Mi pareja no me llena: posibles causas y qué hacer

Veamos las causas habituales de esta sensación de que tu pareja no te llena, y consejos ante ello.

Mi pareja no me llena: posibles causas y qué hacer

Con el paso del tiempo, es relativamente habitual que en una relación de pareja ambos miembros no se sientan como al principio, dándose así un proceso de desenamoramiento, algo natural. Sin embargo, cuando esta situación es llevada a un extremo en el que uno o ambos miembros sienten que su pareja no les llena; es posible que esto lleve consigo tristeza, desconsuelo e incluso incertidumbre.

Si tu pareja no te llena, esto podría deberse a varios motivos, y existen ciertos signos que podrían hacerme pensar que los cosas no marchan como deberían. Así, en este artículo veremos los signos que permitan identificar los motivos por los cuales una persona podría sentir que su pareja no le llena y también veremos algunos consejos a tener en cuenta en estos casos.

¿Por qúe siento que mi pareja no me llena?

Estas son las causas más asociadas al sentimiento de "vacío" en una relación de pareja.

1. Reducción de los proyectos en común

Si tu pareja no te llena, uno de los principales motivos podría ser el hecho de que se hubiera producido con el paso del tiempo una reducción de los proyectos en común, cuando sería lo normal que se compartieran más proyectos, como podrías ser ciertas metas en la vida.

Es por ello que una señal que alerte que la relación no está funcionando como debería es que cada uno de los miembros pasen cada vez menos tiempo juntos, debido a que cada uno esté enfocado en una serie de proyectos que no encajen con los del otro de forma que cada vez se tenga un menor espacio para pasar en pareja; sobre todo, cuando ninguno de los miembros de la pareja está por la labor de buscar puntos en común con el otro, llegando así a distanciarse aún más a medida que va pasando el tiempo.

Mi matrimonio no me llena

Que haya una falta de afinidad en cuanto a gustos, intereses o inquietudes, así como también a nivel intelectual podría influir en el hecho de que se produzca una reducción de los proyectos en común.

2. Falta de actos de cariño y pérdida de interés

Otro de los posibles motivos podría ser el hecho de que últimamente hay pocas o escasas muestras de afecto entre nosotros, de manera que han ido desapareciendo esos detalles de afecto que antes solíamos demostrar y apenas nos damos besos ni caricias. Además, ya no nos divertimos como antes cuando estábamos juntos.

Tampoco suele haber elogios ni detalles por parte de ambos y todas aquellas manifestaciones de amor que antes había han sido sustituidas por ciertos gestos de indiferencia, habiéndose convertido en rutina nuestros momentos en pareja, ya que siempre hacemos las mismas cosas, apenas salimos ni tampoco solemos innovar en cuanto a planes ni detalles; en otras palabras, siempre hacemos las mismas actividades juntos y siempre nos hacemos regalos similares en las fechas señaladas.

Otro motivo de preocupación dentro de la pareja podría ser la pérdida de interés por el otro por parte de uno de los miembros, o incluso de ambos. En estos casos ya no hay interés por lo que acontece en la vida del otro, lo que favorece que aumente el distanciamiento entre ambos.

3. Falta de comunicación o empobrecimiento de la misma

Una de las posibles causas de que alguien sienta que su pareja no le llena podría ser una falta de comunicación o un empobrecimiento de la misma. Aunque no todas las personas cuenten con las mismas habilidades comunicativas y haya parejas donde suele darse una menor comunicación que en otras, una señal de alerta podría ser el hecho de que la comunicación entre ambos miembros se dieran en menor medida que de costumbre y que además no se ponga empeño por llegar a un entendimiento.

Cuando el interés y el amor se está acabando dentro de una pareja, es probable que comiencen a aparecer problemas de comunicación, de forma que también es más difícil que se puedan resolver pacíficamente los puntos de desacuerdo, siendo más común que empiece a haber discusiones con mayor frecuencia e intensidad.

En algunos casos esa falta de comunicación podría llegar a acarrear que solamente se habla lo justo, e incluso se reduce la conversación a monosílabos, de manera que ambos miembros de la pareja se sienten solos cuando están juntos aunque se comparta la presencia física.

4. Falta de tolerancia hacia ciertos comportamientos del otro miembro de la pareja

Cuando un miembro de la pareja no llena al otro, es posible que se esté dando un desenamoramiento y, en este tipo de casos, podría darse por su parte una intolerancia hacia algunos comportamientos del otro miembro.

Esto suele empezar a darse cuando una persona comienza a ver que se está distanciando de su pareja y que cada vez comparten menos intereses, por lo que está comenzando a ver a su pareja desde un prisma diferente, de forma que cada vez si fijará más en ciertos comportamiento de su pareja que no le gustan, pudiendo incluso magnificarse desde su perspectiva de esas aparentes imperfeccioes.

5. Falta de deseo sexual

Entre las causas de este problema podría estar la falta de deseo sexual, una de las señales asociadas a un proceso de desenamoramiento. Con ello suele darse un distanciamiento a nivel general entre ambos miembros del matrimonio o noviazgo, desapareciendo la necesidad de cercanía a nivel física y de intimidad que antes solía haber entre ambos.

En este tipo de casos la vida sexual de la pareja se puede llegar a volver monótona o incluso escasa. Los besos y las muestras de cariño se podrían haber convertido en actos rutinarios que se llevan a cabo de forma automática y sentirse lo mismo que antes.

6. Falta de diversión

Otro de los signos de que las cosas no van bien en una relación es cuando uno o ambos de sus miembros tienen la sensación de que ya no se divierten cuando hacen cosas juntos, y es que resulta muy importante que cuando ambos miembros de la pareja estén juntos no necesiten a nadie más para pasar momentos divertidos y agradables. No con ello queremos decir que todo sea diversión y haya que estar pasándolo bien siempre, ya que una pareja es mucho más que eso, considerándose que debería estar también ahí para apoyar en los momentos difíciles.

Sin embargo, cuando no se pasan momentos de diversión en pareja como antes solían pasarse, nos encontramos ante un signo de que algo no va bien, sobre todo, cuando se necesita la compañía de más personas para estar distraídos y no ver la realidad.

7. Se viene a la mente la idea de que quizás se estaría mejor sin pareja

Si tu pareja no te llena es probable que se te vengan a la mente pensamientos e ideas relacionados con un hipotético futuro en el que esa persona ya o esté a tu lado y que consideres que estarías mejor en soltería. Esto suele darse cuando una persona no se siente feliz en su relación y comienza a tener cada vez más ganas de estar sola, siendo común que realice una mayor parte de los planes sin su pareja, prefiriendo incluso estar con otras personas que con su pareja.

¿Qué hacer si mi pareja no me llena?

Cuando alguien siente que su pareja no le llena debería analizar los puntos anteriores y reflexionar en qué medida le ocurren a ella con su pareja y si cree que es recíproco o solamente le ocurre a ella.

También se debe tener presente que no es lo mismo estar enamorado que amar, ya que lo primero es un proceso que se encuentra de manera profunda mediado a través de la química cerebral debido que durante este periodo de tiempo los enamorados liberan una amplia variedad de hormonas (p. ej., oxitocina o vasopresina, entre otras), siendo las causantes de esas sensación de “tener mariposas en el estómago” y de "estar en las nubes”.

Por otro lado, amar es algo más profundo y tiene una mayor solidez que el enamoramiento; es un proceso que normalmente perdura más en el tiempo. Aquí ya es cuando cada uno de los miembros de la pareja tienen una visión más realista de la otra persona y con respecto a su relación. Por ello, hay que tener presente que el desenamoramiento podría ir desapareciendo, pero el amor permanece, siendo un lazo que sostiene la relación más resistente y maduro, que posibilita que ambos miembros acepten al otro por lo que es, teniendo presentes sus virtudes, pero también sus defectos.

Por lo tanto, cuando hay un desenamoramiento pero existe cierto grado de amor o de afecto, la relación puede funcionar. Para ello es necesario que ambos miembros se comprometan con su relación y tengan las ganas y el interés por la misma, estando así convencidos de que vale la pena intentarlo y seguir hacia adelante juntos.

Una opción muy recomendable ante este tipo de casos sería que ambos se pusieran de acuerdo para buscar un terapeuta o psicólogo especializado en parejas que pudiera ayudar a que ambos encuentren la forma de volver a encauzar su relación, dejando así atrás los posibles problemas que podrían haberles llevado hasta ese punto en el que se encuentran.

Cuando alguien siente que su pareja no le llena también debería hacerse la pregunta de si es algo pasajero, al estar pasando por un mal momento o si ya es algo que viene de lejos. Ante este tipo de situaciones hay que analizar los hechos exhaustivamente y no tratar de autoengañarse, ya que si uno considera que su relación no tiene futuro, cuanto más lo deje pasar, más difícil le resultará cortar su relación.

  • Álava, M. J. (2006). Amar sin sufrir: Ni los hombres son imposibles, ni las mujeres incomprensibles. Madrid: La esfera de los libros.
  • Gálligo, F. (2013). Amar sin dolor, disfrutar amando. Madrid: Ediciones Pirámide.
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Mario Arrimada. (2022, mayo 9). Mi pareja no me llena: posibles causas y qué hacer. Portal Psicología y Mente. https://psicologiaymente.com/pareja/mi-pareja-no-me-llena

Psicólogo

Mario Arrimada es Graduado en Psicología en la Universidad Pontificia de Salamanca y dispone de un Máster de Actualización en Intervención Psicológica y Salud Mental en la Universidad a Distancia de Madrid. Varios cursos de formación, entre ellos el de Experto en Trastornos de la Personalidad con la Asociación Española para el Fomento y Desarrollo de la Psicoterapia, de Experto en Mindfulness y de Experto en DSM5 y CIE11, ambos en la UDIMA.

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