Las relaciones sexuales son altamente placenteras e influyen positivamente en las relaciones de pareja. Sin embargo, con el tiempo, muchas parejas pueden vivir momentos de monotonía y su satisfacción sexual puede descender, lo que provoca que el bienestar de la pareja también lo haga.
Es por eso que es bueno probar cosas nuevas en el terreno de las relaciones íntimas, y poner de nuestra parte para que nuestra pareja disfrute de su sexualidad.
- Artículo recomendado: "Cómo masturbar correctamente a una mujer, en 19 pasos"
Claves para mejorar la masturbación de un hombre
La masturbación puede ser muy placentera. No obstante, no saber cómo masturbar a un hombre puede generar situaciones de poco placer e incluso dolor.
Es por eso que a continuación os dejamos una lista de consejos para que, tanto si tienes pareja como si no, puedes saber cómo masturbar a un hombre correctamente.
1. Utiliza lubricante
No es obligatorio, pero sí un recurso útil también para los hombres. Frecuentemente se asocia el uso del lubricante a la penetración anal, pero es ideal para la masturbación. Su efecto se nota a la hora evitar dolor y aumentar el placer, pues muchos de los productos que hay en el mercado aportan sensaciones extra, por ejemplo, de frío calor u olores estimulantes
Si quieres que tu pareja tenga una masturbación más placentera, utiliza lubricante y verás los resultados.
2. Comunícate
La comunicación es esencial en el campo de la pareja, y la intimidad sexual no es una excepción. Al comunicarnos apropiadamente con nuestro enamorado es posible conocer sus gustos sexuales, saber qué es lo que más le satisface y cómo podemos aumentar el placer que siente. Sin duda, hablar abiertamente sobre este tema mejora la confianza y, por tanto, la satisfacción relación.
3. Comienza suave y aumenta progresivamente
Igual que en la masturbación femenina, es bueno comenzar poco a poco e ir incrementando el ritmo de la masturbación. Por eso es necesario estimular las zonas cercanas al pene primero y después pasar al miembro sexual masculino. Una vez en éste, es mejor comenzar con movimientos lentos para pasar a movimientos más rápidos. Esto también es aplicable a la intensidad, por lo que se debe incrementar el tacto de manera progresiva.
4. Explora el cuerpo
Una buena manera de acercarse progresivamente al pene es explorar el cuerpo. Los mordiscos en el cuello, los besos con pasión o un buen masaje pueden incrementar las sensaciones placenteras para que cuando se estimule el pene, la sangre ya se haya movilizado por las zonas erógenas y el placer haya aumentado progresivamente.
5. 'Stop and go'
Una técnica que funciona muy bien y que está relacionada con la intensidad de la estimulación es la técnica stop and go, que significa que cuando tu pareja se esté acercando a la eyaculación y te avise, debes parar de masturbar. Después, progresivamente, puedes iniciar de nuevo el proceso y parar las veces que quieras. Cuantas más veces pares, mayor será la eyaculación.
6. Ponle a 100 antes de comenzar
Esta técnica funciona porque tu pareja se pone a 100 y luego le dejas con las ganas, lo que provoca un efecto de acumulación. Pero poner a tu pareja a cien es un proceso que no solo comienza cuando estáis delante del uno del otro, sino que puedes iniciar la masturbación antes de verle. Por ejemplo, llamándole al trabajo para decirle que has comprado un lubricante nuevo para masturbarle esta misma noche. También puedes hacer sexting hasta que os veáis, de manera que anticipe el encuentro y se excite incluso antes de que le pongas las manos a la obra.
7. Prueba diferentes juegos o técnicas
Para mejorar la experiencia sexual es posible probar diferentes juegos o técnicas que incrementen esta experiencia. Por ejemplo, puedes utilizar hielo alrededor del pene cuando estás masturbando a tu pareja.
Una técnica que es muy efectiva y que produce un gran placer es la siguiente. Tras masturbar a tu pareja con intensidad y cuando él te avise de que se está acercando a la eyaculación, deja de estimular con fuerza el miembro y sigue realizando el movimiento de abajo arriba con el pene pero simplemente rozándolo con la mano. Esto hará que tu pareja movilice más sangre hacia el pene en busca de tus manos (que nota pero no con suficiente intensidad) y provocará que eyacule con más fuerza y que sienta un orgasmo que le lleve al cielo.
8. No te olvides de los testículos
Normalmente asociamos la masturbación y el placer de este acto a la estimulación del pene, pero para aumentar la estimulación, es mucho mejor estimular otras partes del cuerpo. Los testículos, al estar muy cercanos al pene, son fáciles de estimular y son ideales para mejorar el orgasmo. Puedes comenzar estimulándolos antes de comenzar a tocar el pene (de manera anticipatoria), pero también puedes hacerlo mientras realizas movimientos de arriba abajo con el miembro sexual masculino. Usa los dedos, la lengua, mordisquea, lame e incluso utiliza una pluma en esta zona para incrementar el placer de tu pareja.
9. Estimula el perineo
La estimulación no debe ser solo en el pene o los testículos. Una zona que resulta muy estimulante para los hombres es el perineo. El perineo se encuentra entre el ano y los testículos y es posible estimularlo con la lengua, con hielo o con una pluma.
10. El placer anal (doble estimulación)
Ahora bien, todavía mejor es la estimulación anal, aunque existen ciertos prejuicios respecto a esta práctica. Para un hombre, la masturbación anal y del pene a la vez puede ser una de las mayores experiencias sexuales de las que puede disfrutar. Así que hay que tener una mente abierta en torno a esta práctica, porque los resultados son espectaculares.
11. Crea un ambiente propicio
El ambiente en el que se produce la masturbación juega un papel determinante a la hora de provocar un mayor placer. Por eso, es bueno cuidar al detalle donde lo llevamos a cabo. Por ejemplo, es posible poner música, una luz adecuada y unas velas en la habitación donde vamos a masturbar a nuestra pareja.
12. Busca otros lugares
Pero la masturbación no solo puede llevarse a cabo en la habitación, sino que puede realizarse en otros lugares. Por ejemplo, en la ducha, donde es posible jugar con el chorro de agua directamente sobre las zonas erógenas para acrecentar las sensaciones placenteras. Los más atrevidos pueden incluso llevar a cabo la masturbación en otros lugares, por ejemplo, en el mar o en una piscina.
13. Prueba posturas diferentes
Puede que la clásica manera de masturbar a un hombre parezca la más placentera, pero en realidad no es así. Existen posturas poco convencionales que pueden aumentar la excitación y, como consecuencia, el orgasmo. Por ejemplo, si tu pareja se coloca con las piernas cerradas y estimulas su pene, la resistencia que hace con el cuerpo (que tendería a relajarse y a separar los miembros inferiores en el momento de la eyaculación) provoca un orgasmo mucho más intenso fruto de la restricción de movilidad. Seguro que a tu pareja le encanta.
14. Cuestiona los estereotipos de género
Si al masturbar a un hombre crees que debes ajustarte a lo que tradicionalmente se cree que es el placer masculino, caerás en un error común. Por ejemplo, no a todos los hombres les gusta el sexo puramente genital sin preliminares, o el sexo rápido y sin miramientos. La comunicación es clave.
La sexualidad va más allá del coito
La sexualidad humana es un aspecto integral y complejo de nuestra vida, que abarca mucho más que el acto sexual en sí. Aunque el coito suele ser una parte significativa de la expresión sexual, reducir la sexualidad únicamente a esta práctica limita nuestra comprensión y experiencia de lo que realmente significa ser seres sexuales.
La sexualidad incluye el placer, la intimidad, la conexión emocional y física, y la autoexploración, entre otros aspectos.
El placer puede provenir de muchas formas de contacto físico y emocional, como los besos, las caricias, los masajes, e incluso la conexión visual y las palabras amorosas. El acto sexual, cuando es algo que no se limita a la reproducción, es una experiencia que tiene lugar sobre todo en la mente.
La intimidad es otro componente clave que va más allá del acto sexual. La intimidad no solo se trata de estar físicamente cerca de alguien, sino también de crear un espacio seguro donde ambas personas se sientan conectadas y comprendidas. En este sentido, la masturbación en pareja debe llevarse a cabo en un ontexto de comunicación fluida en el que ambas personas se sientan escuchadas y comprendidas. Querer "impresionar" al otro realizando acciones unilaterales es un error.
Por otro lado, hablar abiertamente sobre deseos, límites, fantasías y preocupaciones sexuales fortalece la relación y contribuye a una vida sexual más satisfactoria. Esta comunicación no solo mejora el entendimiento entre las parejas, sino que también fomenta la confianza y reduce la ansiedad y los malentendidos que pueden surgir en torno a las expectativas sexuales.