Ángela Vega Morales Macedo

Soy Ángela, psicóloga colegiada (CPSP N.º 67633) y licenciada de la Universidad de Lima. Soy una persona serena, observadora y empatica. Como psicóloga no me interesa “arreglar” a nadie, sino acompañar con respeto y humanidad los procesos únicos que cada persona atraviesa. Creo profundamente en el potencial del ser humano de ser libre. Trabajo con niños, adolescentes y adultos. Mi enfoque se basa en la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT), que no busca eliminar el dolor, sino ayudar a a tener una mejor relación con el mismo. Mi pasión por la escritura me permite utilizar la escritura como un recurso para ahondar en el inconsciente y llegar a lugares profundos según las necesidades de cada proceso. También, Incorporo estrategias basadas en mindfulness e hipnosis clínica para promover el bienestar emocional.

Mi formación en psicología me permite acompañar a las personas desde una mirada científica y profundamente humana. Me especializo en terapias contemporáneas basadas en la evidencia, que comprenden la mente desde su contexto y buscan más que la reducción de síntomas: procuran cultivar una vida con sentido, equilibrio y flexibilidad. A través de este proceso, ayudo a que las personas se reconecten con sus valores y propósito, aprendan a relacionarse de manera más amable con su sufrimiento y encuentren formas más auténticas de habitar el mundo. Me especializo en temas relacionados a ansiedad, depresión, dependencia emocional, dificultades en relación de pareja y/o familiar, crisis existenciales, procesos de auto conocimiento, duelo, maternidad y apoyo emocional a personas neurodivergence’s (TDAH, TDA, Autismo, etc.).

Mi sensibilidad, mi manera silenciosa de observar el dolor y mi historia personal —marcada por el silencio y la introspección— me enseñaron que hablar , y escribir también, puede ser una forma de sanar. Integro el arte, la escritura y el dibujo como caminos para canalizar el sufrimiento y convertirlo en algo que edifica. De esa manera, trabajo aspectos como la integración de experiencias traumáticas y el fortalecimiento del autoconocimiento. La creatividad me permite llegar a lugares más profundos de la psique, donde las palabras a veces no alcanzan, y desde ahí, construir junto a cada persona un proceso de crecimiento más humano, auténtico y reparador.