Todos hemos escuchado hablar del amor a primera vista, esa chispa instantánea que se siente al ver a alguien por primera vez. No obstante, ¿qué ocurre con el amor que se desarrolla de forma gradual? ¿Te puedes enamorar de alguien poco a poco? La respuesta es sí. El amor no siempre ocurre de forma fugaz y es posible enamorarse de alguien a medida que pasa el tiempo y establecemos una conexión más profunda.
El amor es complejo y existen tantas formas de amar como personas en el mundo. Las experiencias amorosas varían dependiendo de las circunstancias personales, experiencias previas, interacciones entre las personas involucradas, la situación, etc. Por tanto, no es de extrañar que el sentimiento de enamorarse pueda surgir tan pronto como al ver una persona, o a lo largo del tiempo.
Para que se comprenda, cuando hablamos de enamorarse con el paso del tiempo, hacemos referencia a una atracción gradual y creciente hacia otra persona. Por supuesto que puede comenzar con una atracción física inicial que se va asentando a medida que se van creando conexiones emocionales, experiencias y vivencias necesarias.
Gracias a la comunicación abierta, la confianza mutua, el apoyo emocional y la reciprocidad, se consigue establecer conexiones emocionales fuertes que con el tiempo evolucionan hacia sentimientos más profundos y duraderos conocido como “estar enamorado”. En el artículo de hoy, reflexionaremos acerca de si es posible enamorarse de alguien poco a poco y expondremos tanto las ventajas como los inconvenientes que esto supone. Sigue leyendo para descubrir más acerca del fascinante sentimiento del amor que surge con el paso del tiempo.
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¿Existe el amor a fuego lento?
Detrás del sentimiento de enamorarse gradualmente, reside una relación de amor y mucha confianza. Las personas que se enamoran poco a poco se toman su tiempo en conocer profundamente a la otra persona y así descubrir si realmente hay una conexión especial o si por lo contrario, intentan llenar vacíos o carencias afectivas a través del amor de pareja.
Enamorarse rápidamente, con mucha intensidad y casi ciegamente está a la orden del día. Son pocas las personas que optan por ir poco a poco y descubrir realmente quién se esconde detrás de lo que aparentemente te enseña. Pareciera que cuanto antes sientas ese flechazo, más bonita es tu relación. Puede que haya casos donde esto funcione y sea así, pero también existe la posibilidad de descubrir el camino del amor gradual. Como todo, tiene sus ventajas e inconvenientes de los cuales hablaremos seguidamente.
Ventajas
A continuación, exponemos las principales ventajas de enamorarse poco a poco:
- Disminuye la idealización:
Al enamorarse poco a poco, los sentimientos se desarrollan lentamente y esto permite tener una visión más realista y objetiva de la otra persona. Con esto consigues esquivar decepciones y malestares que pueden surgir más adelante en la relación idealizada. Gracias al tiempo que os habéis tomado, sabes con más exactitud como realmente es la persona, que busca, que no busca, etc.
- Construye una amistad sólida:
Es habitual encontrarse que al principio de una relación amorosa que ha surgido gradualmente, se encuentre una relación de amistad sana. Al ser amigos que se comprenden, apoyan, comparten gustos, ideales, valores, existe un entendimiento mutuo, al pasar al siguiente nivel donde los sentimientos de amistad cambian por amor, todo es mucho más fácil y llevadero.
- Evalúa la compatibilidad:
Tomar el tiempo necesario para construir sentimientos de amor permite que podáis observar como os manejáis juntos, el grado de compatibilidad, si sois capaces de resolver conflictos de forma adecuada, etc. Además, también te permite observar si buscas lo mismo que la otra persona a largo plazo. Una vez más, esto evita que caigas en decepciones por haberte precipitado con alguien poco acorde a ti.
- Mayor conocimiento:
Se podría decir que todo se engloba en este último punto. En suma, el enamorarte gradualmente te brinda la oportunidad de conocer más profundamente a la persona de la que te estás enamorando. Comprendes de forma holística quien es, que busca, sus fortalezas, debilidades, su forma de pensar, actuar contigo y con los demás, sus metas, objetivos, experiencias pasadas y mucho más. Definitivamente, esta comprensión tan profunda acerca de la persona sienta las bases para una relación sana, duradera, estable y sólida.
Inconvenientes
Ahora, analizaremos los principales inconvenientes que surgen al enamorarse gradualmente de una persona:
- Friendzone:
Término anglosajón que se refiere al riesgo de que la relación se estanque en la zona de amistad. Es algo que ocurre habitualmente cuando dos personas se enamoran gradualmente ya que si los sentimientos no se desarrollan a la par, existe la posibilidad de que uno de ellos se atasque y termine siendo simplemente una gran amistad.
- Paciencia:
Evidentemente, enamorarse de alguien de forma gradual requiere mucha más paciencia y tiempo que un amor instantáneo. Hay que tener claro que con el paso del tiempo, pueden surgir baches o etapas complicadas que ambas partes deben de estar preparadas para combatir antes de alcanzar un amor de pareja más sólido y estable.
- Perder oportunidades:
Es común con el paso del tiempo que uno desarrolle sentimientos más profundos que el otro y por tanto, no estén en la misma sintonía. Es importante hablarlo ya que sino se consiguen perder oportunidades de poder conocer a terceras personas y vivir experiencias de amor con ellas. Si los sentimientos no se desarrollan de forma equilibrada, se debe de comunicar.
- Incertidumbre:
Las etapas iniciales de una relación están llenas de incertidumbre. Pues más aún en una relación donde el amor surge de forma gradual. Es un sentimiento que no nos gusta y no solemos ser capaces de gestionarlo de forma adecuada. No soportamos el desconocer si la otra persona siente lo mismo que nosotros, sí soy yo quien siente más, y genera mucha ansiedad y estrés. Yendo un paso más allá, la incertidumbre también desemboca en dudas y puede hacer tambalear la relación. En suma, está claro que el enamoramiento prolongado carece de la intensidad inicial que tiene el amor apasionado e instantáneo.
