El trastorno de tics es una afección neurológica que afecta a un número significativo de personas en todo el mundo. A pesar de su prevalencia, sigue siendo un tema en gran medida mal entendido.Los tics son movimientos o sonidos repentinos, rápidos e involuntarios que realizan las personas que padecen este trastorno. Pueden clasificarse en dos categorías principales.
Por un lado, los tics motores, que incluyen movimientos físicos incontrolables. Algunos ejemplos comunes incluyen fruncir el ceño o abrir la boca repetidamente, y movimiento de los brazos y piernas. Por otro lado, los tics vocales se refieren a sonidos o palabras incontrolables que una persona emite, como aclarar la garganta o incluso palabras y frases involuntarias.
¿Qué tipos de tics existen?
Los tics se clasifican de la siguiente manera:
1. Simples: Movimientos o sonidos Repentinos y Únicos
Son la forma más común de tics y son caracterizados por movimientos o sonidos sencillos, breves y repentinos como:
- Parpadeo de ojos: Este es uno de los tics mas reconocibles y simples, que implica el parpadeo involuntario de los ojos. Puede ocurrir rápidamente, a menudo, de manera repetitiva.
- Gruñir: Un tic vocal simple podría manifestarse como un gruñido súbito e incontrolable, que puede ocurrir en momentos inapropiados o incómodos.
- Toser: Toser sin razón aparente es otro ejemplo de tic simple vocal. Esto puede ser particularmente notable en situaciones sociables.
2. Complejos: Movimientos o Sonidos elaborados
Involucran secuencias de movimientos o sonidos más elaborados y pueden parecer más inusuales para quienes los observan como:
- Tocar objetos repentinamente: En este caso, una persona podría sentir la necesidad compulsiva de tocar objetos específicos una y otra vez, a menudo siguiendo un patrón definido.
- Repetición de palabras u obscenidades (tic coprolalia): La coprolalia es un tipo de tic vocal complejo en el que la persona repite palabras vulgares o inapropiadas sin poder controlarlo, esto puede llevar a situaciones embarazosas y malentendidos. Es importante que no todos los que tienen tics experimentan coprolalia y es un ejemplo de cómo los tics complejos pueden afectar la vida social y emocional de quienes la experimentan.
- Saltar o dar vueltas: Algunas personas pueden experimentar tics motores complejos que implican saltar repentinamente o dar vueltas.
3. Tics Motores y Vocales Combinados
Esto significa que no solo tienen movimientos incontrolables, sino también sonidos involuntarios que acompañan a esos movimientos. Esta combinación puede ser especialmente desafiante para quienes la experimentan, ya que puede atraer más atención y ser más notoria para los demás.
Causas de los tics involuntarios
Si bien la causa exacta de los tics involuntarios aún no se comprende completamente, se cree que involucra una combinación de factores:
- Factores Genéticos: La genética desempeña un papel importante en la predisposición a desarrollar tics involuntarios. Las investigaciones sugieren que hay una en algunas familias.
- Disfunción Neurológica: Parecen estar relacionados con alteraciones en el funcionamiento de ciertas áreas del cerebro, como el ganglio basal. Estas áreas desempeñan un papel en el control de los movimientos voluntarios.
- Factores Ambientales: El estrés, las infecciones, los traumatismos cerebrales y otros factores ambientales pueden desencadenar o agravar los tics involuntarios en algunas personas.
Diagnóstico y Tratamiento
El diagnóstico del trastorno de tics involuntarios se basa en la observación de los síntomas por parte de un profesional de la salud. Los criterios se centran en la presencia de tics motores o vocales persistentes durante al menos un año, aunque se permite breves períodos de remisión. Además, es importante descartar otras condiciones medicas que pueden causar síntomas similares.
La evaluación puede incluir entrevistas con el paciente y, en el caso de los niños, con sus padres o tutores. Se registra el historial medico y se realiza una observación cuidadosa de los tics para determinar su tipo, frecuencia y duración. El tratamiento de los tics se personaliza según las necesidades individuales:
- Medicamentos: en algunos casos, se puede recetar medicamentos como antipsicóticos o relajantes musculares para reducir la intensidad de los tics.
- Terapia de Apoyo: El apoyo emocional y la educación son fundamentales. El apoyo de amigos y familiares pueden marcar la diferencia en la calidad de vida.
- Terapia Conductual: La terapia cognitivo-conductual (TCC) puede ayudar a aprender técnicas de control y reducción de tics. Esto implica identificar las situaciones que desencadenan los tics y aprender a controlarlos.
Personas que viven con tics comparten su experiencia:
Para arrojar luz sobre esta condición y fomentar su comprensión y empatía, es esencial escuchar las voces de quienes viven con tics. “Es como tener un interruptor en tu cabeza que se enciende y apaga sin tu permiso. No importa cuánto te esfuerces, a veces simplemente no puedes evitarlo”. “A veces, la gente mira y pregunta qué me pasa. Trato de explicar, pero no siempre entienden”. “Encontrar un grupo de apoyo de personas con tics ha sido fundamental para mí. Aquí puedo ser yo mismo sin juicios.
Es fundamental que la sociedad en general aprenda a no juzgar rápidamente a quienes tienen tics y a no hacer comentarios insensibles. Es importante recordar que muchas personas pueden llevar vidas plenas y productivas con el apoyo adecuado. La comprensión pública y la aceptación son vitales para crear un entorno en el que las personas con tics involuntarios se sientan respaldadas y puedan alcanzar su máximo potencial.