Son muchas las investigaciones que se han llevado a cabo para saber más sobre la felicidad. Más aún en los tiempos que corren, en los que existe una gran obsesión por ser feliz. Los investigadores llevan tiempo tratando de descubrir lo que hace diferentes a las personas felices, porque, por desgracia, no todo el mundo lo es.
Cada uno de nosotros vive la vida de distintas maneras y eso tiene consecuencias positivas o negativas en el estado emocional. Las personas felices tienen su manera de pensar y de actuar, su propia actitud frente a la vida y los demás, y frente a los sucesos que ocurren a su alrededor, lo que les ayuda a mantener un estado de felicidad más duradero.
En el artículo de hoy, vamos a hablar de una investigación realizada por la Universidad de Harvard que ha durado ni más ni menos que 75 años, y que ha pretendido saber cuáles son la clave de la felicidad. Así que sigue leyendo, porque esto te interesa.
El estudio longitudinal de la Universidad de Harvard sobre felicidad
Harvard es la mejor universidad del mundo para estudiar Psicología, y desde 1938 ha llevado a cabo un estudio sobre la felicidad que contó con 268 sujetos. Los resultados fueron publicados en un libro George Vaillant en 2012, un psiquiatra que dirigió la investigación desde 1972 hasta 2004. Durante décadas, los investigadores evaluaron distintas áreas en la vida de los participantes y consiguieron datos de distintas variables, como, por ejemplo, su nivel de inteligencia, su renta, su consumo de alcohol o sus relaciones interpersonales.
De manera resumida, estas son las conclusiones de esta investigación y, por tanto, las claves de la felicidad.
1. Valora el amor por encima de todo
El estudio concluye que no debemos subestimar el poder del amor porque es la clave de la felicidad. El Dr. George Vaillant afirma que hay dos cosas imprescindibles para ser felices: “Una de ellas es el amor. La otra es encontrar la manera de afrontar las situaciones que hacen que el amor se quiera ir”.
Tras el estudio que costó 20 millones de dólares y duró 75 años, el psiquiatra concluye: “La felicidad es amor. Punto y final”. Así que, después de esta afirmación, una cosa debe quedar clara. Hay que abrir el corazón para ser felices.
2. Las relaciones significativas y las conexiones importan mucho
Esto no es nuevo de este estudio, pues muchas investigaciones afirman que la amistad y la familia son sumamente importantes para nuestro bienestar y nuestra felicidad. De hecho, existe evidencia científica que afirma que la buena relación con los compañeros de trabajo tiene un efecto positivo a la hora de reducir el estrés, lo que se conoce como factor protector.
No solo eso, sino que Valian dice “no solamente las relaciones sanas son un buen indicador de la satisfacción en la vida, sino que una fuerte conexión con el trabajo que realizamos nos hace más felices”.
3. No abuses del alcohol
Como cualquier droga, el alcohol puede provocar serios problemas para la salud para la persona que lo consume. No solo eso. sino que, además, es capaz de destrozar vidas. El estudio de la Universidad de Harvard concluye que existe una fuerte correlación entre el abuso de alcohol y la depresión y los problemas emocionales. De hecho, tanto el consumo de alcohol como el tabaco son una de las mayores causas de mortalidad.
Las drogas producen muchos efectos negativos para el ser humano. ¿Quieres saber qué ocurre cuando las consumimos? Pues pincha en este enlace.
4. El dinero no te hace más feliz
Los resultados de esta longeva investigación muestran que el dinero no da la felicidad. Por tanto, es erróneo pensar que debemos trabajar para sacar el máximo beneficio económico.
Como explica el propio Vaillant, “lo realmente importante es estar contento en el trabajo que realizas”.
Pero el dinero no solo no te hace más feliz, sino que te cambia como persona. Te cambia a peor. El dinero corrompe a las personas, que son fáciles de sobornar. Por eso, es importante conocer los resultados de otro estudio llevado a cabo en España, concretamente por un grupo de investigadores de la Universitat Jaume I de Castellón, en el cual se concluye que rechazar un soborno produce más estrés que aceptarlo.
Es habitual que muchas personas piensen que el dinero te hace más feliz. Y claro, tal y como funciona el mundo, el dinero es una necesidad básica. Ahora bien, pensar que cuanto más dinero tenemos más felices seremos es una idea equivocada. El dinero es capaz de hacernos replantear nuestros propios principios, y cada día podemos leer o escuchar noticias de gente que se vuelve corrupta cuando mueve grandes cantidades de “oro verde”.
Además, la frase popular que dice que “el dinero mueve el mundo” es aún más cierta tras conocer los resultados de un estudio de la Universidad de Carolina del Norte (Estados Unidos) que concluye que las personas cambian su comportamiento si hay dinero por medio. De hecho, el grupo de sujetos de su experimento fue capaz de incrementar sus puntuaciones en una prueba verbal cuando había dinero de por medio. Dicho de otra manera, “la pasta” nos hace más listos”.
Puedes saber más sobre estas investigaciones en nuestro post: La ciencia afirma que el dinero es una droga y no da la felicidad.
5. Ser optimista te hace más feliz siempre que seas una persona concienzuda
Según este estudio, el optimismo nos hace más felices. Los investigadores concluyen que “tras observar la evolución de los sujetos, encontramos que los niños alegres y optimistas eran más felices y vivían hasta una edad avanzada”. Pero el mismo estudio, también concluye que las personas concienzudas y responsables mostraron mayores niveles de satisfacción vital. Por lo que el optimismo por sí solo no te hace necesariamente más feliz.
6. Puedes encontrar la felicidad en cualquier momento de tu vida, por lo que nunca es tarde para cambiar
La felicidad tiene mucho que ver con cómo interpretamos el mundo y, por tanto, con nuestra manera de pensar. Hay personas que pueden ser muy infelices durante años, y, como consecuencia de una mala experiencia, comenzar a valorar las pequeñas cosas del día a día.
Esto demuestra que se puede aprender a ser feliz. Dicho de otra manera, es posible hacer cosas para ser más feliz. Si no lo eres, igual debes replantearte tu manera de pensar y tus hábitos diarios. Quizás haces algo mal.
