Cuando hablamos de criminología y criminalística es bastante frecuente pensar que ambas palabras hacen referencia a lo mismo o que, en esencia, son pocas las diferencias entre un concepto y el otro.
Sin embargo, la forma en cómo se relacionan con los delitos, lo que estudian y el método investigativo detrás de ambas disciplinas es muy diferente. A continuación veremos cuáles son las principales diferencias entre criminología y criminalística, resumidas y con algunos ejemplos.
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Diferencias más importantes entre criminología y criminalística
Es bastante común pensar, fuera de sus respectivos ámbitos, que la criminología y la criminalística son, esencialmente, lo mismo, o que como mucho una se diferencia de la otra en base a matices.
Sin embargo, esta idea está bastante equivocada, dado que la criminología y la criminalística son disciplinas que, si bien están relacionadas con el ámbito forense, su objeto de estudio, su metodología investigativa, su función de cara a la sociedad e, incluso, sus orígenes, son bien distintos. Vamos a ver estas diferencias con más detalle a continuación.
1. Orígenes y clasificación científica
Aunque la criminología y la criminalística son dos ciencias complementarias, colaborando muy estrechamente en el proceso forense, son muchas las cosas que las diferencias, empezando por sus orígenes.
La criminalística es una ciencia natural, con un fuerte componente empírico. Así pues, se vale mucho del método científico y de la inducción. Tiene sus orígenes en la antigua práctica de la dactiloscopia (estudio de las huellas dactilares) y se inició en el siglo XVII con el desarrollo de la medicina forense. Con posterioridad, además de la medicina, la física, la química y la biología darían apoyo a esta disciplina.
En cambio, la criminología es una ciencia de carácter social, basando su conocimiento en el método deductivo y plantea postulados sobre la conducta desviada de los individuos, entendida en términos legales.
Esta descripción de la conducta humana la hace en base a conocimientos extraídos de la psicología, la sociología, la antropología y la filosofía. Tiene sus orígenes en la época de grandes filósofos como Platón o Aristóteles, pasando por Tomás de Aquino en el siglo XII, quienes se preguntaron sobre cuáles eran las causas de una persona para cometer un delito.
2. Objeto de estudio
La criminalística tiene como objeto de estudio el acto delictivo analizándolo con la aplicación de las ciencias naturales y las ciencias jurídicas, recogiendo toda evidencia física, identificándola y estableciendo conclusiones con apoyo de la medicina, la toxicología, la antropología y otras ciencias.
Es decir, su objeto de estudio es todo aquello que haya dejado la persona que ha cometido el delito y que puedan servir para incriminarle (p.ej., restos de cabello, manchas de sangre en su ropa, tipo de bala, fuerza de la cuchillada...)
En cambio, la criminología tiene como objeto de estudio los patrones de comportamiento del individuo, sus tendencias sociales con respecto al crimen y las consencuencias que pueden ocasionar el mismo en la sociedad. Es decir, se encarga de estudiar el motivo, el porqué de que se haya cometido un delito, buscando y analizando la evidencia o los materiales que den indicio a las pruebas de un caso en particular.
Es por esto que no solo se incluirían dentro de la criminología los motivos que llevan a una persona a cometer asesinatos o robar, sino que también estarían dentro de su campo de estudio el entender qué hace que una persona consuma drogas, que en principio solo le hacen daño a ella, o el suicidarse.
3. En el aspecto legal
Con relación al aspecto legal, la criminalística pretende determinar quién es el responsable del crimen, para que éste reciba el veredicto correspondiente y se le apliquen medidas correctoras, represivas y punibles en base a lo que ha hecho.
Es decir, no entra en por qué la persona se ha comportado cómo lo ha hecho, sino en aportar pruebas para incriminarle y hacerle responsable de sus actos. Sirve para definir la verdad y establecer la pena para el criminal en cuestión.
En cambio, la criminología tiene más que ver con los aspectos no legales del proceso delictivo, es decir, se centra no en el daño hecho o en qué consecuencias legales debería recibir la persona, sino en el porqué de lo que ha hecho y cómo se hubiera podido evitar que cometiera un delito.
Así pues, la criminología adquiere un aspecto de tipo preventivo, con la intención de reducir la delincuencia detectando indicios de conductas desviadas que pueden evolucionar a graves actos antisociales. Intenta entrar en la mente de los criminales para poder regular las conductas que no son apropiadas de cara a la sociedad.
4. Forma de investigar
En criminalística la forma de investigar es de tipo práctico, examinando la escena del crimen meticulosamente. Haciendo uso de técnicas especializadas procedentes de las ciencias forenses, la medicina, la biología y la química permite recrear cómo se dieron los hechos, escefinicándolo a partir de los indicios que hayan en la víctima, la habitación u otros aspectos.
La criminología, a nivel de proceso investigativo, es más bien teórica, dado que tiene la cualidad de estudiar el comportamiento, las causas, las consecuencias y las reacciones del crimen, tanto de los involucrados como de la sociedad y del gobierno. Esta ciencia se apoya en las teorías de la psicología, especialmente de la clínica, la forense y la social, junto con conocimientos procedentes de la antropología, con la intención de buscar las causas posibles y las soluciones viables.
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5. Pregunta a la que responden
Como hemos podido observar hasta aquí, criminología y criminalística presentan varias diferencias en aspectos tales como su objeto de estudio y de las ciencias en las que se fundamentan, con lo cual es de esperar que den respuestas a preguntas muy diferente.
Por un lado, tenemos que la criminalística pretende responder a las preguntas de cómo, cuándo, dónde y quién cometió un acto delictivo, de la índole que sea. En cambio, la criminología responde al porqué de que se haya cometido ese delito. Es decir, como ya hemos comentado antes, trata de responder a qué motivación impulsó a la persona a hacer lo que hizo.
6. Carreras relacionadas
Dadas sus diferencias en cuanto a las ciencias de las que toman apoyo y la forma en la que se relacionan con el proceso delictivo, son muchas y diferentes las profesiones que se relacionan con criminalística y criminología.
Dentro de la criminalística, los profesionales que trabajan en los departamentos de policía, los laboratorios forenses y los hospitales que podemos encontrar son:
- Examinador de la escena del crimen
- Científico forense
- Analista de laboratorio
- Psicólogo forense
- Perito criminalista
En el caso de la criminología, las carreras que se desempeñan en agencias gubernamentales, tribunales y servicios policiales son:
- Agente de drogas
- Agente de libertad condicional
- Especialista en atención a las víctimas
- Investigador privado
- Encargado de litigios
- Agente de inteligencia
- Perito criminólogo
- Mediador familiar y/o penal
- Seguridad privada
- Periodismo de investigación
Referencias bibliográficas:
- Sierra, J.C., Jiménez, E.M. y Buela-Casal, G. (Eds.) (2006). Psicología forense: manual de técnicas y aplicaciones. Madrid: Biblioteca Nueva.
- Ibáñez,V. y Ávila, A. (1990). Psicología forense y responsabilidad legal. En A. Garzón, Psicología Judicial. Valencia: Promolibro.
- Urra, J. (1993). Confluencia entre psicología y derecho. En J. Urra y B. Vázquez (Comps.) Manual de Psicología Forense. Madrid: Siglo XXI.