El último Estudio Global sobre Coaching realizado por ICF en 2020 mostraba que desde 2016 la tendencia de la industria del coaching había ido en un aumento progresivo y que, a pesar de la crisis ocasionada por la pandemia de coronavirus, esta tendencia alcista seguiría en los siguientes años.
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Nuevas tendencias en el ámbito del Coaching
Nuestra posición como "testigos directos" sobre lo que ocurre en ese mercado nos permite afirmar que ese estudio no se equivocaba y que, efectivamente, el interés por el coaching y su demanda han seguido creciendo en 2021. Algo que, observando los datos de los últimos meses, seguirá siendo así durante el 2022 y, sin miedo a equivocarnos, en los siguientes años.
Esto puede deberse a distintos factores o motivos, pero las 3 razones que se perfilan como las principales, serían las siguientes.
1. El coaching como arma contra la incertidumbre
La pandemia de coronavirus ha traído una ola de incertidumbre en la sociedad no conocida en las últimas décadas. Las fluctuaciones en el progreso de la enfermedad, los cambios en las pautas de vacunación, las variantes de virus... junto con los daños colaterales que todo esto trae a nivel social y económico, hacen que se vivan momentos continuos de no saber qué va a pasar que acrecientan la inseguridad ante el futuro más inmediato.
En este terreno son muchas las personas que se encuentran desmotivadas y perdidas. No ver claro ni siquiera el futuro más próximo hace que hayan dejado de tener claro el foco en su vida, hacia donde quieren ir, qué hacer o cómo continuar.
Y es aquí donde el coaching se erige como una de las grandes esperanzas del año próximo (y de los venideros), puesto que permite a los individuos no solo encontrar de nuevo el camino hacia donde redirigir los pasos de su vida, sino que, lo más importante aquí, hace que las personas desarrollen sus herramientas internas y su potencial para que, entre otras cosas, puedan solventar de forma eficiente otras situaciones de incertidumbre que seguro surgirán a lo largo de su vida.
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2. La consolidación del cambio en el tipo de liderazgo
El líder, entendido como un ser superior que manda y ordena y al que los demás "siguen" más por miedo que porque sepa guiarlos, no tiene cabida a estas alturas del siglo XXI. Si volvemos a tener en cuenta la incertidumbre actual que hemos mencionado en el punto anterior, se hace necesario que los líderes se conviertan en auténticos guías que sepan orientar a los equipos hacia los objetivos deseados atendiendo y entendiendo sus necesidades más que las suyas propias.
Esta realidad es la que hará que en el 2022 siga en aumento la demanda de coaches en organizaciones, empresas e instituciones de todo tipo: las personas al mando de las mismas desean "aprender" realmente a liderar, y no solo a ‘mandar’. En tiempos de desasosiego y desmotivación, los equipos exitosos serán los que cuenten con un líder que sepa tanto de inteligencia emocional, PNL y resolución de conflictos como de datos y objetivos económicos.
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3. Nuevos empleos para una nueva sociedad
El aumento de una mayor demanda de coaches tanto en el plano empresarial como el personal se traducirá en un necesario incremento en el número de personas formadas para ejercer como coaches profesionales. Es decir, el 2022 y los años que le seguirán pueden vislumbrarse como los años donde el coaching se instaure definitivamente como una de las mejores salidas profesionales.
Aquí conviene incidir en que, aunque por lo que hemos mencionado en el párrafo anterior crecerá el número de personas formadas en coaching porque se necesitan más coaches, existe algo más profundo en esta fórmula que trasciende la simple ley de la oferta y la demanda.
El nuevo paradigma de sociedad que se está imponiendo ya no solo por la crisis del coronavirus, sino por el incremento de la conciencia social y ecológica, junto con un mayor entendimiento de cómo el plano emocional de las personas es clave en el devenir de su vidas, ha hecho que aquellas personas más conscientes de ello estén sintiendo la necesidad de formarse en coaching tanto para dar un giro de 180º a su trayectoria profesional y dedicarse a acompañar a personas y empresas en ese cambio de paradigma, como para transformarse ellas mismas y ser más eficientes ante los retos que puedan surgir.
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Como dijimos al principio, en D’Arte Human & Business School somos testigos directos de estas 3 razones que harán que el mercado del coaching siga creciendo en 2022 y, por ello, trabajamos para mejorar continuamente el programa de nuestras formaciones con el fin de poder garantizar que todos esos coaches profesionales que se formarán en los siguientes años, puedan ejercer la profesión con todas las garantías.
D´arte Human & Business School Coaching Y Pnl
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