los fines de semana y, entre semana, en los huecos que voy teniendo libres (que no son muchos), preparo los guiones. Tengo que hacer verdaderos malabares con las horas del día para que me dé tiempo a hacer todo lo que me propongo, pero los resultados merecen la pena.
Por todo esto, se puede apreciar que no son vídeos muy elaborados, ni en producción ni en postproducción. Hay canales que invierten mucho en la estética, los efectos y la publicidad. En el mío, por el contrario, busco que el contenido se entienda de forma clara y breve, sin hacer mucha floritura digital. Lo importante es el mensaje y que éste llegue a cuantas más personas, mejor.
Con el desarrollo y la diversificación de Internet ¿crees que, cada vez, será más habitual que los psicólogos tengan una faceta como divulgadores?
Realmente espero que la psicología científica y la terapia basada en la evidencia tengan cada vez más presencia en redes sociales, blogs y cualquier otro formato que se popularice en internet. Es necesario que algo de rigor científico pueda equilibrar este sinsentido y esta proliferación de pseudoterapias y métodos mágicos que inundan las redes para tratar los trastornos psicológicos.
Es natural que el ser humano tienda a buscar resultados rápidos y sencillos para su malestar, y las pseudociencias son muy atractivas por eso. Pero las personas tienen que conocer el método científico y ser realistas con las oportunidades que tenemos para aprender a manejar y gestionar los problemas psicológicos.
Actualmente podemos ver grandes divulgadores científicos, como Javier Santaolalla, José Luis Crespo o Rocío Vidal en YouTube, Facebook, Twitter, Twitch, y hasta en TikTok. Así que sólo es cuestión de tiempo que, cada vez más, las nuevas generaciones de psicólogos, difundan el mensaje de la psicología “seria y científica” por todas las redes.
Newsletter PyM
La pasión por la psicología también en tu email
Únete y recibe artículos y contenidos exclusivos
Suscribiéndote aceptas la política de privacidad