Lo que está pasando actualmente es que los padres se están enfocando mucho en darle a sus hijos matemáticas, física, trigonometría, y más y están dejando a un lado pedir el mismo ritmo de exigencia para el desarrollo adecuado del autoestima, empoderamiento, habilidades sociales y más recursos necesarios para que los adolescentes puedan afrontar de manera satisfactoria el mundo real.
Tanto adultos en terapia con o sin diagnóstico que en algún momento fueron adolescentes y necesitaron en esa etapa el apoyo incondicional de sus padres, padres que se puedan enfocar en su mundo emocional, sí, si tenían esas zapatillas que tanto querían, sí, si tenían esa ropa de marca que tanto exigían pero lo que ellos no podían nombrar en palabras era que necesitaban que los ayudarán a entender el mundo de los adolescentes, lo superficial que podían ser algunas cosas y lo difícil que era gestionar sus emociones, no entendían porque a ellos les exigían un comportamiento admirable cuando veían que papá mentía, mamá no era justa o los profesores no daban respuestas sustentadas sobre algunas exigencias.
Cuando hay un problema los padres enfocan la solución solo en que el adolescente lo trabaje (aquello que le falta, aquello que no tiene) cuando muchas veces el trabajo es principalmente con los padres, quienes aún no entienden que si ellos generan una respuesta diferente también recibirán una reacción diferente por parte de sus hijos. Es decir si ellos dejaran de actuar desde la ansiedad, la depresión, la sobreprotección, la exigencia, la falta de flexibilidad también sus hijos al no sentirse atacados responderán de otra manera.
Si ya llegó a leer hasta aquí es porque algo resuena con ud. y ya reconoció que algo no esta bien y ese es el primer paso, salir de la negación porque muchos padres saben que no están bien con sus hijos y no hacen nada para cambiar la realidad. Si ud. está leyendo esté artículo es porque tiene un objetivo claro y va por él.
Consejos para la comunicación con un adolescente
Es importante saber que uno no puede dar algo que no tiene, por lo tanto como siempre se ha dicho los padres son los guías, modelos y orientadores de estos adolescentes, son quienes le tienen que dar un modelo de autoestima, empoderamiento, fortaleza emocional y más a sus hijos. Así que a continuación le brindo pautas para poder comunicarse mejor con su adolescente:
1. Recuerde que usted es el adulto
¿A qué me refiero con esto? Que su hijo está dejando de ser niño y como niño tenía ciertas características que actualmente persiste como la impulsividad, los berrinches, las pataletas y más. Sin embargo, ud. es el que tiene que mantener el control, no puede “caer” en las provocaciones, en los comentarios sarcásticos, y sacudidas que le da su hijo.
2. Primero usted
Con su autocontrol emocional: Ud. Es quien tiene que mediante el ejemplo enseñar técnicas de respiración, relajación , solución de problemas, asertividad, habilidades sociales. Así que si ud. No cuenta con todo este repertorio le sugiero primero que trabaje en ud. En terapia individual Como el guía, porque se le va hacer cada vez más difícil lidiar con su adolescente que por naturaleza está hormonal y desequilibrado emocionalmente. “Quiero que él/ella sepa controlarse”. Recuerde primero ud. Con el ejemplo.
3. Sea un soporte emocional
De la misma manera que cuando su hijo era pequeño y hacía berrinches ud. Lo contenía emocionalmente, es decir no le pegaba ni gritaba, de la misma manera ahora lo entiende, lo comprende lo acompaña desde la serenidad y paz a ayudarlo a pasar por esa situación de desregulación emocional.
Pero si ud. grita, golpea, castiga, humilla, denigra, va a recibir una reacción defensiva como respuesta. Ahora ya no es un niño chiquito y pequeño al cual ud. podía cargar y llevárselo, ahora ya creció y a su alrededor está el enamorado “perfecto” que sí lo entiende, los vicios, los videojuegos “donde puedo escapar de este mundo que no me entiende”, o si siento que no cuento con nadie porque mi propia madre o padre no están aquí para mi llega la ansiedad y la depresión.
4. Aprenda a escuchar
Lo primero que solemos hacer es sermonear, cerrarnos en nuestra forma de pensar, criticar, juzgar y como respuesta nuestro adolescente pone un muro enorme y ya no quiere hablar. “mejor me voy con mi amiga que ella sí me entiende”
5. Conecte con su mundo
Los adolescentes tienen un mundo diferente al nuestro, diferentes prioridades, entre a su mundo, interésese por sus gustos y preferencias, intente comprenderlas, aprenda ese videojuego que tanto critica y comparta con su hijo una tarde de videojuegos, apréndase esas canciones que tanto le encantan a su hijo, intenté hacer esos pasos de baile que le parecen tan “ridículos”
6. Tiempo de calidad
Tenga citas con su hijo y participe de su mundo. Asista a las actuaciones del colegio, a las reuniones de los padres de familia, a las actividades que se realizan cada bimestre en la comunidad, en la iglesia, en el centro educativo, hable con su profesora, con sus amigos. Como familia tengan actividades que disfruten todos hacer como los juegos de mesa, deportes, viajes.
7. Conozca a sus amigos
Propicie en casa actividades como una cena, un almuerzo para que conozca a los compañeros de su hijo, en su casa pueden hacer los trabajos grupales, atiéndalos con amabilidad y esté abiertos a conocerlos a ayudarlos en algún trabajo del colegio, participe activamente.
8. Acompáñelo con sus sus nuevas vivencias
Su primer amor, su primera ruptura amorosa, ella /él no saben cómo actuar, qué hacer, qué decir, solo ven en la televisión modelos a seguir, no saben como manejar la presión del grupo, no quieren verse “raros” y mucho menos no ser aceptados.
¿Necesita ayuda profesional?
Por más de 12 años acompaño a padres/madres y sus adolescentes a criar hijos sanos emocionalmente. A esta edad es muy importante el acompañamiento psicológico oportuno, no llegar a patologías graves para recién intervenir. Por otro lado también están los programas de entrenamiento para padres que es un conjunto de sesiones en los que se guían de manera detallada y específica a los padres en sus casos específicos.
