El Empowerment en el coaching

La traducción de Empowerment al castellano es ‘empoderamiento’ y es algo fundamental que debe saber transmitir un coach a su cliente para que el proceso de coaching tenga éxito.

Este “empoderamiento” no debe confundirse con una simple motivación, con animar, o con compartir frases positivas para que el coachee se sienta animado. De hecho, esta es una de las falsas creencias con las que más tiene que lidiar el coaching, la de creer que cuando se habla de empoderar al coachee se está hablando de simple motivación.

En este artículo queremos intentar explicar mejor cómo se trabaja ese ‘empowerment’ y lo que se consigue con ello en la forma de afrontar un proceso de coaching.

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Las dos facetas del Empowerment en el coaching

Como punto de partida hay que destacar que el empoderamiento tiene dos vertientes: hacer que el coachee descubra y sea consciente de su potencial y, otra, que sepa cómo acceder a "su centro" o a "estar en la zona".

Confiar en el potencial del cliente

Una de las características fundamentales para ser buen coach es tener absoluta confianza en que el coachee tiene las capacidades y potencial suficiente para alcanzar ese objetivo que quiere lograr y por el que ha solicitado sus servicios.

El empoderamiento en este sentido consiste en que el coach ayude al cliente a eliminar todos esos obstáculos que no le están permitiendo ver las herramientas que tiene para poder alcanzar su objetivo: creencias limitantes, conformismo, no tener claro su propósito, falta de conexión con sus verdaderos valores…

Durante el proceso de coaching el coach trabaja con distintas herramientas y técnicas para derribar esos obstáculos y conseguir ese empoderamiento necesario en el coachee . Dos herramientas de empoderamiento que demuestran ser muy eficaces son:

Las 5 virtudes

Un ejercicio para ser consciente de las cualidades positivas que tiene el coachee y que a simple vista nunca tiene en consideración. Consiste en decirle al cliente (teniendo en cuenta el trabajo previo de sesiones en el que se le ha podido conocer mejor), ‘cuando entras en una habitación lo que traes contigo es…’ y enumerar esas 5 virtudes que el coach ha detectado que el cliente tiene.

La clave está en hacer que el coachee conecte con ellas y que sea consciente de que las tiene porque los demás las ven.

Conectar con los logros

Esta herramienta es de las más eficaces. Es hacer enumerar al coachee los distintos logros que ha conseguido en su vida, ya sea personal o profesional. No hablamos de grandes logros como terminar una carrera universitaria, sino logros del estilo aprender a nadar, conseguir una cita con esa persona que quería, afrontar una situación difícil con éxito…

Con este ejercicio se consigue tomar conciencia de que logramos muchas cosas con éxito a lo largo de nuestra vida, pero no le damos el valor que realmente merecen.

Mantener el centro o conectar con la zona

Esta parte del empowerment consiste en ayudar al cliente a que sepa cómo acceder a su centro o su zona de excelencia desde donde encuentra la plenitud y el empuje para abordar las circunstancias sin límites.

Esta zona que parece algo casi místico es, realmente, ser congruente con los valores. Un valor es eso que para una persona es importante por encima de todo. Si no actuamos acorde a los valores, estamos fuera de ese centro porque no estamos siendo y haciendo en congruencia con nosotros mismos y es donde surgen las dudas y los miedos.

Una vez que el cliente tiene claro esos valores que le guían en su vida, pasa del estado de "tener, hacer, ser" al estado "ser, hacer, tener". Puede trabajar desde su centro o acceder a su zona porque sabe lo que es realmente importante para él y los objetivos y acciones que se marcará para conseguirlo serán muy distintos.

Concluyendo…

En definitiva, el proceso de empoderamiento va ligado y unido al proceso de coaching en sí, porque mientras se van marcando los distintos pasos del plan de acción se va trabajando, a su vez, con las distintas herramientas de empowerment que le darán al coachee la libertad para poder alcanzar el objetivo con éxito.

Saber realizar un buen Empowerment es clave para un coach. Dentro de la formación para ser un coach profesional hay que trabajar especialmente bien esta parte del empoderamiento del cliente pues, como hemos visto, es vital para que un proceso de coaching sea exitoso.

En las distintas formaciones en coaching que damos en nuestra escuela D’Arte Human Business School tratamos el empoderamiento con la seriedad y rigurosidad que se merece buscando, siempre, que los coaches que salen de nuestras aulas sean profesionales de alto nivel.