¿Qué hacer ante el miedo al examen práctico de conducir?

Sentir miedo ante la perspectiva de examinarse para el carnet de conducir es algo mucho más habitual de lo que parece. Este tipo de examen requiere una alta concentración y una gran capacidad de reacción y de maniobra, así como de gestión de las emociones negativas que puedan surgir. Por tanto, es normal que sintamos cierta ansiedad a la hora de examinarnos.

Como en todas las situaciones en las que entran en juego ansiedad, miedos e inseguridades, acudir al psicólogo puede ayudarnos. La terapia psicológica puede contribuir a que estemos más relajados a la hora de afrontar este momento decisivo, así como a gestionar nuestras emociones y potenciar nuestra capacidad de concentración y de coordinación. Veamos cómo.

¿Cómo afrontar el miedo al examen para el carnet de conducir?

Es muy fácil caer en un círculo vicioso de miedo y angustia ante la perspectiva de tener que presentarse al examen práctico de conducir. Este tipo de reto está vinculado a una experiencia novedosa en la que hay mucho en juego: no solo la posibilidad de sacarse el carnet de conducir, sino también la propia seguridad o incluso la de los demás, ya que un vehículo de esas proporciones puede resultar mortal, y esta idea tiende a atraer hacia sí toda clase de pensamientos catastróficos y sesgados.

A continuación, te dejamos una serie de ideas y consejos que puedes aplicar si te sientes sobrepasado/a por la idea de realizar el examen del carnet de conducir.

1. Apúntate a la autoescuela si todavía no lo has hecho

Como en todos los miedos, no se puede afrontar todo de golpe. Lo mejor es ir abriéndose paso gradualmente; en este caso, la acción más pertinente para ello es apuntarse a la autoescuela de una vez por todas. Si no das este primer paso, difícilmente conseguirás superar la ansiedad que te supone enfrentarte al examen.

Nadie nace enseñado. Asistir a las clases te ayudará a ir entendiendo qué supone conducir un vehículo, e irás penetrando paulatinamente en ese mundo que tan sobrecogedor te resultaba semanas antes. Piensa que cuando te presentes al examen tendrás muchos más conocimientos de los que tienes ahora.

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2. Desconecta y descansa sin obsesionarte

A la hora de prepararse mentalmente para un examen de conducir, muchas veces menos es más. Estar pensando todo el día en el examen no te ayudará a afrontarlo mejor. Al contrario; los pensamientos recurrentes son una manera extraordinaria de gastar energía de forma inútil y, además, no solucionan nada.

En lugar de eso, intenta realizar actividades que te resulten relajantes y placenteras y desconecta. Verás cómo, después de unas horas sin ese molesto pensamiento en la cabeza, te sientes mucho más preparado para afrontar el tan “temido” examen.

Otro factor muy importante es el descanso. Dormir bien hace que nos sintamos con más energía y de mejor humor al día siguiente, por lo que planifica adecuadamente tus horarios de sueños y respétalos.

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4. No trates de rebajar la ansiedad con sustancias

Es más que probable que no se te haya ocurrido afrontar el examen consumiendo alcohol o drogas; seguramente, tienes muy claro que este tipo de sustancias harán que tu memoria y tu capacidad de reflejos se vean mermadas. Todo esto no te ayudará, naturalmente, a aprobar el examen.

Sin embargo, hay personas que acuden a sustancias que juzgan inofensivas, como el tabaco. Se trata de un error, puesto que, si bien el tabaco no afectará tu capacidad de reacción, sí que te hará entrar en el círculo vicioso de la ansiedad debido al síndrome de abstinencia y al temor a no haber consumido la nicotina suficiente como para "relajarte", y esto no te ayudará en absoluto a la hora de relajarte.

Mucho mejor utilizar técnicas de relajación fáciles de realizar, como la respiración diafragmática o la relajación muscular de Jacobson.

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5. No seas duro contigo mismo

La culpa no te ayudará para nada a la hora de mejorar y prepararte para el examen. Analizar tus errores está bien, siempre y cuando seas comprensivo contigo mismo y entiendas que cualquier equivocación puede ser el punto de partida para un aprendizaje.

Así pues, no seas duro contigo mismo. Todos nos equivocamos y cometemos errores, y culparte no te ayudará a estar más preparado para afrontar el examen del carnet de conducir; al contrario, puede generarte sentimientos de frustración que hagan que abandones el proceso.

6. Consulta con un especialista sobre la posibilidad de sufrir una fobia

Siempre es bueno acudir a un terapeuta en situaciones de estrés y ansiedad. Más aún si ves que todas las técnicas y métodos de relajación no surten efecto.

Es importante tener en cuenta la posibilidad de sufrir una fobia, que no es para nada lo mismo que tener miedo. Sentir miedo en determinadas situaciones es algo natural y funcional; la fobia es algo patológico que requiere invariablemente de ayuda profesional.

Las fobias se manifiestan con una sensación de pérdida de control ante el estímulo que la causa, y es muy similar al ataque de pánico. Generalmente, implican síntomas físicos como sudoración, incremento de las pulsaciones cardiacas y mareos, entre otros. Si sientes alguno de estos síntomas cuando intentas afrontar el examen (o incluso al pensar en él), debes consultar con un especialista.

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