Existen distintos modos de afrontar el trastorno por adicciones, planteando diferentes formas de actuación según las características del individuo o la fase de intervención.
Es fundamental realizar una buena intervención a los pacientes adictos, ya que esta afectación puede derivar en otros trastornos más graves tanto físicos como psicológicos. Son 4 las fases principales de intervención en los pacientes con algún tipo de adicción: desintoxicación que consiste en dejar de consumir la droga o de realizar la conducta adictiva; deshabituación, disminución de los malos hábitos; rehabilitación, entrenar habilidades nuevas o que ya poseía y reinserción social.
En este artículo hablaremos de las distintas maneras de intervenir a los pacientes con adicciones y sobre cómo funcionan las clínicas para tratar estos trastornos.
- Artículo relacionado: "Los 14 tipos de adicciones más importantes"
En qué consiste el tratamiento de las adicciones?
La clínica para el tratamiento de adicciones es un centro donde acuden sujetos con problemas de drogadicción con la finalidad de desintoxicarse y mantener la abstinencia, es decir, el no consumo. El paciente puede permanecer interno, día y noche, en el centro durante un periodo limitado y determinado, para facilitar así que no tenga contacto con ningún tipo de sustancia y se mantenga sin consumir o puede ser tratado sin necesidad de ingreso.
Asimismo, el paciente podrá recibir atención personalizada y por profesionales de distintos ámbitos, puesto que se realiza un trabajo multidisciplinar, para asegurar el bienestar del sujeto. De este modo, la intervención que recibe el individuo es muy completa, centrándose no solo a nivel de salud física y psicológica, sino valorando también otras variables que pueden facilitar la reinserción social del sujeto, como puede ser el nivel de formación y preparación para el ámbito laboral.
- Quizás te interese: "¿Cuál es la relación entre la esquizofrenia y las adicciones?"
Las adicciones
La adicción se entiende como un trastorno crónico que tiende a persistir si no se realiza ninguna intervención. Es decir, por sí sola la adicción no desaparece y debemos actuar y aplicar un tratamiento si queremos terminar con ella. Las graves consecuencias que pueden comportar el consumo de sustancias hace aún más imprescindible tratar la afectación si queremos prevenir trastornos más graves.
Estos trastornos pueden ser tanto físicos como psicológicos. El primer grupo sería el caso de patologías cardiacas, pulmonares o cáncer, así como un aumento del riesgo contagio de enfermedades de transmisión por contacto de sangre, al compartir agujas, como puede ser el VIH o la hepatitis C; en cuanto a alteraciones psicológicas se ha observado una mayor relación entre trastorno del estado de ánimo como la depresión, trastorno de ansiedad o trastornos psicóticos como la esquizofrenia.
Debemos tener en cuenta que actualmente también existen otros tipos de adicciones a parte de las drogodependencias, como la adicción al juego, a las nuevas tecnologías, a las compras, adicciones que actualmente se conocen como conductuales.
- Artículo relacionado: "¿Cómo ayudar a una persona alcohólica a no recaer?"
Funcionamiento de las clínicas para tratar adicciones
Habrá distintos modos de intervenir a los sujetos con adicción, mediante un tratamiento más o menos intensivo, requiriendo o no de ingreso del paciente. Seleccionaremos el mejor modo de intervenir según cuales sean las características del individuo, o que preferencias tenga.
Independientemente del método escogido, el tratamiento dirigido a superar la adicción se divide principalmente en cuatro fases.
1. Desintoxicación
La primera fase para tratar las adicciones consiste en dejar de consumir la droga, este proceso recibe el nombre de desintoxicación. La acción debe ser total, es decir, el sujeto tiene que dejar de consumir por completo la sustancia o dejar de realizar la conducta adictiva, por ejemplo dejar de jugar. En esta fase será importante realizar un intenso seguimiento y apoyo al paciente, mediante la intervención de un médico especializado en tratamiento de adicciones.
Es habitual también complementar la terapia con intervención farmacológica que ayuda a disminuir y soportar mejor: el síndrome de abstinencia, con la administración de benzodiacepinas, que son un tipo de ansiolíticos o los anticonvulsivantes; el craving, que se refiere a la sensación de necesitar la droga, se puede tratar mediante naltrexona, utilizada sobretodo en adicción a opiáceos, o inhibidores de la recaptación de serotonina, que es un tipo de antidepresivo.
- Quizás te interese: "Desintoxicación: qué es y cómo se lleva a cabo en el organismo"
2. Deshabituación
Una vez superada la fase de abandono de la conducta adictiva es necesario intervenir al paciente para eliminar los malos hábitos, malas costumbres que le llevaban a consumir. Cambiar las rutinas vinculadas con el consumo de droga o conducta adictiva para así poder establecer unos mejores hábitos de vida, más saludables y lejos de los ambientes que facilitan al sujeto satisfacer la adicción.
- Artículo relacionado: "La inteligencia emocional en la deshabituación ante las adicciones"
3. Rehabituación
Reducidos los malos hábitos y malas conductas, es importante entrenar con el sujeto habilidades que ya poseía pero ha perdido y otras de nuevas que le permitan llegar a una mejor integración. Se puede trabajar también modos de afrontar estados que con alta probabilidad el sujeto puede sentir, como ansiedad por consumir, falta de control de impulsos, habilidades sociales, de comunicación, asertivas y de solución de problemas.
Se pueden realizar tanto sesiones individuales como conjuntos, en grupo, para facilitar la relación con otros sujetos.
4. Reinserción
El objetivo final de todo tratamiento focalizado en disminuir la adicción es lograr que el sujeto se reinserte en la sociedad y pueda vivir de manera funcional. De este modo, analizaremos y valoraremos el entorno del sujeto, sus amistades, sus familiares… Para poder intervenir y mejorar cualquier tipo de alteración o mala conducta que se observe.
Superado el tratamiento de desintoxicación, el paciente debe seguir vinculado con la clínica, desde donde se le realizará un seguimiento apoyando siempre que lo necesite. En esta fase también es importante tratar los miedos y preocupación que pueden surgir en el sujeto ante la nueva vida que se le plantea sin la droga o conducta adictiva.
- Quizás te interese: "Los 10 beneficios de acudir a terapia psicológica"
Modos de intervención
Como hemos visto hay distintas áreas a tratar, siendo así necesario aplicar diferentes tipos de intervención. Veremos como pueden ser más o menos intensivas, intervenir o no otros sujetos, centrarse específicamente en la adicción o introducir también otras afectaciones.
1. Intervención ambulatoria
El tratamiento ambulatorio permite hacer intervención sin la necesidad de ingresar al paciente en un centro; de este modo es menos intensiva, pero permite igualmente aplicar una terapia y mantener un control del paciente.
Esta es una buena opción para sujetos que se encuentran en fases iniciales de la adicción, sujetos con una alta fuerza de voluntad y buen autocontrol o para individuos que han salido del ingreso de centros de desintoxicación y requieren de un seguimiento posterior. Vemos como puede funcionar como un paso previo o posterior al ingreso.
2. Intervención en ingreso
Como ya mencionamos, este es el modo de intervención más intensivo, que consiste en separar completamente al sujeto de su entorno y reducir de este modo todo riesgo de consumo. Se realizará un tratamiento pautado y multidisciplinar con el propósito de desintoxicar al paciente.
En este caso toda la vida del sujeto se ve alterada, ya que debe dejarla durante un tiempo por completo para pasar a vivir día y noche en el centro, pero con una atención mucho más completa, pudiendo recibir apoyo en todo momento y rodeado de un entorno seguro, con todo el material necesario y profesionales a su disposición.
3. Intervención individual
La intervención efectuada individualmente con el paciente será fundamental y muy importante, puesto que es el propio sujeto quien debe hacerse responsable de afrontar la situación y dejar la adicción.
Se trabajarán distintos ámbitos utilizando diferentes técnicas como: conductuales, vinculadas con la modificación de conductas relacionadas con la droga y realizar actividades placenteras sin la necesidad de la sustancia o conducta adictiva; cognitivas, donde se intervendrán las creencias desadaptativas e irracional vinculadas con las drogas, así como posibles miedos; y farmacológica, ya hemos visto que la utilización de medicamentos es de ayuda sobre todo durante las primeras fases.
4. Intervención grupal
La intervención en grupo, con otros sujetos que se encuentren o hayan pasado por situaciones similares, es una buena opción de tratamiento para realizar de manera complementaria a la terapia individual. Así, el paciente podrá sentirse apoyado, ver que no es el único con esta problemática y podrá compartir cómo se siente, así como consejos que les han sido útiles.
La terapia en grupo también permite trabajar las habilidades sociales, de comunicación, ver cómo el sujeto responde ante otros individuos, facilitando así el paso a la reinserción social.
5. Intervención familiar y de pareja
Un factor a tener en cuenta cuando realizamos la intervención en los sujetos con algún tipo de adicción es el entorno social, tanto familiar como de amistades. De este modo, será importante trabajar los problemas que pueda haber en las distintas relaciones sociales del paciente, para disminuir el riesgo de una posible recaída.
También intentaremos hacer partícipes de la rehabilitación a su entorno más cercano para que cooperen y ayuden en la recuperación del individuo. Es importante informarles de las distintas fases y pasos a seguir, sobre todo a las personas que viven con el paciente. Asimismo, cuando el sujeto rompe con el entorno vinculado con la adicción, también es necesario que se aleje de los sujetos que son malas influencias, sujetos que siguen realizando la conducta adictiva.
Clínicas Cita
Clínicas Cita
Centro de tratamiento psicológico
6. Intervención dual
Es frecuente observar que pacientes con adicciones también muestran otro tipo de trastornos mentales, siendo los más habituales trastornos de personalidad, trastornos del estado de ánimo y trastornos psicóticos. En estas circunstancias deberemos intervenir ambas afectaciones. Una de las terapias que se ha mostrado más eficaz es la integrada, que consiste en combinar ambos tratamientos en un programa unificado.