Cada uno de nosotros tiene su propia forma de ser. Observamos el mundo de determinada de manera, nos relacionamos con los demás de formas concretas y, en general, expresamos una tendencia a hacer determinadas cosas y a responder de maneras más o menos estables.
Dicho de otra manera, y aunque suene redundante, cada persona tiene su propia personalidad. Este concepto, que define quién y cómo somos, ha sido un objeto de estudio clásico de la psicología, habiéndose creado numerosos instrumentos de medida para evaluarlo conocidos como tests de personalidad.
De entre todos ellos destaca el Cuestionario Factorial de la Personalidad o Test de los 16 Factores de la Personalidad, también conocido como 16PF, creado originalmente por el psicólogo Raymond Cattell.
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Una breve introducción: ¿qué es la personalidad?
Como hemos mencionado anteriormente, la personalidad es un patrón general de comportamiento, interacción, modos de afrontamiento y relación y de percepción de la realidad que cada individuo posee. Dicho patrón general es un elemento estable y consistente que se va generando a lo largo de la vida de cada persona, forjándose especialmente desde la infancia hasta el inicio de la edad adulta mediante una combinación de elementos biopsicosociales (la genética, el entorno y las vivencias de cada persona).
La personalidad puede variar en algún aspecto en respuesta a situaciones y evoluciones vitales concretas, pero por lo general se mantiene a lo largo del ciclo vital, observándose constante en la mayor parte de los ámbitos y a través de las diferentes situaciones que vivimos. Esto no quiere decir que aspectos concretos sean inmodificables, pero requiere de un elevado nivel de esfuerzo y trabajo, manteniéndose en general el conjunto de características que configuran la personalidad.
El estudio de la personalidad
El estudio de la personalidad ha tenido como principales objetivos encontrar y explicar las principales diferencias individuales entre sujetos en lo relativo a su comportamiento, en base a la medición de diferentes rasgos. A partir de dichas medidas se puede realizar una valoración de las características de los individuos a partir de la comparación con la media poblacional, contribuyendo a realizar predicciones sobre el comportamiento propio y ajeno y valorar su adecuación al medio.
Pero se ha de tener en cuenta que la personalidad no es un elemento objetivo fácilmente identificable, sino que se trata de un constructo abstracto difícil de cuantificar. Para elaborar instrumentos que midan la personalidad se han tenido que utilizar diferentes tipos de criterios, como los empíricos o los racionales.
Uno de los métodos de construcción de instrumentos de medida de la personalidad es a partir de criterios factoriales, en los que se busca la relación entre diferentes características con el fin de establecer grupos de rasgos, los cuales son los conocidos como factores de personalidad. Teniendo en cuenta este tipo de criterios, Raymond Cattell construyó en 1957 uno de los más famosos tests de personalidad, el 16 PF.
Entrando en materia: 16 PF
El Cuestionario Factorial de la Personalidad o 16 PF es uno de los instrumentos de medida de la personalidad más conocidos y utilizados a lo largo de la joven historia de la Psicología. Creado como ya se ha dicho por Raymond Cattell a partir de criterios factoriales, este instrumento de evaluación tiene como principal función estudiar y valorar los rasgos de personalidad a partir de diversos factores (dieciséis principales y cinco secundarios o globales en la última versión).
Dichos factores son bipolares, es decir, van en un contínuo que va de un extremo del rasgo al otro, situándose la puntuación de la persona evaluada en algún punto de dicho contínuo.
Para hacerlo más fácil de entender: si uno de los factores es la dominancia, uno de los polos refleja a una persona autoritaria, competitiva e independiente mientras que el otro indicaría una persona sumisa, conformista y dependiente de los demás, estando la mayor parte de la población en una situación intermedia.
Organización interna del test de personalidad
Este test de personalidad está organizado a partir de un total de 185 preguntas cerradas con tres opciones de respuesta, siendo una de las opciones indicativo de que no se sabe que contestar, con la excepción de algunas preguntas planteadas como resolución de problemas para evaluar la inteligencia. Como se basa en preguntas y no requiere de tecnologías muy avanzadas para arrojar un resultado, ha sido muy utilizado en empresas y todo tipo de organizaciones a la hora de seleccionar al personal que puede pasar a formar parte del equipo o bien recibir un ascenso.
La puntuación obtenida del 16 PF se calcula a partir de plantillas, en las cuales se tiene en cuenta el valor de cada uno de los ítems en la predicción del factor que les corresponde, habiendo alrededor de entre diez y catorce por factor, y pasándose dicha puntuación directa a decatipos baremados.
El 16 PF consta de diferentes tipos de escalas. En su quinta versión existen tres escalas empleadas con el fin de detectar los estilos de respuesta, pudiendo valorar la sinceridad y verificabilidad de los datos obtenidos, cuatro escalas globales o secundarias y por último dieciséis factores de la personalidad que son valorados en este test de personalidad.
Población en la que aplicarlo
El tipo de población para el que el 16 PF está pensado se sitúa en aquellos sujetos de a partir de dieciséis años de edad, necesitando de un nivel de comprensión similar a la de un alumno de segundo de la ESO para poder realizarlo correctamente. Esto es necesario, entre otras cosas, para garantizar que todos tengan las competencias suficientes para comprender el funcionamiento básico del test y cómo aplicarlo.
A pesar de ello existen diferentes variantes de este test de personalidad, estando algunas versiones más dirigidas a personas con dificultades con la lectura o problemas socioculturales.
Objetivos y aplicación
El 16PF está ideado para hacer un análisis de los rasgos y estilos de respuesta de la persona a evaluar, pudiendo obtener con su interpretación un perfil básico de la personalidad del sujeto.
Este test de personalidad resulta de gran utilidad, siendo frecuentemente aplicado en ámbitos como la investigación, psicología de las organizaciones y recursos humanos y psicología clínica. Sin embargo, la idea de este cuestionario es la de evaluar personalidad típica, no estando centrado en el análisis de psicopatología (si bien a través de su observación se podrían apreciar rasgos que tienden alguna anomalía, no se trata de su objetivo y no está preparado para el diagnóstico de trastornos).
Interpretar el 16 PF
A la hora de analizar los resultados, los pasos generales son observar en primer lugar los estilos de respuesta para observar si los resultados del test son fiables, para posteriormente valorar las las dimensiones globales y los decatipos extremos, que sirven como idea general de la situación y perfil del paciente al ser extraídas de las puntuaciones del resto de escalas y finalmente analizar e interpretar la puntuación de cada una de las 16 escalas primarias, con la ayuda del propio test y de guías externas.
Las escalas y factores del 16 PF
Estas son las diferentes escalas que conforman el 16 PF:
1. Escalas de estilo de respuesta
Las escalas de estilo de respuesta tienen como función principal asegurar la validez y fiabilidad de los datos recogidos sobre el paciente, observándose si contesta correcta y sinceramente o si aparecen tendencias que distorsionen los datos y por tanto el análisis de la personalidad.
2. Manipulación de la imagen
Esta escala se encarga de valorar si las respuestas dadas a las preguntas son sinceras o se mueven por deseabilidad social, sea para dar buena imagen o para aparentar estar peor de lo que se está, con objetivos secundarios.
3. Aquiescencia
En esta escala se valora la tendencia a contestar siempre positivamente a las preguntas, con cosa que podría indicar falta de sinceridad que dificulta el análisis correcto de la situación.
4. Índice de infrecuencia
Se utiliza para detectar respuestas infrecuentes. Puede deberse a que el evaluado contesta al azar, si bien habría que analizar cada respuesta y su correspondencia con el conjunto del test de personalidad.
Los 16 factores principales
Los factores principales o de primer orden reflejan de una manera amplia y específica los distintos rasgos de la personalidad. Son los siguientes.
A: Afectividad: Esquizotimia (poca afectividad) vs Ciclotimia (afectividad elevada)
Este factor valora la expresividad emocional. Puntuar alto en esta escala implica ser afectuoso y expresar las propias emociones, siendo placentero vincularse a otros y teniendo cierta facilidad para ello. Por contra, puntuar bajo acercaría la personalidad al polo esquizotímico, siendo poco afectivo, con pobre expresividad y un nivel elevado de rigidez y tendencia al aislamiento.
B: Razonamiento: Inteligencia alta vs Inteligencia baja
Si bien este factor está más vinculado a la inteligencia que a la personalidad, no se puede obviar que tener mayor o menor capacidad intelectual afecta al modo en que vemos el mundo y actuamos en él.
Una puntuación alta haría pensar en alguien con facilidad para aprender, comprender y entender lo abstracto y adaptarse a las circunstancias. Puntuar bajo implica una menor capacidad para hacer frente al medio, teniendo mayor rigidez y menos opciones de respuesta y resultando complicado entender el mundo.
C: Estabilidad: Fortaleza del Yo vs Debilidad del Yo
Este factor se refiere principalmente a la estabilidad de la persona. Se considera que una persona que puntúe alto tiene tendencia a ser capaz de mantener la compostura y tener una emocionalidad estable. Una puntuación baja reflejaría neuroticismo, labilidad y poco control emocional.
D: Dominancia: Dominancia vs Sumisión
El factor dominancia se refiere a la capacidad de ser independiente. Puntuar alto significa que el patrón de comportamiento es competitivo, independiente e incluso autoritario, mientras que las bajas puntuaciones indican sumisión y conformismo.
E: Impulsividad: Surgencia (impulsividad) vs Desurgencia (inhibición)
Indica la capacidad motivacional y las ganas de hacer cosas, así como la capacidad de autocontrol. Una persona que puntúe alto será sociable, motivada, impetuosa e impulsiva, mientras que las personas con baja puntuación tenderán a ser preocupadas, prudentes y ansiosas.
F: Conformidad grupal: Superego fuerte vs Superego débil
Hace referencia a la capacidad de autocontrol, decisión y valoración de los demás. Una persona que puntúe alto será decidido, estable, comprometido y valorará a los demás pero sin dejarse arrastrar por ellos. Puntuar bajo puede indicar frivolidad, negligencia e inmadurez,
G: Atrevimiento: Parmia (atrevimiento) vs Trectia (timidez)
Se trata de la capacidad de transformar los pensamientos y voluntades en actos. Puntuar alto implica atrevimiento y espontaneidad, mientras que bajas puntuaciones indican inhibición y timidez que impide hacer cosas.
H: Sensibilidad: Premsia (sensibilidad) vs Harria (dureza)
Este factor indica la presencia de sensibilidad en la persona. Puntuar alto hace pensar en una persona emocional, amable y tímida, lábil. Bajas puntuaciones indican dureza emocional, pragmatismo y poca capacidad de ilusionarse.
I: Suspicacia: Alexia (confianza) vs Protensión (desconfianza)
El nivel de confianza o desconfianza hacia los demás. Personas que puntúan alto son desconfiadas de las intenciones ajenas, mientras que bajas puntuaciones reflejan interés y confianza hacia los demás, así como capacidad de vinculación.
J: Imaginación: Praxemia (pragmatismo) vs Autia (imaginación)
La capacidad de abstraerse. Tener una puntuación elevada hace referencia a la capacidad de ser excéntrico y poco convencional, imaginativa. Puntuar bajo en este aspecto refleja una personalidad centrada en la realidad, con poco interés artístico y convencional.
K: Astucia: Sutileza vs Ingenuidad
Capacidad de analizar la realidad de forma exhaustiva y observar las diferentes opciones y perspectivas. Personas que puntúan alto tienen habilidad para detectar y analizar tanto la realidad como a sí mismos, mientras que los que tienen baja puntuación son más ingenuos, crédulos y algo más torpes en sus relaciones.
L: Culpabilidad: Conciencia vs Imperturbabilidad
Se refiere a la capacidad de hacerse responsable de las cosas. Altas puntuaciones indican aprehensión y facilidad para culpabilizarse. Bajas puntuaciones reflejan seguridad y serenidad.
Q1: Rebeldía: Radicalismo vs Conservadurismo
Esta escala del 16 PF indica la capacidad de apertura mental o el respeto a los modos de hacer tradicionales. Puntuar alto indica interés por lo intelectual y apertura mental. Bajas puntuaciones indican conservadurismo, tradicionalidad y respeto.
Q2: Autosuficiencia: Autosuficiencia vs Dependencia
Refleja la capacidad de tomar las propias decisiones, puntuando estas personas alto en la escala, o la preferencia por tomar decisiones consensuadas por el grupo y depender de otras personas, siendo en este caso la puntuación más baja.
Q3: Autocontrol: Autoestima vs Indiferencia
Implica medir el control emocional y comportamental. Puntuar alto hace pensar en la presencia de personalidad controladas, mientras que una baja puntuación refleja despreocupación
Q4: Tensión: Tensión vs Tranquilidad
Se refiere al nivel de ansiedad de la persona. Individuos nerviosos e irritables puntuarían alto mientras que personas tranquilas tendrían una menor puntuación
Escalas de segundo orden o globales
Las escalas de segundo orden se obtienen del análisis de los dieciséis factores principales, sirviendo de resumen general de la situación del paciente si bien aportando información más general y menos precisa que el análisis pormenorizado de cada escala.
QS1: Introversión y extraversión
Las personas con facilidad para relacionarse tienen una elevada puntuación en este factor secundario, siendo extravertidos. Por contra, los introvertidos o personas que tienden a la inhibición social suelen tener una baja puntuación.
QS2: Ansiedad-Tranquilidad
Serenidad y seguridad son características comunes en personas que puntúan bajo en esta escala. Por contra las personas ansiosas e inseguras tienden a tener elevada puntuación en esta escala.
QS3: Susceptibilidad-Tenacidad
Las personas que se preocupan, se frustran o se desaniman fácilmente tienden a puntuar bajo, independientemente de su nivel de amabilidad. También suelen ser analíticos. Por contra una puntuación elevada indica capacidad de decisión y estabilidad, si bien también un menor nivel de valoración de riesgos.
QS4: Dependencia-Independencia
Refleja en sus puntuaciones altas independencia, asertividad, desinhibición y radicalidad mientras que si se puntúa bajo se indica inseguridad, humildad, timidez y moralismo.
Referencias bibliográficas:
- Cattell, R.B.; Cattell, A,K., Cattell, H.E.P. (1995). 16 PF-5. Cuestionario Factorial de Personalidad. TEA ediciones.
- Cohen, R.J. & Swerdlik, M.E. (2002). Pruebas y evaluación psicológicas. McGraw Hill. Madrid
- Karson, M., Karson, S., & O’Dell, J. (2002). 16PF-5. Una guía para su interpretación en la práctica clínica. Madrid: TEA ediciones
- Schuerger, J. M. (2009). The 16 Personality Factor Questionnaire: 16PF. In C. E. Watkins, Jr., and V. L. Campbell (Eds.), "Testing and Assessment in Counseling Practice" (pp. 67–99). Mahwah, NJ: Lawrence Erlbaum Associates, Inc.