Abraham Maslow fue un psicólogo estadounidense perteneciente a la perspectiva humanista, la “tercera fuerza” en lo que a corrientes psicológicas se refiere, después del psicoanálisis y el conductismo.
El enfoque de la Psicología Humanista se centra en los aspectos más positivos de la experiencia humana y su desarrollo. Los humanistas consideran al individuo responsable de los resultados de su vida, y confían en que, con las condiciones apropiadas, se desarrollará en una dirección deseable, ya que todos los humanos poseemos el potencial necesario para el crecimiento óptimo.
Los psicólogos humanistas creían que la gente es intrínsecamente buena y recurren a causas ambientales para explicar las conductas consideradas negativas. Sin embargo, según Maslow, que todas las personas tengan el poder para ser los motores de su propio desarrollo personal no significa que todas lo hagan. Solo algunas llegan a tomar la decisión de autorrealizarse, con todos los esfuerzos y sacrificios que ello supone. Estas llegarán a ser personas autorrealizadas.
Las personas autorrealizadas
Maslow creía que la gente se desarrolla a través de varios niveles hacia su potencial completo. Si bien todas las personas pueden llegar a alcanzar las mayores cotas de autorrealización, a la práctica son unos pocos los que alcanzan el nivel más alto de desarrollo. Se trata de las llamadas personas autorrealizadas, y Maslow estimaba que menos del 1% de la población lo era.
¿En qué consiste la autorrealización?
La autorrealización, según Maslow, consiste en el pleno desarrollo del potencial humano. La define como “la continua realización de potenciales, capacidades y talentos, como el cumplimiento de una misión, destino o vocación, como un conocimiento pleno y aceptación de la naturaleza intrínseca de la persona, como una tendencia incesante hacia la unidad, integración y sinergia dentro de la persona”.
Para él, los trastornos psicológicos no serían sino negaciones del propio potencial interno y atentados contra la propia naturaleza del individuo.
Características de las personas autorrealizadas
A partir de una serie de observaciones y estudios, Maslow identificó una serie de características comunes de las personas autorrealizadas.
No se trata de rasgos innatos que algunas personas hayan heredado a través de los genes, sino que son, simplemente, maneras en las que se expresa el proceso de conquista de la autorrealización. Estas características son las siguientes:
1. Percepción eficiente de la realidad
Los individuos autorrealizados perciben la realidad de manera más clara y objetiva. Por lo tanto, es más improbable que sean engañados, ya que muestran facilidad a la hora de detectar las estrategias de manipulación de los demás y son capaces de juzgar a la gente de manera útil y adaptativa.
2. Aceptación
Las personas autorrealizadas muestran un grado de aceptación de sí mismos relativamente alto, y eso se plasma en su autoimagen y autoestima. Esta característica de la aceptación también se extiende a muchos otros ámbitos de la vida. Así, los individuos autorrealizados aceptan lo malo y lo bueno de la vida, habiendo identificado primero qué tipo de situaciones son irremediables y no pueden ser cambiadas radicalmente a través de los actos del ser humano.
Las personas autorrealizadas son conscientes de que hay ciertas situaciones incontrolables en la vida, y es por ello que encajan mejor las pérdidas, elaboran mejor los duelos, se adaptan a los cambios en sus vidas y tienen un menor miedo a la muerte.
3. Espontaneidad
Al estar en contacto con sus impulsos internos y su experiencia subjetiva, las personas autorrealizadas se comportan de manera simple y natural, sin ocultarse detrás de una máscara social o de un falso “yo”.
4. Centrados en los problemas
Las personas autorrealizadas se centran en problemas fuera de sí mismas, teniendo un elevado nivel de conciencia social, y no dudan en abandonar su ego para ayudar al prójimo. Suelen estar sensibilizadas y comprometidas con diversas causas sociales y no toleran las injusticias.
5. Necesidad de privacidad
Disfrutan de la soledad. No necesitan gozar continuamente de la aprobación externa, y piensan por sí mismos en lugar de dejar que sean otros los que tomen las decisiones por ellos. Estudios demuestran que pueden tolerar la privación sensorial con más facilidad que los demás.
6. Autonomía
También son independientes, capaces de satisfacer sus propias necesidades y valerse por sí mismas sin depender de los demás en exceso. Toman decisiones sin pedir el consejo de los demás, confiando en su buen criterio y responsabilizándose de las mismas.
7. Frescura en la apreciación
Las personas autorrealizadas muestran un sentido de asombro y de admiración casi infantil. Curiosos, dejan que la vida les sorprenda incluso en aquellos contextos que otros percibirán como banales y aburridos.
8. Experiencias cumbre
Capaces de tener experiencias místicas a las que Maslow definió como “estados de unidad donde el tiempo tiende a desvanecerse y el sentimiento que sobrecoge hace parecer que todas las necesidades se hallan colmadas”.
Algunas de las fuentes que desatan experiencias cumbre en el individuo son el amor, el arte o el éxtasis erótico.
9. Relación humana
Se identifican con los seres humanos en general, y tienen sensación de relación con la raza humana, sin prejuicios. Además, son capaces de crear relaciones de amor sano, sin apego ni dependencia, únicamente centrándose en hacer crecer a la persona amada.
10. Humildad y respeto
Son humildes y pueden aprender de muchas personas distintas. Son democráticas más que autoritarias y no insisten en mantener un estatus por encima de los demás.
11. Ética y valores
Tienen fuertes estándares éticos, aunque estos no son normas convencionales del bien y el mal, sino ideas propias que se han formado en base a su propio criterio y observación del mundo.
12. Sentido del humor
Poseen un gran sentido del humor que no es hostil, no se ríen a expensas de otras personas. Se trata de un sentido del humor más filosófico, existencial.
13. Creatividad
Está presente en todos los sujetos autorrealizados. Son capaces de generar ideas genuinas y soluciones originales ante los problemas.
La autorrealización y las necesidades básicas
Maslow consideraba que todo ser humano era capaz de alcanzar su propia autorrealización habiendo satisfecho previamente sus necesidades básicas, que expuso en su famosa jerarquía de necesidades (normalmente representada en forma de pirámide).
Referencias bibliográficas:
- Maslow, Abraham. (2005). El management según Maslow: una visión humanista para la empresa de hoy (orig.: Maslow on Management). Barcelona: Editorial Paidós Ibérica.
- Städler, Thomas (1998). Lexikon der Psychologie, Stuttgart: Kröner.