7 de las Poetisas más importantes de la Historia

Un repaso a algunas de las mujeres más relevantes en la historia de la poesía.

Las Poetisas más importantes de la Historia
Emily Dickinson

Las mujeres siempre han escrito. Esto no es ninguna novedad. Y que a menudo se ha silenciado o se ha tratado de silenciar su obra, tampoco lo es. Si pensamos en ello, probablemente nos vengan a la mente los nombres de Mary Shelley, Jane Austen o Emilia Pardo Bazán, entre muchos otros. Pero la literatura no sólo tiene a grandes novelistas, sino que también está repleta de mujeres que hicieron de la poesía su auténtica vocación. Algunas consiguieron ganarse la vida con ello; otras, en cambio, no tuvieron tanta suerte.

En el artículo de hoy os traemos una lista de 7 de las poetisas más importantes de la historia: desde la antigua Grecia y la obra inmortal de Safo de Lesbos, hasta Anna Ajmátova, la gran poetisa rusa que desafió con su obra al mismísimo Stalin. No te pierdas este interesante recorrido por algunas de las mujeres más relevantes de la historia de la poesía.

7 poetisas importantes de la historia

A continuación, te proponemos 7 mujeres que cultivaron el arte de la poesía. Existen muchísimas más, por supuesto; para nuestra selección, hemos contemplado varias épocas históricas y varios países, para que la lista fuera lo más completa posible. Esperemos que la disfrutes.

1. Safo de Lesbos (ca. 650/610 a.C. – 580 a.C.)

Nombrada “la décima musa” por Platón, de esta mujer, que ejerció profunda influencia en la poesía griega de la Antigüedad, poco o casi nada se sabe. De hecho, los escasos datos biográficos se han extraído de su obra poética y, por tanto, son dudosos y confusos.

La obra de Safo gira en torno al amor, a la pasión y a los celos, y por ello en sus poemas suele aparecer la figura de Afrodita. Su único poema conservado de forma completa, llamado precisamente Himno en honor a Afrodita, es un ruego a la diosa para que favorezca a la poetisa en su petición amorosa.

Safo de Lesbos

Por cierto, en referencia a las preferencias sexuales de Safo, se ha venido diciendo que era lesbiana (de hecho, la palabra proviene de su isla de origen, Lesbos). Actualmente, algunos estudiosos creen (entre ellos, Margaret Reynolds) que los destinatarios del amor de la poetisa podrían haber sido tanto mujeres como hombres, cosa que coincidiría con la amplia cultura amatoria de la Grecia Clásica.

2. María de Francia (siglos XII y XIII)

El siglo XII fue el siglo de los trovadores por excelencia. Y, muy en contra de lo que se suele pensar, no sólo los hombres se dedicaron a la poesía. Es normal pensar esto si nos atenemos a un contexto en que la mujer se erigía como inspiración literaria, pero a la que pocas veces se la percibe como personaje activo en esta creación artística.

Pero existieron también poetisas trovadorescas, las conocidas como trobairitz, cuyo mayor ejemplo lo encontramos en la enigmática figura de María de Francia, que redactó su obra entre los siglos XII y XIII. Decimos “enigmática” porque desconocemos quién se esconde tras un nombre tan genérico. Se han apuntado candidatas de alta alcurnia, entre ellas a María, hija de Leonor de Aquitania. Pero sólo son suposiciones; la verdadera identidad de María la trobairitz sigue siendo un misterio. En todo caso, sus hermosos lais, escritos en lengua anglonormanda, están dedicados al amor cortés, el vehículo de expresión artística por excelencia en la época.

3. Sor Juana Inés de la Cruz (1648-1695)

Sin ningún género de duda, una de las voces poéticas más grandes del barroco hispano. Nacida en México como hija natural de una dama criolla y un capitán español, Juana Inés de Asbaje y Ramírez de Santillana (tal era su nombre) pronto manifestó una curiosidad voraz hacia la literatura y el conocimiento en general. Como ella misma confiesa en su famosa Respuesta a sor Filotea (la respuesta a una carta que le dirigió una religiosa y que, en realidad, estaba escrita por un hombre), se entregó a la vida religiosa porque era la única forma “honrosa” de escapar del matrimonio, por el que sentía especial rechazo.

Sor Juana Inés de la Cruz

Y es que Juana tenía claro que, de casarse, sus oportunidades intelectuales decaerían considerablemente. Así, ingresó primero en el convento de las carmelitas descalzas, del que tuvo que salir por la dureza de la vida de la orden y por sus propios problemas de salud. Más tarde profesó votos en el convento de San Jerónimo, donde, recluida en su celda (donde, por cierto, recibía a intelectuales y a grandes personajes del momento) dio a luz a su magnífica obra, no sólo poética, sino también teatral y musical. Falleció en 1695, durante la epidemia de cólera que asoló Ciudad de México.

4. Phillis Wheatley (1753-1784)

El nombre de Phillis Wheatley ha pasado a la historia por ser la primera mujer afroamericana que pudo publicar. Y eso, viviendo en la sociedad misógina y racista a la que pertenecía, es un hito importantísimo. Phillis nació en África, probablemente en Senegal, pero fue raptada cuando tenía pocos años y trasladada a Boston para venderla como esclava. La compraron los Wheatley, que por fortuna tomaron cariño a la niña y le dieron una esmerada educación.

El resultado fue que Phillis pronto empezó a escribir poesía, y logró publicar algunos de sus versos en periódicos locales. Sin embargo, a los diecinueve años sufrió la prueba más humillante de su vida: se vio obligada a pasar el “examen” de un tribunal que pretendía “cerciorarse” de que no mentía y que, realmente, los versos eran suyos.

Como Phillis demostró no solo su autoría, sino su fina inteligencia y su vasta cultura, pudo seguir con su carrera literaria. Consiguió publicar un libro de poemas, el famoso Poemas sobre diversos asuntos, religiosos y morales, que vio la luz en 1773 en Inglaterra. Sin embargo, su final fue muy trágico; murió ya libre, pero en la más absoluta pobreza.

5. Emily Dickinson (1830-1886)

La gran voz de la poesía norteamericana fue sin duda Emily Dickinson (en portada), con permiso del otro gran maestro, Walt Whitman (1819-1892). Cuando la poetisa falleció, en 1886, su hermana Lavinia encontró en su habitación los casi 2.000 poemas que Emily había escrito, pero nunca había publicado. Compuestos en la soledad de su alcoba, donde se recluyó especialmente al final de su vida, constituyen un legado poético asombroso de una refinada intimidad.

Ello no quiere decir que Emily compusiera su obra en secreto. En realidad, sus más allegados conocían su actividad poética (se llegaron a publicar algunos de sus versos en periódicos locales, no se sabe si con su consentimiento, y siempre anónimos), pero lo que sí desconocían era la magnitud de tal obra. Lavinia se convirtió en la primera editora de su hermana, puesto que recopiló y editó sus poemas tras la muerte de Emily. Así, una poesía que se había visto constreñida a un ambiente familiar y amistoso (Emily enviaba sus poemas a amigos e intelectuales en los que confiaba) fue expuesta a los ojos del mundo, y una de las poetisas más grandes de la historia ocupó el lugar que merecía en la literatura. No sabemos si esto hubiera gustado a Emily, por cierto, que siempre fue muy celosa de su intimidad.

6. Carolina Coronado (1821-1911)

La ilustre poetisa de Almendralejo nació justo cuando las libertades volvían a España a raíz del levantamiento de Rafael del Riego. Sin embargo, poco más tarde, con la caída del Trienio Liberal y el regreso de la monarquía absolutista de Fernando VII, el padre de Carolina, simpatizante liberal, fue encarcelado. Los vaivenes personales y políticos no impiden que una jovencísima Carolina de sólo diez años escriba su primer poema, semilla de lo que será una importantísima obra.

Su poema A la palma, publicado en 1843 en la revista El piloto y elogiado por un paisano de Almendralejo, el gran poeta José de Espronceda, supone el punto de partida de su fama. Fama que, por cierto, se verá aumentada con el bulo que recorrió los mentideros de Madrid acerca de su muerte, en 1844; una muerte que, por supuesto, no era real, puesto que la célebre poetisa falleció en 1911, con noventa años.

Durante su larga existencia Carolina Coronado fue autora de varios poemarios, y se circunscribió a la Hermandad lírica femenina, presidida por otra incombustible literata, Gertrudis Gómez de Avellaneda (1814-1873). Esta hermandad reclamaba los derechos sociales y culturales de la mujer que, poco a poco, empezaba a reivindicar su sitio.

7. Anna Ajmátova (1889-1966)

Posiblemente la mejor poetisa de la literatura rusa de la Edad de Plata, Ajmátova es todo un referente de la poesía de las primeras décadas del siglo XX. En concreto, de la llamada corriente “acmeísta”, abanderada, además de por ella, por su esposo Nikolai Gumiliov (1886-1921) y Ósip Mandelstam (1891-1938). El acmeísmo, cuyo nombre proviene del griego acmé, “apogeo”, era una protesta contra el simbolismo imperante en la década de 1910.

La vida de Anna Ajmátova estuvo marcada por la represión estalinista. Su primer marido fue asesinado en 1921, y su hijo Lev, deportado a Siberia. Ella misma sufrió la penosa deportación hasta 1944, año en que consiguió regresar a Leningrado con Lev. En esos años, la poetisa está inmersa en la que será su obra más famosa, Réquiem, un monumento colosal en honor a todas las víctimas de la represión de la dictadura de Stalin.

  • Ajmátova, A. (2006), Réquiem – Poema sin héroe, ed. Cátedra.
  • Emily Dickinson, Biography, de emilydickinsonmuseum.org
  • Fernández, T.; Tamaro, E.; Biografía de Sor Juana Inés de la Cruz, publicado en Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea, 2004
  • Palomar, A.; Emily Dickinson, la gran poeta de la naturaleza, artículo publicado en Historia National Geographic, diciembre de 2023
  • Torres Nebrera, G.; Carolina Coronado Romero de Tejada, artículo publicado en Real Academia de la Historia.
  • Safo de Lesbos, la poeta cuya idea sobre el amor y la sexualidad está vigente 2.600 años después, artículo publicado en BBC News Mundo, abril de 2019.

Periodista

Licenciada en Humanidades y Periodismo por la Universitat Internacional de Catalunya y estudiante de especialización en Cultura e Historia Medieval. Autora de numerosos relatos cortos, artículos sobre historia y arte y de una novela histórica.

Psicólogo/a

¿Eres psicólogo?

Date de alta en nuestro directorio de profesionales

Artículos relacionados

Artículos nuevos

Quizás te interese