La relación entre la apatía y el Alzheimer

La apatía es un síntoma clave en el Alzheimer y acelera la pérdida de autonomía.

La relación entre la apatía y el Alzheimer

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Si escuchas la palabra “Alzheimer”, ¿en qué piensas? Probablemente en pérdida de memoria, envejecimiento o confusión. Y, sí, todo eso forma parte del cuadro, pero hay síntomas que a veces no se notan: uno de ellos es la apatía.

Muchas veces ni siquiera se menciona o se sabe lo que ocurre, pero está ahí, y afecta un montón el día a día de las personas que viven con esta enfermedad neurodegenerativa y también de quienes les cuidan. Hablemos, entonces, sobre la relación entre la apatía y el Alzheimer.

El Alzheimer no son solo “olvidos”

Cuando se habla del Alzheimer, la imagen típica es alguien que olvida nombres o que se pierde en lugares conocidos. Pero la enfermedad no se limita a eso. También afecta otras funciones del cerebro, como la atención, el lenguaje o la capacidad para tomar decisiones. Y, más allá de lo cognitivo, hay cambios en el estado de ánimo, en la forma de reaccionar y en la conexión emocional con lo que pasa alrededor.

Algunas personas se vuelven más retraídas, otras se aíslan, y muchas empiezan a perder interés en cosas que antes disfrutaban. Y esto no ocurre necesariamente porque estén tristes, sino porque hay algo en su interior que se apaga. Ahí es donde entra la apatía, un síntoma mucho más común de lo que se cree y que tiene un peso importante en cómo evoluciona la enfermedad.

¿Qué tiene que ver la apatía con todo esto?

La apatía en personas con Alzheimer no es simplemente estar desganado o aburrido, sino que se presenta como una falta real de motivación, de iniciativa, de interés por lo que pasa o por lo que solía gustar. Es como si se desconectaran poco a poco de lo que los rodea.

Un estudio publicado en The Journal of Neuropsychiatry and Clinical Neurosciences mostró que la apatía, incluso cuando aparece solo a veces, se asocia con una pérdida más rápida de autonomía en personas con Alzheimer. Lo interesante es que, según los investigadores, este síntoma fue el que más se relacionó con ese declive, por encima de otros como la depresión o la irritabilidad.

Al parecer, hay zonas del cerebro que se ven especialmente afectadas, como la corteza prefrontal y otras regiones que tienen que ver con cómo nos motivamos o cómo sentimos recompensa al hacer algo. Eso explicaría por qué la apatía aparece incluso cuando la memoria todavía no está tan afectada.

Apatía no es lo mismo que depresión

A veces se confunden. Desde afuera, alguien puede pensar que una persona con Alzheimer está deprimida porque no se interesa por nada, no propone planes o responde con monosílabos, pero no siempre es así.

La depresión suele venir con tristeza, culpa, malestar emocional. En cambio, la apatía es más neutral: no hay sufrimiento evidente, simplemente no hay impulso. No hay ganas, pero tampoco hay angustia.

Y esto es importante, porque no se trata igual. Si se piensa que es depresión cuando en realidad es apatía, se pueden aplicar tratamientos que no ayudan o que no son lo más indicado.

¿Qué se puede hacer con la apatía?

No hay un manual que funcione para todos, pero sí hay varias formas de abordar la apatía para que no se vuelva algo que desborde a la persona ni a quienes la acompañan.

Por ejemplo, las terapias no médicas, como las actividades que estimulan el cerebro o la terapia ocupacional, pueden ayudar bastante. Lo ideal es elegir cosas que tengan sentido para esa persona: no imponer una rutina llena de tareas, sino proponer actividades que tengan que ver con su historia, con sus intereses, con lo que solía disfrutar.

La música, por ejemplo, puede ser bastante beneficiosa. También cosas simples como mirar fotos antiguas, conversar sobre recuerdos o salir a caminar. A veces se necesita insistir un poco, pero sin forzar. Es mejor acompañar y ofrecer, sin esperar grandes respuestas.

En cuanto a los medicamentos, hay algunos que se usan para tratar ciertos síntomas del Alzheimer y que podrían tener algo de efecto sobre la apatía, pero su uso debe ser evaluado caso por caso. No son una solución por sí solos, sino un complemento dentro de una mirada más amplia.

Señales que pueden indicar apatía

Si convives o estás cerca de alguien con Alzheimer, hay ciertas señales que podrían ayudarte a identificar si la apatía está presente:

  • Ya no propone hacer nada, ni siquiera cosas que antes disfrutaba.
  • No se involucra en las conversaciones o en lo que pasa a su alrededor.
  • Parece indiferente ante buenas noticias o situaciones emotivas.
  • Necesita que le insistan para empezar cualquier actividad, incluso las más simples.
  • No reacciona con entusiasmo ni aunque se lo motive desde afuera.

Entender que esto no es “pereza” ni “desinterés” es súper importante, pues es parte de lo que pasa en el cerebro con esta enfermedad, y acompañar desde ese lugar cambia mucho la forma en que se vive este proceso.

Cómo acompañar a una persona con Alzheimer sin agotarse

Quien cuida a una persona con Alzheimer sabe que hay días más livianos y otros que se hacen cuesta arriba. Y cuando aparece la apatía, la cosa se puede volver más pesada, porque es muy fácil tomárselo personal.

Aquí te indicamos algunas ideas que pueden ayudar:

  • No esperar respuestas inmediatas, pero seguir ofreciendo contacto y cariño.
  • Ajustar las actividades al nivel de energía del día.
  • No juzgar la falta de entusiasmo como rechazo.
  • Pedir apoyo cuando sea necesario, tanto emocional como profesional.
  • Recordar que cada pequeña conexión vale, aunque sea sutil.

Como hablamos antes, la apatía es uno de esos síntomas del Alzheimer que pasa desapercibido hasta que empieza a pesar en el día a día. Y cuando aparece, suele ir de la mano con una pérdida más rápida de autonomía. Reconocer y entender de dónde viene ayuda a tomar decisiones más acertadas y a acompañar de forma más cuidadosa.

No siempre se puede hacer que vuelva el interés o la iniciativa, pero sí se puede estar cerca, proponer, estar atentos y, sobre todo, comprender que lo que le pasa a esa persona no es por falta de voluntad. Es el cerebro cambiando, y nosotros podemos estar ahí sin exigir, solo acompañando desde un lugar más consciente.

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  • Bravo, M. P. (s. f.). La apatía, el síntoma más frecuente en la enfermedad de Alzheimer. Sanitas.
  • Dolan, E. W. (2025, julio 17). Persistent apathy predicts faster functional decline in Alzheimer’s disease. PsyPost - Psychology News.
  • Wu D, Zhang B, Chang Y, Huang S. (2024, diciembre 23) Apathy Associated with Alzheimer's Disease. Curr Alzheimer Res.

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Javier Ares Arranz. (2025, agosto 25). La relación entre la apatía y el Alzheimer. Portal Psicología y Mente. https://psicologiaymente.com/neurociencias/relacion-entre-apatia-y-alzheimer

Psicólogo

Madrid
Terapia online

Psicólogo General Sanitario con diferentes estudios de posgrado que avalan su especialización en Terapia Cognitivo Conductual y técnicas de Tercera Generación para el tratamiento de la depresión, los trastornos de ansiedad, terapia de pareja y habilidades sociales.

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