¿Eres de esas personas que prefieren ducharse por la mañana o por la noche? Mientras que algunos prefieren meterse directamente en la ducha por la mañana, otros prefieren hacerlo antes de acostarse pues así se se van limpios a la cama.
Pero... ¿puede haber distintos beneficios si decides ducharte por la mañana o por la noche? Pues depende de los objetivos que tengas. Como todo en esta vida, hay beneficios e inconvenientes en las dos opciones. Por ejemplo, si eres de esas personas a las que les cuesta despertarse por la mañana puede que te beneficies de una buena ducha matutina, porque así te sentirás más despierto.
Si tienes dudas sobre cuándo ducharte, en este artículo exploramos los secretos de ducharse. Ahora bien, decidir el momento ideal puede, en muchas ocasiones, estar relacionado con los hábitos personales y la rutina diaria, pero hay algo ciencia a la hora de decidir enjabonarse antes del trabajo o antes de meterse en la cama. ¡Así que presta atención!
Beneficios de las duchas matutinas
Debes ducharte por la mañana cuando cumplas alguno de estos requisitos:
1. Tienes una piel grasa
Si tienes una piel grasa es posible que debas incluir la ducha mañanera en tu vida en vez de dejarla para la noche. “Ducharse por la mañana puede ser bueno para tu piel grasa, ya que durante la noche hay más posibilidades glándulas sebáceas produzcan sebo de forma excesiva y las duchas son buenas para limpiar los poros,” explica la Dra. Holly Phillips a Yahoo Health.
2. Eres una persona creativa (o trabajas en un trabajo creativo)
Si eres una persona creativa o trabajas en un empleo que requiere llevar a cabo tareas creativas, tomarse una ducha mañanera es casi como meditar, porque con el agua caliente, la ducha te permite entrar en un estado mental de relajación estando a la vez alerta; el estado idóneo para que surjan nuevas ideas en tu cabeza. Por tanto, en esta situación “es mejor tomarse una ducha al principio del día para ponerte en estado óptimo de creatividad”, explica Shelley Carson, profesora de Psicología en la Universidad de Harvard.
Además, la experta añade: “Si tuvieras que solucionar un problema de tipo creativo y llevases tiempo dándole vueltas y vueltas al tema en busca de una solución pero sin éxito. Entonces, es posible que una ducha te ayude a relajarte y mejorar tu estado mental”.
3. Te cuesta despertarte por la mañana
¿Te cuesta cuesta levantarte por la mañana? A muchas personas les viene bien la ducha mañanera porque les ayuda a activar el cuerpo y a despertarse. Así pues la ducha de la mañana te pone en modo alerta y acelera tu metabolismo. Los estudios científicos demuestran que una ducha fría durante unos minutos por la mañana puede ayudarte a estar más alerta durante el resto del día.
4. Te cortas cuando te afeitas
Puede que seas de esas personas que utilizan la clásica cuchilla de afeitar en la ducha y, en ocasiones, se cortan mientras se afeitan. En ese caso, la ducha mañanera es para ti. Eso es lo que afirma un artículo publicado en la revista Greatist, pues unas plaquetas que detienen el sangrado están más activas durante la mañana que por la tarde o la noche.
Beneficios de las duchas nocturnas
Debes ducharte por la noche cuando te sientas identificado con uno o varios de los siguientes puntos:
1. Te cuesta dormir
Si tienes problemas para conciliar el sueño, una ducha nocturna es ideal. A pesar de que las duchas mañaneras pueden despertate, las duchas nocturnas pueden ayudarte a dormir mejor. “Ese enfriamiento rápido después de salir de la ducha o del baño tiende a ser un inductor natural del sueño” afirma Christopher Winter, un experto de la American Academy of Sleep Medicine y director de la Martha Jefferson Hospital.
2. Tienes la piel seca
Si en caso de sufrir piel grasa era recomendable ducharse por la mañana, si tienes la piel seca, entonces es mejor ducharse por la noche. Eso explica Tanya Kormeili, una dermatóloga, estadounidense. a Yahoo Health.
3. Quieres tener las sábanas limpias
¿Quieres tener las sábanas limpias? Entonces opta por una ducha nocturna. Eso no quiere decir que no debas limpiar las sábanas de vez en cuando. Pero, especialmente para aquellas personas que sudan mucho o que realizan trabajos que requieren una gran demanda física, la mejor opción es tomarse una ducha antes de acostarse. Además, dormirás más relajado.
4. Tu día a día te hace acabar la jornada no tan limpio
Y claro, puede que tu trabajo no sea precisamente limpio y que, al final de tus ocho horas, acabes, por ejemplo, lleno de aceite porque eres mecánico. En esos casos, sobra decirlo: ¡pero necesitas una buena ducha por la noche, por supuesto! Por otro lado, puede que pases largas horas trabajando bajo el sol. Entonces, lo ideal sería que te ducharas y luego te aplicaras una crema hidratante para evitar problemas serios de piel.
5. Haces deporte tarde
Evidentemente (y sobra decirlo también), ¿no te meterás en la cama después de salir a correr por la noche o después de tu clase de salsa sin pasar por la ducha, verdad? Además de ser malo para la piel, porque el sudor puede taponar los poros y provocarte granos, si duermes con otra persona, el olor puede ser bastante molesto. Así que podrías ser un poco respetuoso.
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