Conductismo

El conductismo es una de las corrientes de la Psicología más importantes de la historia de esta ciencia. Este enfoque propone una aproximación a lo psicológico fundamentada en los hechos objetivos y observables, y rechaza totalmente los métodos introspectivos en los que la persona habla acerca de lo que siente o en qué piensa, al ser esto subjetivo.

Además, los conductistas se oponían al psicoanálisis por su carácter fuertemente especulativo y metafísico, además de por estar centrado básicamente en el estudio de "estructuras psíquicas" que no se correspondían directamente con los actos observables de una persona.

Se dice que el conductismo transformó la Psicología en la ciencia de la conducta, sin poner el foco en los procesos mentales. Esto hizo que a mediados del siglo XX apareciese una corriente de la Psicología que quiso rellenar este vacío, lo cual dio paso al cognitivismo. A pesar de ser una reacción al conductismo, el cognitivismo no niega los descubrimientos de este, y además adopta buena parte de su metodología.

Entre los investigadores más importantes del conductismo destacan principalmente B. F. Skinner y John B. Watson, si bien otros científicos anteriores, como Iván Pávlov y Edward Thorndike, también realizaron importantísimas aportaciones a esta corriente.