Muchas de las nuevas drogas consumidas de manera recreacional en las sociedades modernas surgen partir de investigaciones realizadas para crear fármacos útiles en el tratamiento de patologías; estas formas de uso no previstas pueden llegar a popularizarse hasta generar un problema tanto sanitario como social, algo que da lugr a un contexto de riesgo sobre todo para los jóvenes que frecuentan esos espacios de ocio.
Un ejemplo de este tipo de sustancias lo tenemos en el fentanilo, un opioide sintético similar a la morfina, pero mucho más potente (de 50 a 100 veces) cuyos efectos son principalmente analgésicos.
Si bien esta droga es usada como potente fármaco en el ámbito sanitario y médico por sus efectos paliativos del dolor que puedan sufrir las personas, en muchos países son cada vez los consumidores que hacen usa de esta droga de manera indiscriminada y en contextos lúdicos: festivales, raves, o simples noches de discoteca.
Con el objetivo de conocer más acerca de esta sustancia adictiva, a continuación daremos un repaso a los principales efectos que tiene el consumo de fentanilo en el organismo humano.
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¿Cuáles son los principales efectos del consumo de fentanilo?
En la actualidad, el fentanilo está causando una verdadera epidemia en Estados Unidos durante los últimos años, llegando a ser la sustancia causante de docenas de miles de muertes en un solo año en dicho país.
La principal característica de esta droga es su alta mortalidad en baja cantidad consumida, y en los últimos 5 años, esta sustancia tóxica ha llegado a posicionarse en primer lugar en la lista de opioides causantes de muertes por sobredosis en los EEUU. Como pasa con prácticamente todas las drogas, puede dar lugar a una amplísima variedad de efectos (porque interactúa con nuestro sistema nervioso, el cual es muy complejo y está lleno de características únicas de cada individuo); ahora bien, por lo general, sus efectos más comunes y típicos son los siguientes.
1. Efecto analgésico
Como se ha indicado, los principales efectos del consumo de fentanilo en el consumo humano son los analgésicos, es decir, que reducen o alivian todo tipo de dolores físicos que pueda tener la persona.
Como sucede con otros opioides como la heroína o la morfina, una vez entra en el organismo, el fentanilo se une a los receptores opioides que se encuentran en áreas del cerebro asociadas al procesamiento del dolor y de las emociones.
Este fenómeno es el que provoca que las personas dejen de sentir dolor tanto físico como emocional o sentimental, lo cual a la larga y tras un consumo repetido de esta droga acaba generando una dependencia a la sustancia.
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2. Síndrome de abstinencia
Las personas que son dependientes al fentanilo acaban desarrollando un síndrome de abstinencia cuando cesan el consumo de esta droga, consistente en un deseo irrefrenable de seguir consumiendo fentanilo.
Además de eso, el síndrome de abstinencia al fentanilo es la reacción natural del organismo que tiene cuando la persona deja de consumir la droga y se caracteriza por una serie de síntomas físicos y psicológicos relacionados con estados de malestar, angustia o sufrimiento.
Algunos de los principales síntomas que se experimentan en el síndrome de abstinencia del fentanilo son los dolores de todo tipo en músculos y huesos, el insomnio y las dificultades para dormir, la diarrea, los vómitos, los movimientos incontrolables de las piernas y los escalofríos.
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3. Dificultades para respirar
Debido al efecto analgésico del fentanilo, otro de sus efectos más habituales son las dificultades para respirar, de manera que en los casos más severos, esta droga puede llegar a detener por completo la respiración de una persona.
Esto sucede por la capacidad que tiene esta droga para deprimir el sistema nervioso central y afectando seriamente a la respiración, llegando ralentizar todos y cada uno de los componentes del sistema respiratorio.
4. Sedación
La sedación de la persona que consume fentanilo también es un efecto clásico de la droga y puede suponer de igual manera un perjuicio para la salud y la integridad física de quien la consume.
Este efecto sedante es utilizado en ámbitos clínicos profesionales, sobre todo en operaciones y procesos postoperatorios dolorosos, sin embargo, cuando una persona consume fentanilo sin ninguna supervisión puede llegar a sentir, además de un efecto sedante, una gran somnolencia o aletargamiento.
5. Pérdida de conocimiento
La pérdida del conocimiento es uno de los efectos posteriores o que se dan como consecuencia de la sedación, ya que es muy habitual que la persona que consume fentanilo lo haga sin conocimiento de ningún tipo y sin saber cuál es la dosis recomendada.
En los casos en lo que la persona pierde el conocimiento se pueden producir efectos muy nocivos en el organismo que pueden acarrear verdaderos problemas de salud.
6. Alto riesgo de sobredosis
Como se ha indicado, el efecto del fentanilo en el organismo es tan fuerte que tan solo consumiendo una cantidad pequeña de 2 miligramos de la droga, se puede llegar a sufrir una sobredosis.
La sobredosis de fentanilo puede afectar de manera directa a la respiración de la persona hasta detenerla por completo, lo que puede provocar un estado de hipoxia, caracterizado por la reducción drástica de oxígeno que llega al cerebro de la persona.
En estos casos es habitual que la persona entre en un estado de coma, sufra daños permanentes en el cerebro o incluso que llegue a morir.
7. Euforia
Como sucede con muchas otras drogas, el fentanilo provoca una alteración en sus emociones o en la conciencia de la persona y altera su relación con el entorno y su percepción del mundo que le rodea.
Este efecto puede provocar una gran euforia transitoria en el consumidor, así como una sensación de éxtasis desmedido que puede dar lugar a comportamientos imprudentes o peligrosos.
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8. Confusión
La confusión que provoca un consumo elevado de fentanilo se caracteriza por un estado de desorientación, angustia y sufrimiento en la persona, quien a menudo puede llegar a olvidar donde se encuentra o quien es.
La confusión también se relaciona con la relajación excesiva y con la pérdida de la capacidad para razonar correctamente.
9. Tolerancia
La tolerancia es un efecto fisiológico clásico de la mayoría de las drogas consistente en que tras un consumo continuado, la sustancia pierde efecto y por consiguiente es necesario aumentar la dosis para sentir los mismos efectos.
Esto es particularmente peligroso en el caso del fentanilo, puesto que, como hemos indicado, su uso y abuso puede provocar la muerte incluso en dosis pequeñas.
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