¿Qué significa el color dorado en Psicología?

Estos son los sentimientos y conceptos asociados al color dorado.

Qué significa el color dorado en Psicología

El color dorado brilla con tan solo existir. Sus características cromáticas lo hacen destacar por encima de otros colores como el rojo y el azul.

Pero no es únicamente por ello lo que hace que este color llame la atención, sino por el metal precioso al que tradicionalmente se le ha asociado: el oro. Y es que este elemento es muy poco común en la naturaleza, haciendo que sea muy preciado.

Es por ello que el color dorado se le ha asociado mucho a la riqueza y al poder, entre otros muchos más significados. Aquí vamos a ver qué significa el color dorado en Psicología, además de algunas cuantas curiosidades históricas y usos actuales de este color.

El color dorado: cómo se obtiene y características

El color dorado es uno de los colores más raros y llamativos. Recibe el nombre del metal más característico de este color, el oro, y es, en verdad, un matiz del amarillo, con una longitud de onda entre los 565 y 590 nanómetros. La luminosidad de este color dependerá del efecto brillante de la reflectancia del material.

Si bien se puede obtener mediante la mezcla de pigmentos artificiales y otros compuestos sintetizados en el laboratorio, lo tradicionalmente dorado ha estado hecho siempre con una pequeña cantidad de oro. Los matices se obtienen a partir de los metales con los que se mezcle. Así pues, el oro amarillo o el más normal se obtiene mezclándolo con plata y cobre. El oro rojo, más utilizado antaño, contiene cobre.

Este metal se caracteriza por resistir la acción de ácidos y lejías, además de no oxidarse. Solo hay una forma de modificar sus propiedades químicas, y es la de someterlo a la acción de una mezcla de ácido clorhídrico y ácido nítrico concentrados, lo cual produce agua regia, sustancia que puede dañar el oro.

¿Qué significa el color dorado en Psicología?

La cantidad de significados asociada al color dorado es muy amplia, todas ellas relacionadas con la fuerte conexión entre el color y el material del que, originariamente, se obtenía. Pese a que este color está emparentado con el amarillo, sus significados no son los mismos. Pensar en el color dorado es pensar en el metal precioso del que se obtiene.

De primeras podemos mencionar aspectos como la riqueza, el poder, la abundancia, la ambición y el lujo. También ha sido asociado a la vida y la felicidad, simbolizando el éxito a lo largo de la vida y en múltiples aspectos, como pueden ser el trabajo y la familia.

Ha sido asociado a la fidelidad. Esto es debido a las propias características del metal del que se obtenía, dado que el oro es un elemento químico que no se combina con otros elementos estando fundido. Por este motivo los anillos de matrimonio, que representan la fidelidad que van a tener los cónyuges el uno con el otro, se hace con este material.

Aunque el dinero no trae la felicidad, ayuda a alcanzarla, y es por ello que el color dorado también ha sido asociado a partes iguales a la riqueza y a la dicha. Todo lo que sirve para ganar riqueza está relacionado con este color, como por ejemplo el tener unas cualidades muy destacadas (p. ej., un gran cantante tiene ‘una voz dorada’). Incluso, pese a que no son cosas de este color, se suele usar la palabra ‘oro’ para referirse a cosas que son muy caras, como por ejemplo el petróleo es ‘oro negro’, la porcelana y el marfil son ‘oro blanco’...

El dorado también es asociado con el orgullo y el mérito. Es el color asociado a la fama y a los premios, que en sí mismos representan las destacadas cualidades de una persona y su victoria al obtenerlas. No son pocos los premios que son de este color y reciben, también, el nombre de ‘dorado’ o ‘de oro’: los Premios Oscar son estatuillas de oro, los Globos de Oro se otorgan en el cine...

El oro es, indudablemente, el color del lujo, del exceso de riqueza y de precios desorbitados. Los trajes dorados y que tienen brillantes se reservan para situaciones especiales, como son importantes eventos y fiestas. Las joyas doradas, que a veces son tan llamativas que dejan de ser elegantes, son un símbolo de exceso de riqueza, de muestra de poder. Los objetos que no se pueden fabricar de oro, reciben un baño de este material y pasan a ver incrementado su precio y recibir la etiqueta de artículos de lujo.

Significados culturales e históricos

Si bien los significados otorgados al color dorado a lo largo de la historia no distan mucho de los mencionados en el apartado anterior, sí que cabe destacar algunas curiosidades en relación a este tan peculiar color.

En la Edad Media, los alquimistas eran asociados con este color. Esto se debe a que estaban empeñados en transformar toda materia en el tan preciado metal precioso, y centraron sus esfuerzos en la obtención y búsqueda de la Piedra filosofal, la cual tenía el poder de convertir en oro todo lo que tocara, poder compartido con la fábula del rey Midas.

Dado que el oro es, en verdad, un tono de amarillo, también ha sido asociado al Sol. Los rayos del astro rey son normalmente referidos como dorados. Otra curiosidad relacionada a esto es cómo los incas creían que el oro era, en verdad, la sangre del Sol. De la misma manera que se asociaba a este material con el astro rey, la plata, tradicionalmente vista como su antagonista, era asociada a la Luna en muchas culturas.

En pintura, el uso del dorado siempre se ha vinculado con cuadros con motivos piadosos. Por ejemplo, los iconos rusos en las iglesias ortodoxas conservan a día de hoy fondos con este color. Es un color que suele pegar con los tonos de la tierra, y también sirve para enriquecer la paleta de rojos y borgoñas. El gran pintor austríaco Gustav Klimt asociaba este color con la nobleza, y sus cuadros, como es el de ‘El beso’ no podían prescindir de este color.

Como vimos antes, los anillos matrimoniales no son de oro solamente porque el material tenga un valor alto, sino porque dura mucho y conserva la apariencia del primer día. El oro nunca pierde su valor, ni tampoco se tira. Resiste, como debería hacer todo buen matrimonio. Además, pasados cincuenta años de casados se celebran las Bodas de Oro.

Una curiosidad, relacionada con cómo es visto con el lujo este elemento, es el caso de artista austriaco Friedensreich Hundertwasser. Este peculiar personaje organizó una gran comida en 1980 en el que celebraba, de forma literal, el lujo. Se dieron cubiertos de oro a los comensales, copas de oro y se sirvieron patatas, verduras y asados recubiertos, como cabría de esperar, en panes de oro.

Algunos ejemplos de cómo el color dorado ha sido asociado al mal y a aspectos negativos lo tenemos en el caso de Tomás Moro quien, en 1516, publicó una narración cuya trama ocurría en el país de la utopía. Aquí los reos llevaban cadenas hechas de oro y realizaban trabajos forzados.

Otro caso es el de la película de James Bond Goldfinger, de (1964) del director Guy Hamilton. En el filme, salen personas cubiertas de oro, que pretenden verse como símbolo de la riqueza, sin embargo, el oro no permite transpirar a su piel y se ahogan en su propia vanidad.

En la astrología, el oro es asociado al signo de Leo (meses de julio y agosto), que es cuando el sol está en lo más alto del firmamento. A su vez, el oro se asocia a la monarquía y a los altos estamentos de la nobleza. El oro se asocia al rey, a su vez, el león es el rey de los animales, y el Sol es el rey de los astros.

El rey Francisco I de Francia encargó 13.600 botones de oro para adornar un solo traje. En el siglo XVI este hombre era considerado el más elegante de su tiempo. Sin embargo, para asegurarse de que esto siguiera siendo así, el rey decretó que ninguna persona de rango por debajo del príncipe heredero podía vestir prendas doradas.

En heráldica el color dorado es considerado uno de los más importantes. Normalmente, los escudos no pueden tener más de un solo metal representado, siendo o bien oro o bien plata, pero hay una excepción a esta norma: el escudo del Papa. Los colores de la bandera del Vaticano son dorado y blanco, estando en la parte blanca el escudo, hecho de llaves de oro y plata, en representación a las puertas del cielo vigiladas por San Pedro.

Principales usos

A continuación veremos dos usos bastante interesantes del color dorado, tanto en el ámbito de la salud, aunque alejada de la evidencia científica, y en el ámbito comercial, concretamente en el márketing.

"Remedios" tradicionales

Los colores, en sí mismos, no tienen propiedades curativas ni mágicas; sin embargo, hoy en día tiene ciertos usos que podrían considerarse, en mayor o menor medida, relacionados con cambios en el comportamiento, aunque esto es bastante controvertido.

En el arte asiático del Feng Shui existe la norma de colocar flores o adornos de color amarillo y dorado en una habitación cuando se busca arreglar problemas de comunicación con personas importantes para uno mismo.

Aunque como vimos los colores no tienen ninguna propiedad mágica que cure problemas de cualquier tipo, cabe mencionar que en la medicina alternativa, concretamente la cromoterapia, usa este color para combatir, teóricamente, trastornos psicológicos como la depresión.

Esto lo hacen porque creen que el dorado equilibra la mente, otorga energía y da felicidad, aunque no hay ningún sustento científico para este tipo de afirmaciones. Siguiendo en la línea de creencias sin fundamento científico, en otras medicinas alternativas se cree que el oro sirve para transmutar energías negativas. Por ejemplo, recomiendan meditar entre 10 o 15 minutos usando el color dorado para facilitar el flujo de las palabras.

Márketing

Ya dejando de lado el mundo espiritual y místico de la cromoterapia y creencias de por el estilo, pasamos a algo más real como es el márketing. Es en este campo en el que se usa el oro para anunciar productos o servicios de lujo. Como se asocia este color al lujo, a la mínima que ofrecen un producto bajo el lema de que es de oro, dorado o ‘golden’ justifican el poder venderlo a precios desorbitados.

Los servicios premium, es decir, que ofrecen algo que a precio normal o de forma gratuita, no se pueden obtener, normalmente se venden con tonos dorados, los cuales ya de por sí llaman la atención y captan al cliente.

Sin embargo, y recurriendo al dicho, ‘no es oro todo lo que reluce’, que sea dorado no significa que sea mejor, simplemente es otra estrategia para vender un producto o servicio.

Referencias bibliográficas:

  • Clarke, T. y Costall, A. (2008). The Emotional Connotations of Color: A Qualitative Investigation. Color Research and application, 33(5): 406-410.
  • Heller, E. (2004). Psicología del color. Cómo actúan los colores sobre los sentimientos y la razón. Editorial Gustavo Gill.

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