¿Es magia la terapia de EMDR?

De una forma general y resumida, se puede decir que EMDR es el nombre de un Modelo de terapia psicológica focalizada en el trauma que utiliza, entre otras cosas, la estimulación bilateral (a través de los movimientos oculares) para cambiar la sensibilidad asociada a eventos o situaciones traumáticas y volver a procesar la experiencia emocional que nos dejaron con el objetivo principal de sanar el sufrimiento.

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Las características de la intervención con EMDR

EMDR es el acrónimo por sus siglas en inglés para ‘Eyes Movement Desensibilization and Reprocessing’, lo que en español se traduce como ‘Desensibilización y Reprocesamiento mediante movimientos oculares’.

He escuchado a muchas personas decir: “esto de sanar ‘solo’ moviendo los ojos es magia”. Y yo me pregunto... ¿Qué es la magia? Siguiendo la definición dada por la Real Academia Española de la Lengua, la magia se puede definir como un arte o ciencia oculta que valiéndose de medios naturales, (ciertos actos o palabras), obra efectos que parecen sobrenaturales.

Aunque al principio de mi experiencia personal con EMDR también la viví como mágica, actualmente puedo decir que nada está más lejos de la realidad. Prueba de ello está en el fuerte apoyo empírico conseguido a través de las investigaciones realizadas a nivel internacional en estos más de 30 años y los numerosos estudios científicos publicados sobre los efectos positivos del tratamiento en distintos problemas de salud mental, psicoemocional, y somática.

Cuando empecé a investigar un poco más sobre el trauma y cómo EMDR puede ayudar, una de las cosas que más claridad me dio fue una de las ideas escritas y desarrolladas por la Dra. Francine Shapiro (2019), explicando que un trauma u otra experiencia de vida adversa pueden alterar el sistema de procesamiento de la información de la persona que lo experimenta, lo que provoca que sus percepciones se almacenen de forma dependiente del estado alterado que provocó y se manifiesten mediante síntomas pronunciados de diferentes trastornos, incluyendo el Trastorno por Estrés Postraumático.

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Comprendiendo el trauma

La Terapia EMDR puede ayudar a todas las personas: niños, adolescentes y adultos a sanar diferentes tipos de ‘traumas’ o heridas psicológicas y emocionales que una vez que ocurrieron no se procesaron y siguen generando sufrimiento en la persona que las vivió.

Usualmente, se suele llamar Trauma -con T mayúsculas- a eventos vitales inesperados y no controlados por la persona que tienen un gran impacto en su forma de sentir, pensar y actuar; ejemplos de esto pueden ser experiencias de guerra, accidentes de tráfico o desastres naturales, violaciones u otros abusos sexuales.

Además, en EMDR se habla y trabaja también con el llamado trauma -con ‘t’ pequeña, que se refiere a diferentes experiencias adversas de la vida de una persona que tienen un impacto emocional importante (suelen ser cuestiones relacionales). Se viven intensamente y también dejan una ‘huella’ cerebral de emociones, pensamientos y sensaciones que se activan en situaciones del presente que de alguna manera las ‘despiertan’.

En mi experiencia con EMDR estoy trabajando con personas con diferentes dificultades o bloqueos. Ofrece una aproximación terapéutica valiosísima para trabajar, reprocesar y aliviar numerosos síntomas de estrés emocional que pueden llevarnos -por ejemplo- a las crisis de ansiedad, los diferentes tipos de depresión, o a sentimientos intensos de angustia asociada a diferentes momentos vitales. Así mismo, EMDR es poderosa procesando temas personales, desde una falta de autoestima o auto aprobación hasta abusos infantiles, una inmigración traumática o pérdidas emocionales importantes como un despido improcedente, un divorcio o el fallecimiento de un ser querido, solo por poner algunos ejemplos.

Actualmente, la Terapia EMDR ha dejado de utilizarse de forma aislada como una simple ‘técnica’ de terapia (cómo se empezaba diciendo en este artículo) para convertirse en un abordaje psicoterapéutico integral, completo, sólido y respaldado por la comunidad clínica y científica. De aquí la importancia de acudir a terapeutas avalados en España por la Asociación de EMDR, organización que sigue un riguroso proceso de cualificación y certificación para garantizar la seguridad de las personas que se deciden por esta terapia para superar eventos traumáticos o emocionalmente estresantes de sus vidas, consiguiendo así un mayor bienestar vital general.

Da un paso para ti; termina con tu sufrimiento, es posible; la clave está también dentro de ti. EMDR puede ayudarte estimulando tu cerebro: es tu mente la que mejor sabe el camino para sanar y ella nos lo enseñará.