La blastoestimulina es un medicamento popular en el tratamiento de quemaduras y heridas cutáneas. Uno de sus componentes principales, la centella asiática, ha sido utilizada como hierba medicinal desde hace unos cinco mil años.
En la actualidad son especialmente conocidos los óvulos de blastoestimulina, utilizados para curar infecciones y otros problemas vaginales.
En este artículo explicaremos qué es la blastoestimulina, cómo se usa y cuáles son sus propiedades medicinales. Asimismo revisaremos sus contraindicaciones y sus posibles efectos secundarios.
¿Qué es la blastoestimulina?
La blastoestimulina es un medicamento frecuentemente utilizado para acelerar la cicatrización de heridas, lesiones y quemaduras de la piel. Se recomienda sobre todo para casos con un componente infeccioso.
La blastoestimulina está compuesta principalmente de extracto de centella asiática y neomicina. En función del formato en que se comercializa tiene otros componentes específicos, aunque sus efectos dependen principalmente de estos dos productos.
La neomicina es un antibiótico que se utiliza frecuentemente en cremas. También puede usarse para tratar problemas bacterianos del estómago si se consume por vía oral.
La centella asiática, una medicina natural
El componente principal de la blastoestimulina es el extracto de centella asiática, una planta herbácea originaria del sudeste asiático y de India, donde también es conocida como “Gotu Kola” y “Brahmi”.
El extracto de centella asiática contribuye a la síntesis de proteínas estructurales y de glicosaminoglicanos, glúcidos con una función conectiva de tejidos.
En las medicinas tradicionales Ayurveda, china y africana se ha utilizado la centella asiática para fabricar cataplasmas con las que curar heridas y quemaduras, así como para tratar psoriasis, varices e incluso cáncer. No obstante no todos estos usos medicinales han sido confirmados por la investigación científica.
La centella asiática también es un ingrediente culinario en la cocina de Asia. En Indonesia, Malasia, Tailandia o Myanmar se usa como acompañamiento para el arroz con curry, en ensaladas y en bebidas refrescantes. También se atribuyen propiedades medicinales a este suplemento dietético.
¿Cómo se usa la blastoestimulina?
La blastoestimulina se utiliza para que las heridas, lesiones, llagas y quemaduras de la piel cicatricen mejor. Es especialmente eficaz cuando existe riesgo de infección bacteriana o cuando ésta ya se ha producido.
La blastoestimulina se puede encontrar en pomada, en polvos, en pulverizador y como óvulos que se introducen en la vagina.
1. En pomada
Aplicada en este formato, la blastoestimulina es útil para ayudar a que las heridas cicatricen más deprisa, incluyendo las heridas quirúrgicas y los injertos de piel. Esta propiedad se debe a la acción de la centella asiática, que tradicionalmente se ha utilizado de un modo similar.
Las propiedades antibióticas de la blastoestimulina hacen que resulte útil también para curar heridas infectadas, puesto que elimina las bacterias de la piel.
2. En polvo
La blastoestimulina en polvo tiene propiedades y utilidades muy similares a las de la pomada, siendo especialmente eficaces cuando hace falta secar la herida.
La blastoestimulina se aplica entre una y tres veces al día en función de la gravedad de la lesión, independientemente de si se utiliza en polvo o en pomada. Se recomienda limpiar la herida antes de aplicar la blastoestimulina en estos formatos.
3. En pulverizador
Dado que se aplica directamente sobre la piel, el formato pulverizador o aerosol tiene indicaciones muy similares a las de la blastoestimulina en polvo y en pomada, siendo útil para la cicatrización de heridas, quemaduras e injertos.
4. En óvulos
Este formato es muy popular para el tratamiento de problemas vaginales, especialmente de tipo infeccioso o irritativo. Los óvulos se introducen en la vagina, preferiblemente antes de ir a dormir.
Los tratamientos con blastoestimulina en óvulos duran entre 5 y 10 días. En los casos más graves se recomienda empezar con dos óvulos al día; la dosis se reducirá cuando los síntomas mejoren.
Durante el tratamiento hay que evitar los lavados vaginales con sustancias alcalinas puesto que eliminarían el óvulo y anularían su efecto.
La blastoestimulina en óvulos se utiliza para tratar afecciones como la vaginitis, la candidiasis, la vulvitis, la cervicovaginitis, la moniliasis, la tricomoniasis y la leucorrea. También es eficaz para mejorar la cicatrización de heridas en las paredes vaginales que pueden producirse tras relaciones sexuales dolorosas o un parto.
Efectos secundarios y contraindicaciones
La blastoestimulina no produce efectos secundarios graves. Su aplicación tópica puede provocar un ligero escozor en pieles muy sensibles, pero no llega a irritar la piel.
No se aconseja utilizar la pomada o el polvo de blastoestimulina para tratar heridas, lesiones o quemaduras graves o muy extensas. Si se aplica en formato óvulo hay que evitar el consumo de alcohol puesto que su interacción puede provocar vómitos, hipotensión, sudoración y dificultades respiratorias.
Es preferible no usar blastoestimulina durante el embarazo y la lactancia; aunque no se ha demostrado que pueda afectar a la madre o al bebé, tampoco se ha descartado esta posibilidad.
Antes de tomar blastoestimulina se recomienda consultar al médico; si bien es difícil que este medicamento tenga efectos perjudiciales, es posible que sea ineficaz o agrave el problema si éste es muy grave.