Igual que existen diferentes tipos de personas, existen diferentes tipos de mentes. Hay individuos que son más reflexivos, otras más prácticos. También hay personas más abiertas y otras menos flexibles e intransigentes. Algunos autores, como por ejemplo Howard Gardner o Walter Riso, han propuesto clasificaciones sobre los diferentes tipos de mentes.
En este artículo las repasaremos y explicaremos cuáles son sus características.
La mente, más allá del cerebro
Nuestro cerebro es un órgano más de nuestro cuerpo que contiene diferentes estructuras y en él coexisten millones de neuronas. No obstante, nuestra mente no tiene ni peso ni tamaño, es nuestra percepción, la conciencia, nuestras ideas, nuestros pensamientos…
Gracias a nuestra mente le damos sentido a nuestra vida, y los diferentes tipos de mente determinan cómo interpretamos y nos relacionamos con el entorno.
Tipos de mentes
¿Pero, cuáles son estos tipos de mentes? En las siguientes línea te lo explicamos.
Clasificación de la mente según Walter Riso
El psicólogo y escritor, Walter Riso, en su obra “El poder del Pensamiento Flexible”, afirma que existen tres tipos de mente: flexible, líquida y rígida.
1. Mente rígida
La mente rígida e inflexible se caracteriza por la intransigencia del individuo, que piensa que siempre tiene la razón, son personas impenetrables. Su rigidez mental les convierte en sujetos de pensamiento inmóvil. En su percepción de la vida, piensan que van siempre por el camino correcto y son ajenas a la realidad que les envuelve. Son tozudas y poseen una gran resistencia a nuevas creencias y a las opiniones de otros.
Se dejan llevar fácilmente por los prejuicios o razonamientos equivocados y anacrónicos. Su falta de reflexión les lleva a procesos de pensamiento que están distorsionados porque sus conceptos, creencias profundas y valores están sesgados. Suelen ser personas autoritarias e irascibles. Tienen una baja tolerancia a la frustración, son susceptibles a vivir malas relaciones interpersonales, temen a la incertidumbre y pueden estresarse y deprimirse fácilmente.
2. Mente flexible
La mente flexible es lo opuesto a la mente rígida, pues son personas abiertas de pensamiento. No ven la vida de forma dicotómica, es decir en extremos, sino que la entienden por sus diferentes matices. Posee unas creencias básicas a partir de las cuales obtienen diferentes formas.
Son las típicas personas que tienden a reinventarse, crecer, actualizarse, dudar, reflexionar y a relacionarse con el medio en el momento presente. Entienden que todo el mundo se equivoca y entienden sus límites, así como los problemas que pueden surgir a lo largo de la vida, por lo que intentan solucionarlos. Son personas que se adaptan al cambio con facilidad y aprenden de las experiencias de la vida diaria.
3. Mente líquida
La mente líquida es un tipo de mente insustancial, que no posee una base sólida. Estos sujetos se acomodan al entorno pero no lo hacen por voluntad propia, sino que se dejan llevar, pues no poseen espíritu crítico ni fortaleza interior. No son individuos consistentes, ni tienen puntos de referencia por lo cuales guiarse.
Los tipos de mente según Howard Gardner
Howard Gardner, conocido por su teoría de las Inteligencias Múltiples, no solamente propuso un modelo polifacético de la inteligencia, sino que éste, en su obra “Cinco mentes para el futuro”, ofrece una visión pluralista de la mente.
El autor piensa que cada persona posee diferentes estilos de resolución de problemas y diferentes mentes que tienen un orden de adquisición que depende de la etapa del desarrollo en el que el individuo se encuentre. El reto de la educación es formar a personas que posean los siguientes tipos de mentes.
4. Mentes disciplinadas
Este tipo de mente se entiende que es disciplinada en el sentido de no memorizar sino a comprender y solucionar problemas antes no estudiados, y en el sentido de la adquisición de hábitos que le permitan realizar un avance constante en el aprendizaje y el dominio de una técnica.
El nombre disciplinado puede conducir al error si se entiende como “metódico”. Ahora bien, Gardner piensa que en los colegios e institutos se estudian materias y no disciplinas (de ahí el nombre). Las materias se memorizan sin más, pero las disciplinas tienen que ver con un enfoque profesional futuro.
5. Mente sintética
Este tipo de mente se vuelve especialmente importante en la actualidad, pues las nuevas tecnologías pueden llevar a un exceso de información. Frente a este exceso de información, las personas con una mente sintética son capaces de resumirla con precisión y utilizar solamente aquella información relevante y productiva.
6. La mente creativa
Como su nombre indica, la mente creativa está relacionada con la creatividad y la capacidad de ser original y formularse preguntas nuevas sobre diferentes temas de cada disciplina. Son personas que desarrollan visiones nuevas, distintas a las ya existentes.
7. Mente respetuosa
Este tipo de mente es clave en las relaciones interpersonales y para crear un ambiente de convivencia propicio, pues permite tolerar las diferencias, ser empático y mostrar interés y afecto por los demás. Fomentar este tipo de mente es una parte importante de la educación de las personas y su desarrollo social.
8. Mente ética
Se orienta hacia el bien y hacia los valores de integridad, el interés colectivo y la responsabilidad que conlleva a lograr este objetivo. En educación es necesario para crear individuos emocionalmente equilibrados y que se involucren en las necesidades sociales.
Otros tipos de mentes
Otros autores han propuesto otros tipos de mentes. Por ejemplo…
9. Mente reflexiva
Hay individuos que tienen una gran capacidad de reflexión y tienden a analizar tanto el entorno como su conducta o sus sentimientos de uno mismo. Este tipo de personas suelen ser más creativas y emocionales, y no suelen encajar en empleos monótonos. En cambio, destacan en otras profesiones como escritores, pintores o músicos.
10. Mentes prácticas
Las mentes prácticas son más influenciables por el entorno y carecen de pensamiento crítico. Son individuos que se adaptan a empleos que necesitan menos estimulación mental o que requieren obediencia, como por ejemplo: operarios de fábrica o policías.