Estar al día de la actualidad supone un acto tremendamente automático, que podría responder a la necesidad de que hay que estar informado de lo que ocurre en el mundo. Millones de personas, independientemente del país en el que residan, consultan, varias veces durante la misma jornada, las novedades informativas que los medios proporcionan.
En ellos, se exponen de forma cruda, morbosa y dramática, acontecimientos y circunstancias que están ocurriendo en todo el globo. Independientemente de dónde esté sucediendo, si es lo suficientemente escabroso, se hará eco en tus oídos. ¿Te has cuestionado alguna vez qué te aporta tener toda esta información y, al mismo tiempo, la repercusión que tienen sobre tu vida?
- Te recomendamos leer: "Protégete frente a la sobreexposición a las noticias"
La llamada de las noticias morbosas
Cuando observas el programa en el que te exponen lo que se supone que es lo más relevante que ha sucedido en el planeta, y ves que 9 de cada 10 son calamidades y sucesos desagradables de todo tipo, que únicamente reflejan el lado oscuro de la vida y del ser humano. Cuando te sometes a esta influencia negativa, tu mente recibe mensajes subliminales como:
• La vida es un lugar horrible para vivir. • Las personas son terribles. • Todo lo que sucede son desgracias.
Empezando porque el nombre de sucesos está totalmente fuera de lugar. Debería llamarse, para ponerte sobre aviso: «Los dramas de hoy», o «Las catástrofes del mundo», que serían nombres mucho más reales. Vamos a ver la explicación a nivel neurológico por la que un sinfín de individuos siguen cayendo en la trampa de ver «Las desgracias del día». La razón es la misma que cuando acontece un accidente de tráfico, las personas al pasar cerca de él, reducimos la velocidad y miramos fijamente, formando en ocasiones atascos y enormes filas de coches solo por ver lo que ha pasado.
En general, se piensa erróneamente que hacemos esto por el morbo, por ver si hay sangre o cosas verdaderamente fuera de lo normal. Lo cierto, es que la ciencia hoy sabe que cuando hay un accidente y vas más despacio con el coche, así como la mayoría de personas que van delante y detrás de ti, lo haces con una única intención inconsciente, muy útil. Observar todos los detalles para ver, asociar y discernir lo que pasó con un único y vital fin: que esto no me pase a mí o a mi familia, y tiene sentido.
Pues con el telediario pasa exactamente lo mismo. Cuando lo miras, realmente estás procurando ver, sin darte cuenta, todo lo escabroso que tiene lugar para integrar de alguna forma la manera de evitarlo y que eso no te suceda a ti. Lo que sucede con esto es que en tan poco tiempo ves tantas cosas improbables de sufrirlas tú o algún miembro de tu tribu, que tu cerebro no es capaz de digerirlo todo. Por lo que esta basura se queda dentro de ti, te impregna, te condiciona y se te queda grabada. Y con esto no consigues Nada útil. Esto lo desarrollamos en la serie completa de 7 libros “Abre los Ojos”.
Liberar nuestra mente
Es por eso que si empezaran a dar noticias agradables y positivas acerca de hechos en los que se muestra la bondad de la raza humana, la capacidad de superación, la gran creatividad que tenemos, etc., rápidamente disminuiría la audiencia porque para el cerebro reptiliano (encargado de la supervivencia) realmente no supondría una ayuda para sobrevivir y, por lo tanto, no le atraería tanto.
Lo cierto, es que la probabilidad de que a una persona promedio, como somos tú y yo, nos caiga una bomba encima, o muramos atropellados por un tren, o secuestren nuestro avión es posiblemente de 1 entre 1000 millones, si no más. Así que de ti depende seguir recibiendo ese flujo de oscuridad y enfoque sesgado, si es que aún lo seguías viendo. Recuerda que estar informado de lo que sucede en el mundo es básico, pero puedes ser selectivo y ponerte a dieta informativa, según tu único y propio criterio. En tan solo unos días notarás el cambio.
Si deseas saber sobre el mundo macroeconómico selecciona portales web que realmente te hablen de una forma neutra, observando tanto la parte constructiva (que habla de crecimientos y posibilidades) como la parte que marca tendencias económicas de mercado. Si quieres informarte y saber de temas de salud, o cualquier otro ámbito, ya sabes que hacer: buscar información. ¡Hoy nos sobra! Responsabilízate de seleccionar tus propios libros, autores que realmente te aporten confianza, vídeos en Youtube, conferencias presenciales, cursos… Y esto irá configurando tu nuevo libre y real "tú". Deja ya de permitir que otros te metan en la cabeza lo que a ellos les interesa.
