Sófocles (496 a.C. - 406 a.C.) nacido en Colono, cerca de Atenas, fue un destacado poeta trágico de la Antigua Grecia. Entre sus obras más famosas se encuentran Edipo Rey y Antígona.
Aunque fue un autor prolijo, solo siete de sus tragedias se conservaron de forma intacta, y supusieron una piedra de toque para el género trágico.
Frases de Sófocles
Con el objetivo de acercarnos a la obra y pensamientos de este excepcional poeta griego, en el artículo de hoy nos hemos propuesto recopilar las mejores citas célebres y frases de Sófocles.
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1. La verdad puede más que la razón.
Una muestra de su realismo.
2. Siempre se repite la misma historia: cada individuo no piensa más que en sí mismo.
El egoncentrismo parece ser una característica inherente a la especie humana, según Sófocles.
3. Noble cosa es, aún para un anciano, el aprender.
El aprendizaje constante nos dota de un porvenir mejor.
4. El que es bueno en la familia es también un buen ciudadano.
Familiar afectuoso y dedicado, ciudadano cívico y responsable.
5. El que prescinde de un amigo es como el que prescinde de su vida.
La existencia es demasiado corta como para no contar con personas leales a tu lado.
6. Cásate; si por casualidad das con una buena mujer, serás feliz; si no, te volverás filósofo, lo que siempre es útil para un hombre.
En cualquier caso, ser feliz está en tus manos.
7. No se puede juzgar la vida de un hombre hasta que la muerte le ha puesto término.
Siempre hay tiempo para cambiar de rumbo… hasta que la muerte nos lo impide.
8. Para quien tiene miedo, todo son ruidos.
Una de esas frases metáforicas de Sófocles que nos habla sobre una especie de hipocondría.
9. Los hijos son las anclas que atan a la vida a las madres.
Sobre el amor materno, infinito y eterno.
10. La obra humana más bella es la de ser útil al prójimo.
Que otros disfruten de tu compañía es uno de los mejores premios.
11. Acostada en medio de la desdicha, el alma ve mucho.
Cuando estamos hundidos, el alma sale a flote.
12. Me preguntas si debes o no casarte; pues, de cualquier cosa que hagas te arrepentirás.
Irónica frase de Sófocles ante la duda de un ciudadano.
13. Los cielos nunca ayudan al hombre que no quiere actuar.
Si no eres capaz de pasar a la acción, no esperes que el universo te haga llegar riquezas.
14. La alegría más grande es la inesperada.
Reflexión sobre la felicidad.
15. El saber es la parte más considerable de la felicidad.
Coincidiendo con otros pensadores griegos, Sófocles daba una gran importancia a acumular conocimientos.
16. Es terrible hablar bien cuando se está errado.
Un gran uso de la oratoria no garantiza el tener la verdad.
17. Común es cometer errores. Pero cuando se ha errado, no es falta voluntad, ni brío, tratar de corregir el error y no obstinarse en él. La obstinación es el otro nombre de la estupidez.
Corregir los errores propios es una señal de madurez y responsabilidad.
18. Una mentira nunca vive hasta hacerse vieja.
Tiene las piernas muy cortas.
19. El peor mal del hombre es la irreflexión.
Quien no sabe pensar, no sabrá vivir.
20. Constante y perpetua riqueza es la virtud.
Genial reflexión de Sófocles.
21. Muchas cosas hay portentosas, pero ninguna como el hombre. Tiene recursos para todo; sólo la muerte no ha conseguido evitar.
Optimista con la especie humana, Sófocles hablaba así sobre el potencial creador de cada persona.
22. Al hombre perverso se le conoce en un sólo día; para conocer al hombre justo hace falta más tiempo.
Sobre los tipos de personas y su trasfondo ético o perverso.
23. La muerte no es el más grande de los males: es peor querer morir y no poder hacerlo.
Una frase que parece hablar sobre la necesidad de legalizar la eutanasia.
24. No haber nacido nunca puede ser el mayor de los favores.
Una visión un tanto pesimista sobre la existencia.
25. Siempre es bueno navegar cuando se huye del mal.
Metáfora para aplicar a la vida.
26. La verdad es siempre el argumento más fuerte.
Nada ni nadie puede vencer la fuerza de la verdad de los hechos.
27. Una palabra nos libera de todo el peso y el dolor de la vida: esa palabra es amor.
Un planteamiento verdaderamente moderno y humanista que pone al amor como salvación ante todo mal.
28. Un hombre, aunque sea sabio, nunca debería avergonzarse de aprender más, y debe desviarse de su mente.
No perder la curiosidad y seguir teniendo hambre de aprendizaje, esa debe ser nuestra filosofía.
29. Un hombre temeroso siempre está escuchando cosas.
Debemos ser valientes en la vida y olvidar todo aquello que puedan decir los demás.
30. No nací para compartir el odio, sino el amor.
Una receta que podemos seguir diariamente para hacer del mundo un lugar mejor.
31. De todos los males, los más dolorosos son los que se inflige uno mismo.
Una verdad como un templo. Somos nuestro peor enemigo.
32. Muchas cosas hay misteriosas, pero ninguna es más misteriosa que el hombre.
El misterio y la veneración por el hombre fueron constantes en varios pensadores clásicos.
33. El noble debe vivir con honor o con honor morir
El honor es un valor que se está perdiendo en nuestros días y con el que los clásicos vivían y morían.
34. Todos los hombres cometen errores, pero un buen hombre cede cuando sabe que su curso es incorrecto y repara el mal. El único delito es el orgullo.
Un consejo que debemos recordar durante el resto de nuestros días.
35. El camino que he seguido, lo he seguido sin saber nada.
Una buena forma de afrontar el fenómeno del conocimiento es empezar por reconocer que sabemos muy poco de la vida.
36. Mucha sabiduría a menudo va con menos palabras.
Las personas más calladas tienen las mentes más ruidosas.
37. ¿Qué mayor herida hay que un falso amigo?
Cuando te das cuenta de que un amigo te ha fallado, te sientes vulnerable y desgraciado.
38. La verdad odia el retraso.
La verdad como valor supremo es una de las filosofías más destacadas de la época.
39. Quien no haya sufrido lo que yo, que no me de consejos.
Solamente nosotros sabemos por lo que hemos estado pasando.
40. Debes recordar que nadie vive una vida libre de dolor y sufrimiento.
Una forma pesimista de ver la vida, donde la única constante es el pesar.
41. No hay mañana para el que no acabe bien el día de hoy.
Mañana siempre se puede mejorar todo lo que nos hemos bien hecho hoy.
42. Todas las preocupaciones de los hombres salen mal cuando desean curar el mal con el mal.
Para lograr el bien, solo podemos usar el bien.
43. Al temor, entre muchas otras cosas, le va bien a la tiranía.
Todas las tiranías del mundo se fundamentan en el temor, el miedo y el sometimiento.
44. El hombre es aire y sombra solamente.
Los grandes pensadores de la antigua Grecia aportaban sus ideas sobre la materia, el ser humano y la realidad que les rodeaba.
45. La bondad da a luz a la bondad.
Una verdad que sigue siendo vigente tras más de 2000 años de historia.
46. Nuestra felicidad depende de la sabiduría en todo momento.
Una apuesta decidida por el poder del intelecto como vía para lograr la felicidad.
47. Un hombre que se complace en hablar continuamente se engaña pensando que no es desagradable para quienes lo rodean.
Pocas cosas hay más desagradables que los charlatanes.
48. La fortuna no está del lado de los débiles de corazón.
Solo la fortaleza nos hará lograr todos nuestros objetivos.
49. Dejen que los hombres sean sabios por instinto si pueden, pero cuando esto falla, sean sabios con un buen consejo.
Nunca está de más aceptar consejos de los demás que puedan ayudarnos a ser más sabios.
50. Sin trabajo nada prospera.
Trabajo duro y compromiso, no hay otra receta para triunfar en la vida.
51. Si siempre nos ayudáramos, nadie necesitaría suerte.
Sin duda, el mundo sería un lugar mejor si eso sucediera.
52. Nada temo, pues mantengo la verdad, que es poderosa.
Como muchos grandes pensadores, este gran poeta valora la verdad como bien supremo.
53. El mundo está lleno de maravillas, pero nada es tan maravilloso como el propio hombre.
Un alegato humanista, a favor de las infinitas posibilidades de nuestra especie.
54. Las opiniones tienen mayor poder que la fuerza de las manos.
La razón y la fuerza del convencimiento mediante el intelecto siempre vencerá a la violencia.
55. La pereza es la madre de todos los males.
Sin duda, una de las citas célebres más acertadas.