Estamos viviendo tiempos en los que las personas buscan de manera constante el éxito y la realización personal y profesional. Cierto es, que a veces este camino se puede tornar cuesta arriba.
Se empieza a llenar de listas interminables de objetivos por cumplir, innumerables responsabilidades impuestas, y expectativas irreales. Y todo ello, lejos de ser una palanca que impulse a la consecución de nuestras metas se convierte en un camino estresante, repleto de bloqueos que llevan a la desmotivación y frustración.
Una herramienta muy eficaz que nos puede allanar el camino es el autoconocimiento. Nos ayuda a establecer retos alineados con nuestros valores, con quien realmente somos y sacar nuestro máximo potencial.
Entrevista a Argi Mayner López: autoconocimiento para alcanzar el éxito profesional y personal
Hoy hablamos de ello con Argi Mayner, coach y analista conductual DISC, quien ha visto como el autoconocimiento se ha convertido en una herramienta estratégica para alcanzar metas personales y profesionales, sacando el máximo partido a fortalezas, trabajando áreas de mejora, potenciando la toma de decisiones y fortaleciendo la resiliencia frente a los desafíos que nos encontramos a diario.
Argi Mayner López
Argi Mayner López
Coach certificada. Experta analista conductual.
¿No conocerse a uno mismo implica dejar pasar oportunidades importantes?
Sin lugar a dudas. Y aunque no seamos conscientes de ello, tiene sus consecuencias. Una persona que no se conoce bien es más probable que ante una oportunidad importante conecte con miedos e inseguridades, y la sienta como una situación estresante. Por lo que tomará decisiones que le alejen de esas situaciones y pierda oportunidades que realmente le harían crecer personal y profesionalmente. Y esto está influyendo en su bienestar.
Y, por otro lado, una persona que se conoce bien conecta más fácilmente con sus fortalezas y recursos, por lo que ante nuevos retos se va a sentir más capaz de afrontarlos y los va a aprovechar. Son personas que conocen muy bien que valores rigen sus vidas y esto es fundamental a la hora de evaluar oportunidades, puesto que funcionan como faro para vivir de una manera más coherente a quien somos y los retos que queremos alcanzar.
Una característica de los grandes líderes justamente es el grado de autoconocimiento que tienen sobre ellos mismos. El liderazgo comienza con un buen autoliderazgo, requiere conocerse muy bien.
¿Qué es lo que define al autoconocimiento y lo distingue de otros procesos?
El autoconocimiento yo lo veo más como una herramienta de desarrollo personal. Herramienta que requiere observación, reflexión y aprendizaje. El comportamiento de las personas es muy complejo, intervienen pensamientos, emociones, vivencias, valores y creencias. Hoy en día crecemos poniendo el foco en lo exterior y vamos forjando nuestra seguridad y autoestima en base a un aspecto físico, a las cosas materiales que tenemos, con quien nos relacionamos y que opinan de nosotros. Todos elementos externos. Y esto tiene sus riesgos puesto que ponemos el poder en manos ajenas, perdemos el control.
El autoconocimiento es una herramienta que va de dentro hacia fuera. Nos permite bucear dentro de nosotros mismos, reorganizarnos y volver a coger las riendas.
Analizar ese personaje que hemos creado y desechar las partes que ya no nos sirvan y quedarnos y potenciar las que realmente nos empoderan. Desde ahí se adquiere un estadio de conciencia que te cambia la perspectiva, un cambio interno con gran impacto externo.
¿De qué manera se relacionan la autoestima y el autoconocimiento?
Autoestima y conocimiento están estrechamente unidas y ambas son fundamentales en el desarrollo personal. Empezamos a formar nuestra autoestima a edad muy temprana interviniendo muchos factores ajenos a nosotros mismos. Juicios, opiniones, ideales y experiencias dan como resultado la visión y percepción que tenemos de nosotros mismos, es decir, como nos valoramos.
Cuando esa valoración no es positiva y da lugar a una autoestima baja nos sentimos incapaces de alcanzar ciertos objetivos autoimpuestos que sentimos importantes para ser felices y sentirnos realizados. Conectamos con las debilidades y la valoración de nosotros mismos se ve mermada. Sin embargo, la autoestima puede ir cambiando con el paso del tiempo y el autoconocimiento es un aliado maravilloso puesto que nos ayuda a conectar con nuestras fortalezas y entender nuestras debilidades. Esto nos capacita para poder trabajarlas, ya que muchas de esas debilidades han sido originadas en cómo hemos interpretados ciertos hechos y las hemos ido validando con el tiempo. Las personas que trabajan su autoconocimiento adquieren adicionalmente la capacidad de entender sus emociones y gestionarlas, y todo ello genera un gran impacto en la autoestima, puesto que cambia positivamente la valoración de uno mismo.
Por lo que has visto en tu experiencia profesional, ¿las personas suelen arrastrar consigo creencias limitantes sobre el Yo que los llevan a no conocerse verdaderamente? Por ejemplo, debido a las expectativas de su familia o a la presión social.
Si, claro que sí. Es bastante habitual que las personas vivamos arrastrando creencias que nos limitan sin darnos cuenta y muchas de ellas han sido heredadas por el entorno o las familias. Crecemos escuchando las creencias de nuestros padres, que no dejan de ser juicios y opiniones, pero les otorgamos la categoría de verdades absolutas.
En su momento, esas creencias tuvieron una misión importante para la persona que lo integro en su vida, ya fuera cuidado o protección. Y esa persona, con todo el amor del mundo lo traslada a su entorno y esa creencia se integra sin ser cuestionada. Pero sin tener en cuenta que actuamos y tomamos decisiones conforme a ella.
Esas creencias pasan a formar parte de nuestra personalidad, nos dan seguridad y en cierta medida nos une a ese familiar que nos la ha traslado. Romper con esa creencia puede ser interpretada como romper los lazos o traicionar a esa persona querida.
Pero para vivir de una manera más plena es necesario que identifiquemos cuáles son esas creencias que no nos están dejando avanzar, que nos limitan e impiden alcanzar nuestras metas. Recuerdo una cliente que trabajaba en una gran empresa. Siempre había soñado con tener un pequeño negocio, pero su padre, al cual adoraba y falleció cuando ella tenía 14 años siempre le había dicho que la felicidad venía por tener un trabajo estable. Su padre venía de una familia que había tenido dificultades económicas y había trabajado muy duro para darle a ella y sus hermanos las mejores oportunidades.
Ella a pesar de tener una gran carrera profesional nunca había conseguido ser feliz laboralmente y llegó un momento que esto empezó a afectar a su vida familiar.
La creencia de su padre había limitado todas sus decisiones sin ser consciente, y ahora en su fase adulta, y después de trabajar mucho en ella misma, se había dado cuenta de ello. Tuvo la capacidad de dar un giro a su vida laboral y poder hacer realidad sus sueños, sintiendo agradecimiento y amor hacía su padre y hacía ella misma.
¿Cuáles son las principales etapas de un proceso de autoconocimiento tal y como tú lo entiendes?
Se inicia con una fase de observación tanto del comportamiento, pensamiento y emociones. Se trata de que la persona simplemente observe y tome conciencia, sin juicios ni culpas. Aquí ya vamos a ser conscientes de cómo nos estamos relacionando con nosotros mismos y como eso está impactando en nuestro entorno.
No es una tarea que se complete en una sola sesión, sino que requiere trabajo, perseverancia y continuidad.
La observación nos lleva a la reflexión. Indagar tanto en creencias heredadas como en los verdaderos valores que promueven sus acciones y decisiones. Descubrir que es realmente importante para uno mismo ayuda a establecer una base sólida, lo cual va a tener un gran impacto en el bienestar de las personas puesto que se va a convertir en el faro de nuestras vidas, de nuestras decisiones.
Requiere un gran trabajo de aceptación de quienes somos hoy y de hacerse responsables de nosotros mismos.
Desde ahí la persona inevitablemente adquiere una visión distinta de ella misma y adquiere un poder que reside dentro de su persona. Desde aquí se establecen nuevas metas y se trabaja con todo el potencial.
¿Y qué estrategias de autoconocimiento te parecen las más importantes y eficaces?
Yo destacaría tres.
La primera para mi sin duda es “saber frenar”. Si no paramos y no detenemos todo ese ruido interno y externo que nos colapsa no podemos hacer nada. Tenemos que dejar de vivir en modo piloto automático y coger las riendas de nuestras vidas. Para poder trabajar en nosotros mismos primero hay que parar.
Otra para mi muy eficaz son las evaluaciones DISC. Nos ayudan a entender nuestro comportamiento, preferencias, fortalezas y áreas de desarrollo. Nos enseñan la punta del iceberg para luego poder sumergirnos, trabajar y tener grandes resultados a nivel personal y profesional.
La última es un hábito que deberíamos recuperar, la escritura. Coger un papel y bolígrafo y ponernos a escribir. Volcar pensamientos y emociones, cualquier cosa que se nos pase por la cabeza y dejarlo reposar.
Cuando vuelves a leer lo que tú mismo has escrito y observas desde otra perspectiva, da mucha claridad. Ni te imaginas que sorpresas se lleva la gente al ver ese diálogo interno que tanto dice de nosotros y nos está condicionando. Es una herramienta muy poderosa.
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