Las Ballenas Jorobadas han aprendido a usar Herramientas

Estudios recientes ponen de manifiesto que las ballenas jorobadas usan herramientas para cazar.

Las Ballenas han aprendido a usar Herramientas

El uso de herramientas entre animales es un tema de investigación que ha captado la atención de multitud de científicos e investigadores durante décadas. Tradicionalmente asociado con primates y algunas aves, este comportamiento es muestra de inteligencia y adaptabilidad. Sin embargo, un estudio reciente ha revelado que las ballenas jorobadas no solo utilizan herramientas, sino que las fabrican con una sofisticación sorprendente.

Las redes de burbujas pueden comprenderse como estructuras complejas creadas por estas ballenas para mejorar su eficiencia alimentaria. Mediante la liberación controlada de aire desde su espiráculo mientras nadan en círculos grupalmente, las ballenas jorobadas crean cortinas de burbujas que actúan como barreras para concentrar sus presas, principalmente krill.

Este descubrimiento no solo amplía nuestra comprensión del uso de herramientas dentro del mundo animal, sino que también arroja luz sobre la notable inteligencia y adaptabilidad de estos cetáceos. La capacidad de las ballenas jorobadas para utilizar estos movimientos en su propio beneficio demuestra su flexibilidad cognitiva y conductual, que podría ser crucial para su supervivencia en entornos marinos cada vez más cambiantes dada la problemática ambiental que enfrenta nuestro planeta y todos sus habitantes.

En este artículo, vamos a explorar en detalle la forma en que las ballenas jorobadas han aprendido a usar herramientas, examinando la estructura de las redes de burbujas, su proceso de fabricación y los beneficios que aportan a estos fascinantes gigantes del océano.

El uso de herramientas en el mundo animal

El uso de herramientas se define generalmente como el empleo de objetos existentes en nuestro entorno para alterar de manera más eficiente la forma, posición o condición de otro objeto, organismo o del propio usuario. Algunos investigadores han enfatizado en la naturaleza intencional del uso de herramientas y su papel en la resolución de problemas.

Aunque varias especies de mamíferos, aves, peces e insectos han sido estudiadas por su uso de herramientas, este comportamiento se considera relativamente raro. Más escasas aún son las especies que fabrican o modifican sus propias herramientas, como los chimpancés, orangutanes y cuervos de Nueva Caledonia.

La fabricación de herramientas de manera consciente suele implicar secuencias complejas de comportamientos, tales como la selección y modificación de materiales naturales. Este comportamiento sofisticado, junto con el hallazgo de un mayor tamaño y complejidad cerebral entre las especies que fabrican herramientas, ha llevado a los investigadores a sugerir que la rareza del uso y fabricación de herramientas está limitada cognitivamente en su distribución taxonómica.

Las ballenas jorobadas han sido vistas y estudiadas produciendo redes de burbujas complejas para promover su alimentación. Por ello, se encuentran entre estas raras especies que fabrican herramientas y consiguen beneficios al modificar su entorno.

Las redes de burbujas: una herramienta única

Las redes de burbujas se consideran estructuras complejas creadas por las ballenas jorobadas y observadas en su proceso de busca de comida y subsiguiente alimentación. Estas herramientas acuáticas se forman cuando las ballenas liberan (¿conscientemente?) aire desde su espiráculo al nadar en un patrón de forma circular bajo la superficie acuática. Las burbujas ascendentes crean cortinas verticales que, vistas desde arriba, aparecen como uno o más anillos concéntricos.

La investigación ha revelado que las redes de burbujas producidas por ballenas solitarias consisten en 1 a 6 anillos internos tangenciales, generando un promedio de 3.1 anillos por red. El área del anillo interior promedio era de 37 metros cuadrados, siendo significativamente más pequeña que el anillo exterior. Curiosamente, el tamaño del anillo interior no se correlaciona con la longitud corporal de las ballenas creadoras, pero sí disminuye a medida que aumenta el número de anillos en la red.

Un aspecto crucial para comprender estas redes de burbujas es la distancia entre burbujas vecinas, acotado por los investigadores como el “tamaño de malla”. En el anillo interior, esta distancia se mostraba como significativamente menor (1.2 metros en promedio) que en el anillo exterior, generando una barrera más efectiva para contener las presas.

Las ballenas fueron vistas iniciando la producción de burbujas a una profundidad promedio de 22.1 metros, continuando su descenso mientras despliegan su red. La creación completa de estas redes de burbujas se midió temporalmente en un promedio de 80 segundos. Esta sofisticada técnica de fabricación de herramientas para conseguir alimentos demuestra la inteligencia de las ballenas para aumentar su eficiencia alimentaria, permitiéndoles explotar recursos que de otro modo podrían ser energéticamente poco rentables.

El uso de herramientas en las ballenas

La investigación se llevó a cabo en el sureste de Alaska, utilizando tecnología novedosa y de vanguardia para observar, estudiar y analizar el comportamiento de las ballenas jorobadas solitarias durante su alimentación con redes de burbujas.

Los investigadores emplearon sistemas aéreos no tripulados (UAS o drones) equipados con cámaras de alta resolución y telémetros láser para capturar imágenes aéreas detalladas de las ballenas y sus redes de burbujas. Esto permitió medir con precisión la longitud de las ballenas y las características estructurales de las redes, como el número de anillos, el área de cada anillo y la distancia entre las burbujas vecinas.

Además, se utilizaron etiquetas de registro de datos CATS (Customized Animal Tracking Solutions) adheridas a las ballenas. Estos dispositivos incluían sensores de movimiento, cámaras de vídeo y sensores de presión, proporcionando información detallada sobre la velocidad, orientación y profundidad de las ballenas durante la producción de redes y la alimentación.

Para complementar estas observaciones, se emplearon técnicas estándar de fotoidentificación y ecosondas de doble frecuencia para estimar la profundidad de las capas de presas en las proximidades de las ballenas. Esta combinación de tecnologías permitió a los investigadores obtener una visión sin precedentes del proceso de fabricación y uso de las redes de burbujas por parte de las ballenas jorobadas.

Hallazgos clave del estudio

El estudio reveló detalles fascinantes sobre la estructura de las redes de burbujas y el comportamiento de las ballenas jorobadas durante su creación y uso.

En cuanto a la estructura, se descubrió que las redes de burbujas son más complejas de lo que se pensaba anteriormente. Consisten en múltiples anillos concéntricos, con un promedio de 3.1 anillos por cada red. El anillo interior, crucial para la concentración de presas, tiene un área promedio de 37 metros cuadrados, significativamente menor que el anillo exterior. Curiosamente, el tamaño del anillo interior no está relacionado con el tamaño de la ballena, sino que disminuye a medida que aumenta el número de anillos de la red.

Un hallazgo importante fue la diferencia en el “tamaño de malla” (distancia entre burbujas vecinas) entre los anillos interiores y exteriores. En el anillo interior, esta distancia tiene una medida promedio de 1.2 metros, mientras que en el exterior es significativamente mayor. Esta estructura más densa en el centro crea así una barrera más efectiva para contener las presas.

En cuanto al comportamiento, las ballenas inician la producción de burbujas a una profundidad aproximada de 22.1 metros. Mantienen una velocidad constante de 1.5 metros por segundo durante la creación de la red, que toma en torno a 80 segundos. Después, aceleran a 2.1 metros por segundo al ascender por el centro de la red para así alimentarse rápidamente.

Uno de los hallazgos más significativos fue que las redes de burbujas concentran las presas (principalmente krill) hasta 7 veces más que su densidad natural. Esto permite a las ballenas explotar eficientemente parches de presas de baja densidad que de otro modo no serían energéticamente rentables.

Sorprendentemente, la producción de redes de burbujas no parece aumentar significativamente el gasto energético en comparación con la alimentación sin la creación de redes. Sin embargo, se observó que reduce la tasa de embestidas por inmersión en comparación con otros métodos de alimentación.

Implicaciones y discusión

El uso de redes de burbujas por parte de las ballenas jorobadas demuestra una notable inteligencia y adaptabilidad en su comportamiento de búsqueda de alimentación. Esta técnica les permite explotar recursos alimenticios que de otros modo podrían ser energéticamente poco rentables, ampliando así su nicho ecológico.

La fabricación de estas herramientas parece ser una respuesta específica a condiciones de alimentación concretamente desafiantes, como parches de presas de baja densidad y poco profundos. En estas situaciones, las redes de burbujas ofrecen una ventaja al aumentar significativamente la concentración de presas sin un aumento aparente de gasto energético a medida que se dan las embestidas.

Sin embargo, el uso relativamente poco frecuente de esta técnica (según el estudio, estas corresponden solo al 2.8% de ballenas observadas en estudios sistemáticos) sugiere que existen costos asociados que limitan su aplicación generalizada. La reducción en la tasa de embestidas por inmersión en comparación con otros métodos de alimentación podría ser uno de estos costos.

Así pues, las ballenas jorobadas han demostrado una notable capacidad para fabricar y utilizar herramientas al crear redes de burbujas para mejorar su eficiencia alimentaria. Este comportamiento les permite concentrar presas de baja densidad, aumentando su ingesta sin incrementar significativamente el gasto energético. Este hallazgo resalta la inteligencia y adaptabilidad de las ballenas, sugiriendo que pueden explotar nichos ecológicos más amplios en un entorno marino cambiante.

##Referencias bibliográficas:

https://royalsocietypublishing.org/doi/full/10.1098/rsos.240328

Shumaker, R. W., Walkup, K. R., & Beck, B. B. (2011). Animal tool behavior: the use and manufacture of tools by animals. JHU Press.

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  • Szabo A., Bejder L., Warick H., van Aswegen M., Friedlaender A. S., Goldbogen J., Kendall-Bar J. M., Leunissen E. M., Angot M. and Gough W. T. 2024Solitary humpback whales manufacture bubble-nets as tools to increase prey intakeR. Soc. Open Sci.11240328

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Javi Soriano. (2024, septiembre 18). Las Ballenas Jorobadas han aprendido a usar Herramientas. Portal Psicología y Mente. https://psicologiaymente.com/inteligencia/ballenas-jorobadas-han-aprendido-usar-herramientas

Psicólogo

Javi Soriano es graduado en Psicología por la Universidad de Valencia y está acabando un Máster en Investigación Psicosocial. Le interesa todo lo que tiene que ver con las personas y la sociedad, pero le encanta leer y escribir sobre temas relacionados con el género, la sexualidad y las minorías. Es una persona muy curiosa a la que le encantan los debates y aprender de los demás.

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