Ataques de Pánico: ¿qué son y cómo se tratan?

Una guía práctica para la gestión de estos ataques de ansiedad.

ataques-de-panico

El Pánico sucede cuando una persona sufre un ataque de ansiedad y no es capaz de identificar la causa de este. De este modo, la persona entiende que esas sensaciones que está experimentando podrían ser un signo o de que su vida está en riesgo o de que se está volviendo loca o incluso de ambas cosas.

La realidad de la ansiedad

Normalmente entre las sensaciones de ansiedad más características que suelen referir las personas que sufren ataques de pánico están la taquicardia, sensación de ahogo, la falta de aire, la sensación de irrealidad, la sequedad bucal, el temblor y/o la sudoración entre otras. Pueden ser muchas más y además muy específicas según la persona y los detalles.

Todas estas respuestas se generan porque se dispara el Sistema Nervioso Simpático (SNS); un sistema que todos los seres humanos tenemos y que pertenece al Sistema Nervioso Autónomo (SNA), es decir que se dispara autónoma o automáticamente, y es un sistema primitivo que nos ha permitido sobrevivir como especie a lo largo de la historia (y prehistoria, por supuesto).

Imaginemos en su caso que hace miles de años un mamut se presenta con ánimo ofensivo en el poblado de una tribu de seres humanos primitivos. En el momento en que alguno de estos homos ve al tremendo y cornúpeto animal su Sistema Nervioso Autónomo Simpático se dispara sin más, preparando así su organismo para la lucha o para la huida. Es decir, el ritmo cardíaco se acelera, las pupilas se dilatan y los ojos amplían su campo de visión, los músculos mantienen su tono, la digestión para su proceso, la boca se queda sin saliva y todo su cuerpo se dispone para defenderse, quedarse completamente quieto para no ser visto o largarse por patas. Si este sistema autónomo fallara el ser humano primitivo no reaccionaría con la diligencia que la situación requiere y sería probablemente eliminado en unos pocos segundos por el mamut.

Imagina hoy día. E imagina que vas a cruzar un semáforo en verde y ves un coche a 90 Km/h que viene derecho a atropellarte. ¿Qué va a pasar? ¿Te vas a quedar como si nada sucediera? ¿Le vas a pedir tú a tu cuerpo que se acelere para reaccionar? Lo que va a pasar es que pienses lo que pienses tu Sistema Nervioso Autónomo Simpático a nivel medular se va a disparar y te va a preparar para que reacciones con urgencia; se te va a poner el corazón a mil por hora, tus pupilas se dilatan y se ampliará tu campo de visión, tus músculos te dispondrán o bien para salir corriendo o bien para que te quedes inmóvil y no sigas cruzando (que para el caso es lo mismo).

En palabras llanas el susto que se te mete en el cuerpo te permite reaccionar o te paraliza como reacción alternativa. Y esto es gracias al Sistema Nervioso Simpático. Sucede lo mismo que ocurría hace miles de años cuando un mamut se presenta de imprevisto en el poblado de la tribu.

ansiedad-ataques-de-panico

¿Qué es entonces el Pánico o Trastorno de Pánico con o sin agorafobia?

Cuando una persona está tranquilamente en casa, en el trabajo o en la calle y su SNA Simpático se dispara sin causa aparente. Es decir, sin que se evidencie un elemento diferenciador por el que la persona entienda que se ha producido el ataque. Algo así como decir: sin que el mamut esté.

Resulta que los seres humanos somos muy complejos y podemos pensar en algo que nos asusta y sin que este algo esté físicamente delante de nuestros ojos y esto puede disparar nuestro Sistema Nervioso Autónomo Simpático igual que si lo viéramos. Claro que en este caso y haciendo un pequeño juego de palabras para nosotros este sistema tendría poco de simpático… Más bien sería para nosotros un sistema antipático…. Estábamos tranquilamente y de pronto ¡zas! Se dispara toda la ansiedad… Nos sentimos atacados sin un ataque aparente.

Además, ocurre que en realidad somos conscientes de muy poco. Se estima que tenemos consciencia de menos del 95% de lo que pensamos, vemos y/o percibimos. Con lo cual se nos puede haber pasado por la cabeza alguna idea no consciente “tipo mamut” o bien hemos percibido inconscientemente alguna clave contextual que para nosotros hace igualito que el mamut del ejemplo del poblado. Nuestro Sistema Nervioso Simpático se ha disparado por su cuenta y sin causa aparente y además no sabemos a qué se debe que estemos experimentando taquicardia, sudoración, temblor, sequedad bucal, dificultad para tragar.

En definitiva, no hemos identificado el disparador de la ansiedad pues no ha pasado nada que aparentemente la justifique, no hemos visto ningún coche que nos fuese a atropellar y por supuesto tampoco ningún mamut. De hecho, estábamos tranquilamente en casa o en el trabajo y el corazón se ha puesto a mil por hora. Así que nos asustamos y pensamos que probablemente estemos gravemente enfermos, y por tanto parece evidente que nos vamos a morir o que nos va a dar un infarto pues algo parece ir mal en nuestro cuerpo y nuestro corazón. Esto es el Pánico.

Nos referiremos a Pánico con o sin agorafobia. Si la persona ha dejado de salir a la calle o está evitando situaciones con más gente en las que entiende que podría no ser socorrida. Ejemplo el autobús, el metro, un centro comercial, etc. La palabra Ágora proviene del griego y significa reunión, plaza o espacio urbano concebido como centro social, político o administrativo. Por tanto, el Pánico con agorafobia se da cuando la persona ha dejado de ir a ciertas zonas sociales por miedo a no ser socorrida si sufriera un ataque de pánico. Por ejemplo, no coge el autobús por si le da un ataque de pánico en él pues piensa que se puede morir estando allí sin obtener ayuda.

Tratamiento

El pánico es uno de los Trastornos de Ansiedad más comunes y su tratamiento no es especialmente complicado siempre y cuando la persona esté dispuesta a hacer los cambios y enfrentar las situaciones y sensaciones. En definitiva, siempre y cuando confíe en el terapeuta que tiene delante.

Desde un enfoque cognitivo-conductual en la primera fase del tratamiento se solía informar a la persona acerca de qué es el Pánico, tal y como yo he hecho en la primera parte de este artículo. Después en sesiones sucesivas se adapta esta información a las situaciones particulares de la vida de la persona y se explica haciendo un análisis funcional qué acciones y situaciones están manteniendo el problema.

Sin embargo, desde otras terapias de tercera generación como es el caso de la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) no se dan explicaciones teóricas de este tipo. Tampoco se informa a la persona del hecho de que el Pánico sea un trastorno como tal. Pues verdaderamente los trastornos mentales no son más que entelequias de utilidad clínica. No tienen una existencia real. Desde la ACT el tratamiento del problema, bajo mi experiencia, es igual o incluso más rápido, efectivo y duradero en el tiempo José Luis López “Cheli”.

tratamiento-ataques-de-panico

Psicólogo General Sanitario y Sexólogo

Almería
Terapia online

José Luis López "Cheli" es Psicólogo y Sexólogo. Licenciado en Psicología por la Universidad de Granada. Máster oficial y habilitante de Psicología General Sanitaria por la Universidad de Almería. Dirige el centro Rango Psicología, donde atiende tanto de manera online como presencialmente a niños, adolescentes, adultos, personas mayores y también a parejas. Sin embargo, es su compañero de infantil quien suele atender a niños y preadolescentes. José Luis atiende a pacientes desde 14 a 99 años.

Psicólogo/a

¿Eres psicólogo?

Date de alta en nuestro directorio de profesionales

Artículos relacionados

Artículos nuevos

Quizás te interese