Seguro que en alguna ocasión te has encontrado con alguien maleducado y grosero, y has querido enviarle a la otra punta del mundo o a una isla desierta. Por desgracia, hay gente que parece no tener sentido común, ni sabe tratar a los demás con el respeto exigible.
¿Cómo lidiar con personas maleducadas?
Pero estas situaciones son parte de la vida y también son oportunidades para demostrar a los demás que tú eres una persona inteligente, con dos dedos de frente y que sabe lidiar con estas pequeñas trabas del día a día. Así que, la próxima vez que te encuentres con una persona maleducada o grosera, respira profundamente y sigue estos consejos.´
1. No te lo tomes como algo personal (aunque lo sea)
Es normal que te enfades cuando alguien es maleducado, especialmente si hace referencia a ti en sus comentarios ofensivos. Pero por suerte, tienes la posibilidad de decidir cómo reaccionas. No dejes que esto te afecte. Puedes ver el problema como suyo y no como tuyo. Si te lo tomas de forma personal y respondes mal, caerás en su juego y serás más vulnerable.
2. Averigua el porqué
Las personas suelen tener sus motivos cuando reaccionan de esta manera, y en muchas ocasiones suelen ser malentendidos. Es posible que hayan tenido un mal día o que tengan prisa. También es posible que no se hayan dado cuenta de su actitud. ¡No sabrás el verdadero motivo hasta que lo preguntes! Por tanto, mantén la calma y simplemente pregúntale: “Me he sentido un poco molesto con tu actitud/comentario . ¿Hay algún motivo por el que me has tratado así?”. Puede que la respuesta te sorprenda.
3. Recuerda, tú también has sido una persona maleducada en alguna ocasión
Igual en esta ocasión la culpa no es tuya, pero seguro que alguna vez en tu vida has sido grosero, ofensivo o hiriente con alguien. Eso no quiere decir que seas una mala persona. Además, en ocasiones, podemos malinterpretar a los demás o sentirnos ofendidos por algo que han hecho sin darse cuenta. Por tanto, la próxima vez que alguien sea grosero contigo, recuerda que esa persona es humana y su comportamiento en ese momento no quiere decir que sea una mala persona.
4. Sé objetivo y analiza el comportamiento grosero
Así que alguien fue grosero y maleducado contigo. ¿Qué dijo? ¿Había alguna razón para ello? Si miras la situación de manera objetiva, puede ser que no tenga sentido la situación. Pero algunas veces puede haber una causa o motivo. Ser objetivo te permite redirigir la situación en vez de hacer el problema más gordo.
5. No seas melodramático
En estas situaciones, ¿sientes ganas de explotar contra la persona mal educada? No lo hagas. Quítale hierro al asunto y no te rebajes a ese nivel pues solo empeorará la situación. Mantén tu dignidad intacta para que la situación no se vaya de las manos y seas tú el culpable. La prudencia y dejar un tiempo para reflexionar suelen ser los mejores aliados para estas situaciones.
6. Déjalo estar y vete
Este punto tiene que ver con el anterior, pues la grosería puede ser hiriente, pero perder los papeles por ello va a perjudicarte a ti. Para evitarlo, y si es posible, puedes marcharte del lugar y pasar del tema, ya que es la mejor manera de evitar la situación y a la persona maleducada o grosera.
Además, si eres un extraño, no tendrás que tratar con esa persona nunca más. Por el contrario, si eres amigo o conocido, pronto aprenderán que con esa actitud no llega a ningún lugar. Posiblemente no se comporten así contigo en las próximas ocasiones.
7. Considera dar ayuda
Las groserías pueden ser simplemente un caso de malos modales. Pero, habitualmente, la persona que es grosera o maleducada contigo se siente frustrada por algo, y si eres capaz de ayudarle con su frustración, verás como esa cuestionable actitud se convierte en una actitud de gratitud instantáneamente.
8. Entiende la grosería como un hábito
Algunas personas que son groseras, maleducadas y ofensivas siempre tienen esta actitud. Cuando la grosería se convierte en un hábito, puede ser difícil de evitar incluso si quieren evitarlo. La actitud de desprecio hacia los demás nunca debe ser tomada como algo personal, simplemente es un patrón difícil de romper.
9. No fuerces un cambio
No puedes hacer que alguien sea cortés si no quiere. De hecho, intentar cambiarle podría empeorar su comportamiento. A veces la mejor opción es aceptar que el problema es suyo y que ya encontraran la solución, o no. La opción de cambiar, finalmente, es una decisión puramente personal.
10. Lucha contra la grosería con amabilidad
No dejes que la grosería de alguien te haga responder de la misma manera. La mejor manera de reaccionar contra ello es una actitud amistosa y amable, pues le permite a la otra persona que se calme y ajuste su comportamiento al tuyo.
Newsletter PyM
La pasión por la psicología también en tu email
Únete y recibe artículos y contenidos exclusivos
Suscribiéndote aceptas la política de privacidad