El liderazgo transformacional supone un nuevo hito a la hora de gestionar equipos y establecer dinámicas de trabajo en las que todos salen ganando. Los líderes transformacionales son aquellos que inciden de manera directa en los cambios que se llevan a cabo en la sociedad, tienen un carisma excepcional y se preocupan por mantenerse fieles a sus seguidores.
Tal y como la palabra “trans” indica, se trata de un cambio de visión, perspectiva y actitud sobre los demás que una persona con liderazgo ejerce. Algunos de los valores más importantes de este modelo son la honestidad, el altruismo o la ética.
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¿Cuáles son los principios básicos de este modelo?
El liderazgo transformacional se ha erigido como representante de “la cultura del cambio”, partiendo desde el precepto de querer eliminar el egoísmo individualista, superar sus limitaciones y caminar hacia el bien colectivo.
Un grupo, institución, equipo de trabajo o cualquier entidad con más de 3 personas integrantes, es dirigido de manera que sus miembros desarrollen y potencien la capacidad que tengan para resolver problemas de manera colectiva.
De esta manera, se espera siempre que los integrantes del grupo rindan por encima de lo esperado, superando las expectativas marcadas fruto de la alta motivación que el líder transformacional les transmite.
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7 características esenciales del liderazgo transformacional
En este apartado analizaremos los puntos primordiales para implementar el modelo basado en el liderazgo transformacional.
1. Espíritu motivacional
Teniendo en cuenta los valores que integran al líder transformacional, que son la creatividad, la moral, la ética y el entusiasmo, todo el conjunto provoca un grado de motivación en sus seguidores que otros modelos no consiguen.
Transforma a los miembros del grupo porque el modelo está estrechamente relacionado con el desarrollo humano, la participación y, sobre todo, con la autoestima de los trabajadores los cuales serán más eficientes a la hora de cooperar entre ellos.
Así, el liderazgo transformacional asume que ser un líder no consiste en iniciar una cadena de acciones que empieza en quien tiene el poder y termina siendo ejecutado por los subordinados, sino que se basa en un proceso apoyado en lo que ya estaba latente en las personas, y cuyo principal cambio se sitúa en la modificación del contexto. Un contexto adecuado hace que las personas sean capaces de dar lo mejor de sí mismas, y esto se aplica tanto al mundo del trabajo como en cualquier otro aspecto de la vida.
2. El carisma
El liderazgo transformacional necesita de líderes con altas dosis de carisma, por encima de las cualidades profesionales, e incentiva esta actitud ante los demás teniendo un comportamiento ejemplar.
Este tipo de característica viene dada por el respeto y la confianza que los líderes transformacionales se ganan con el tiempo, permitiendo crear un impacto directo en el resto de integrantes convirtiéndose en modelos a seguir.
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3. Se generan vínculos emocionales
En un momento de feroz competencia, exigencia profesional y tensión laboral, el modelo transformacional permite un ambiente más cercano y de mayor afectividad. Sus líderes se encargan constantemente de atender las necesidades y preocupaciones a nivel individual de cada miembro del grupo.
4. Se acentúa la cooperatividad y ayuda
En estas dinámicas grupales el liderazgo impartido también se puede exigir cierta responsabilidad "extra" al líder, como atender directamente a la mayoría de propuestas y sugerencias por parte de sus subordinados, formando así una escala participativa horizontal.
Cabe recordar que un buen líder no es aquél que imparte órdenes y dicta normas, sino el que se implica con sus miembros en todos los aspectos de la organización, asumiendo responsabilidades cuando la situación lo reclame.
5. Efecto dominó
Por la misma naturaleza y dinámica del modelo, los seguidores o miembros integrantes del equipo acaban adoptando la figura del líder transformacional. Al ser activamente partícipes en todo tipo de decisiones, cuando el momento lo exija, los mismos trabajadores tomarán el rol del líder en su ausencia.
Esto es, que en ocasiones especiales el líder tiene que aprender a delegar con el resto de compañeros para no interrumpir la progresión del colectivo.
6. Interactividad y corporativismo
En las organizaciones que adoptan el liderazgo transformacional se suele trabajar en un ambiente dinámico. El líder se empeña en mantener a sus trabajadores al día con la formación, actualización y desarrollo de nuevas tecnologías.
Cuanto más vean los miembros del grupo que la empresa o institución se preocupa por ellos, más implicados y dedicados estarán con la firma.
7. Aumenta la creatividad
Fruto de la participación y protagonismo de los miembros del grupo, los líderes transformacionales incentivan la creatividad mediante la exposición de ideas nuevas por parte de los miembros del grupo.
El líder no tiene por qué ser el único responsable ni máxima autoridad a la hora de presentar soluciones o maneras de hacer ante un nuevo reto. Hay que tener una perspectiva de futuro para aplicar los mejores métodos, dejando atrás liderazgos convencionales.
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Existen casos excepcionales
Siendo éste un "arquetipo" ideal para las futuras generaciones, no es del todo perfecto. Hay que tener mucho cuidado con saber dónde y en qué entorno de trabajo debemos dar paso al modelo transformacional de liderazgo.
Por ejemplo, en una empresa u organización donde la dinámica de trabajo es estable, lineal y cuyas actividades o tareas resultan más bien poco cambiantes, es recomendable aplicar un modelo un poco más clásico, como el transaccional, ya que los integrantes gozan de cierto estatus, son expertos en su campo y tienen autocontrol.
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