¿Alguna vez te has parado a pensar por qué cambiamos cuando estamos con otras personas? ¿Por qué nos cuesta tanto ser nosotros mismos? Y aquí, es cuando aparece la típica situación en la que estamos con otras personas, nuestra pareja, jefe, etc… y queremos hacer o decir algo y una voz aparece en nuestra cabeza que nos dice: “¿le parecerá mal?”, “¿se enfadará conmigo?”, “¿me dejará de querer?” y así una lista, a veces, interminable de dudas que hacen que al final, hagamos y digamos exactamente lo contrario de lo que habíamos pensado en un primer momento.
Pues bien, en todas y cada una de esas situaciones, podemos elegir entre ser fieles a nosotros mismos o traicionarnos. Cuando hablamos de fidelidad creemos que sólo se refiere al hecho de no traicionar a otras personas, pero ser fiel a uno mismo es lo que debería ser. Como una forma de vida donde la base es conocerse a sí mismo y que haya coherencia entre lo que pensamos o decimos con lo que finalmente hacemos. Por eso es importante conocernos a nosotros mismos, para saber cuáles son nuestros valores y nuestros principios. Se trata de entender primero nuestro mundo interno para luego relacionarnos con el mundo externo.
¿Por qué nos pasa esto?
Pueden ser muy distintos los motivos que llevan a una persona a no ser fiel a sí misma, en función de su entorno, su educación, su cultura, etc… Uno de los motivos más comunes es el miedo, miedo a que nos rechacen, nos critiquen o nos juzguen. Todos sentimos la necesidad de encajar de alguna manera o en alguna medida en diferentes ámbitos. Muchas veces estamos dispuestos a decir algo que no pensamos o actuar de la forma exactamente contraria a cómo realmente lo haríamos con tal de conseguir la aceptación, aprobación o un buen gesto de otra persona.
Otro importante motivo es que a veces simplemente no sabemos quiénes somos. Todos creemos saber quiénes somos, pero la realidad es que en muchas ocasiones no lo sabemos, actuamos por impulsos o por inercia o por lo que se supone que se debe hacer o lo que se espera de nosotros y ahí es muy difícil conocerse y ser coherente.
Por otro lado, está nuestro saboteador. Todos tenemos uno que se ha ido alimentando y que nos hace ver que a veces no seremos capaces, que no somos suficientes o que para que nos quieran debemos hacer ciertas cosas, aunque no estemos de acuerdo.
¿Y qué podemos hacer entonces?
Dos son las únicas claves para trabajar en ser fiel a uno mismo:
1. Sé coherente
Que vaya acorde lo que piensas, con cómo te sientes y cómo acabas actuando en las situaciones de tu día a día. Cuando estés ante una situación en la que tengas que tomar una decisión o dar una respuesta, párate para no actuar de forma impulsiva o por inercia, tómate unos minutos y pregúntate, si soy coherente conmigo mismo, ¿qué haría? Si mi amiga me dice que salgamos a cenar y no me apetece, pero voy, no estoy siendo coherente. Quizás decirle, hoy me encuentro cansada, me quedaré en casa. Quizás otro día. Eso igual es ser más coherente conmigo y me sentiré mejor.
2. Conócete
Es muy difícil que una persona sea fiel a sí misma si no sabe quién es, encuentra tus motivaciones, tus metas en la vida, tus deseos y comienza con algo tan sencillo como vivir sin mascara o sin miedos. A veces tampoco se encuentra a la primera. Hasta encontrar nuestras metas de vida, nos equivocamos muchas veces. Dar en la clave no es siempre sencillo. Al ser fiel a ti mismo también mejora tu autoestima y la autoconfianza en sentirnos capaces de conseguir y decidir lo que nos propongamos.
- Sólo tendremos relaciones sanas y verdaderas si podemos ser fieles a nosotros mismos.
- Si renuncias a partes de ti por salvar una relación, estarás salvando la relación, aunque sin garantías pero seguro te estás destruyendo a ti mismo.
- No ser fiel a uno mismo en nuestras relaciones, a largo plazo conlleva mucho malestar.
- Quizás a veces descubras que las personas te aceptan, quieren y respetan más cuando eres fiel a ti mismo que cuando tratas de agradar y te transformas en lo que no eres.
No todo el mundo entenderá que seas fiel a ti mismo, sobre todo si eso no va en su beneficio, pero seguro te ayudará a conseguir tu propio beneficio y bienestar.