Es muy probable que, si has llegado hasta aquí, sea porque estás atravesando un mal momento en tu matrimonio o noviazgo, no sabes qué hacer ante una crisis de pareja, y ya no se te ocurren más posibles soluciones para salir de ella.
Las relaciones amorosas pueden ser difíciles, y en ocasiones, las parejas enfrentan crisis que ponen a prueba su amor y su capacidad para superar problemas juntos. Una crisis de pareja puede surgir por muchas razones, como problemas de comunicación, infidelidad, diferencias culturales, económicas, de valores, entre otras. Sin embargo, si se aborda de manera adecuada, una crisis de pareja puede ser una oportunidad para fortalecer la relación y crecer juntos.
Qué hacer ante una crisis de pareja: 7 pautas a seguir
Estas son algunas recomendaciones a seguir para resolver la crisis que estáis atravesando
1. Comunicación abierta y honesta
La comunicación es clave en cualquier relación, y es aún más importante en momentos de crisis. A veces tendemos a pensar que “falta comunicación” cuando la realidad es que sobra, pero del tipo disfuncional. Por ello, es importante que tanto tú como tu pareja habléis abiertamente sobre lo que está sucediendo y cómo se sienten al respecto. Escucha a tu pareja sin juzgar ni criticar, y expresa tus sentimientos y preocupaciones de manera clara y respetuosa.
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2. Aceptación y comprensión
Aceptar que hay un problema en la relación es el primer paso para resolverlo. Es importante que tanto tú como tu pareja entendáis que cada uno tiene sus propias razones y sentimientos en la crisis. Trata de ponerte en el lugar del otro y entender su perspectiva, esto puede ayudar a encontrar soluciones que funcionen para ambos.
3. Busca ayuda profesional
A veces, la ayuda de un profesional puede ser necesaria para resolver una crisis de pareja. Un terapeuta certificado puede ayudar a identificar las causas subyacentes del problema y proporcionar herramientas para resolverlo. Si ambos están dispuestos a trabajar en la relación, la terapia de pareja puede ser una buena opción para mejorar la comunicación y la conexión emocional.
Es por ello por lo que os animo a que os pongáis en contacto conmigo y podamos empezar un proceso terapéutico en el que poder resolver vuestra crisis.
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4. Trabaja en ti mismo
A menudo, las crisis de pareja son el resultado de problemas personales no resueltos. Tomar tiempo para trabajar en ti mismo, ya sea a través de la meditación, el ejercicio o la terapia individual, puede ayudarte a ser una mejor pareja y a estar más en paz contigo mismo. Además, cuando trabajas en ti mismo, puedes ser un modelo a seguir para tu pareja, lo que puede ayudar a mejorar la relación.
5. Aprende a perdonar
A veces, las crisis de pareja son el resultado de proyecciones y tropiezos cometidos por uno o ambos miembros de la pareja. Aprender a perdonar a tu pareja y a ti mismo es esencial para superar una crisis de pareja. El perdón no significa que olvides lo que ha pasado, pero sí significa que estás dispuesto a dejar ir el dolor y el resentimiento para seguir adelante juntos.
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6. Activa la Red Neural por Defecto
Es esencial que aprendas a atravesar momentos de soledad contigo mismo/a en los cuales no exista mayor distracción o estímulo que tu propia mente, emociones, sentimientos, planes…
Por ello te animo a que, durante 30 minutos al día, escojas un lugar tranquilo y dediques esos 30 minutos a fortalecer la Red Neuronal por Defecto con el fin de encontrarte y reconstruir muchas de las heridas que existen en tu interior.
7. Aumenta los momentos de intimidad en pareja
Uno de los problemas más relevantes dentro de la pareja es la falta de momentos de intimidad. Y con ello no solo me refiero al carácter sexual de la relación, si no también a esos momentos en los que se comparten los miedos, inseguridades, deseos, logros, planes… Es esencial que podáis sacar un rato todos los días para compartir cómo os sentís, qué os preocupa, qué emoción sentís con más fuerza, que os gustaría transformar en vuestra relación…
Técnica de Resolución de Problemas para la crisis de pareja
A continuación, voy a resumir brevemente los pasos necesarios para llevar a cabo una resolución de problemas efectiva.
1. Tomar consciencia
Es importante entender que, como cualquier metodología, no es una solución mágica a todos los problemas y es esencial soltar toda expectativa de sufrimiento 0.
2. Listar problema
El siguiente paso será elegir diferentes tipos de problemas que existan dentro de la pareja y colocarlos de manera jerárquica por orden de importancia y magnitud.
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3. Elegir el problema
Ahora vais a elegir el problema que, dentro de la jerarquización, tenga mayor relevancia para vosotros, pero que sepáis que poseéis la capacidad para enfrentaros a él.
4. Posibles soluciones
Es el momento de sacar a pasear nuestra creatividad y con ello empezar a formular diferentes tipos de soluciones por muy descabelladas que puedan parecer. Cuantas más mejor y cuanto más variado sean, más os acercaréis. En este punto es relevante decir que se escogerán dos posibles soluciones extremas. Una de acción y otra de inacción.
Cabe resaltar que durante esta fase, no pueden existir juicios de valor hacia ninguna de las opciones, ni críticas, ni nada que ponga en tela de juicio la validez de la opción.
5. Seleccionar solución preferida
Ahora, y no antes, llega el momento de valorar y juzgar las diferentes soluciones propuestas anteriormente. Para ello haremos una lista de pros y contras con cada una de las posibles soluciones hasta encontrar la que más se adapte a ambos a través de puntuar cada opción del 1 al 10.
Es importante en este paso tener en cuenta el grado de resolución del problema con cada solución propuesta, la relación coste/beneficio, el grado de satisfacción general, que se gana y que se pierde y, por último, plantearse que es lo peor que puede suceder con ella.
6. Implementar solución
Ahora llega la hora de la verdad en donde ambos pondréis la solución escogida en práctica a través de pequeños pasos y veréis si verdaderamente funciona y resuelve el problema negociando siempre con la pareja hasta dónde se puede llegar en cada momento.
Y si no funcionase esa solución, simplemente nos fijamos en la siguiente que teníamos como mejor valorada y tratamos de implementarla.
Conclusión
Soy consciente de que todo esto es más fácil decirlo que hacerlo, por eso os propongo que os pongáis en contacto conmigo para que me podáis contar vuestra situación personal y veamos cómo podemos gestionarla.
Por último, quiero daros las gracias por quedaros hasta el final y os deseo de corazón que podáis mejorar vuestra relación de pareja.