El miedo es una sensación que produce una gran angustia y sufrimiento a la persona que lo padece, y que puede originarse por una causa real, pues es una emoción adaptativa que ha ayudado a la especie humana sobrevivir a lo largo de los siglos.
Sin embargo, las personas podemos experimentar miedos irracionales hacia objetos o pensamientos. Respecto a estos últimos, algunos miedos pueden ser consecuencia de creencias disfuncionales y de expectativas irreales.
- No todo el mundo siente miedo a los mismos estímulos. En nuestro artículo "Los 16 tipos de miedo y sus características” puedes conocer las diferentes clases de miedo que existen.
La relación del miedo con el desarrollo personal
El miedo va muy ligado con el desarrollo personal de una persona, pues algunos de estos miedos obligan a las personas a comportarse de una manera que en realidad no desean. Por ejemplo, el miedo a lo desconocido puede hacer que una persona rechace un trabajo que le gusta por no saber qué se encontrará, o hace que evite irse un país que quiere descubrir puesto que no cree que pueda sobrevivir lejos de su hogar.
Estos miedos son creencia limitantes que no nos dejan que los individuos cambien ni se superen aún cuando sienten que quieren o deben hacerlo. Estos miedos, en realidad, son muy frecuentes, y a veces es necesario contar con la ayuda de experto en desarrollo personal para que ayude a la persona a experimentar en su propia piel que la creencias que posee están limitando su verdadero potencial.
Miedos que impiden crecer y desarrollarse
Pero, ¿qué tipos de miedo afectan al desarrollo personal y laboral de una persona? En las siguientes líneas te los explicamos.
1. Miedo al fracaso
El miedo al fracaso es uno de los miedos más paralizantes y que más afectan al desarrollo personal y laboral de una persona. Es un miedo que causa mucho sufrimiento y tiene su origen en las expectativas irracionales que tiene una persona.
También puede estar causado por lo que los demás van a pensar de él si no logra los que se propone, es decir, se relaciona con la opinión de los demás. Es característico las personas perfeccionistas, y afecta al bienestar de éstas.
- Puedes profundizar en este tipo de miedo en nuestro artículo: “Miedo a fracasar: cuando anticipar la derrota nos inmoviliza”
2. Miedo a la incertidumbre
El miedo a la incertidumbre está relacionado con proyectos vitales o tareas que una persona puede realizar. Por ejemplo, cuando alguien tiene que aceptar un empleo pero por creer que no estará preparado lo rechaza. En cambio, el miedo a la incertidumbre es un concepto que está relacionado con la zona de confort o aquel lugar mental en el que nos sentimos seguros, independientemente de que estemos felices o no en él.
El miedo a la incertidumbre afecta al desarrollo personal y produce una gran ansiedad frente al cambio, no tanto por el fracasar o no, sino por el miedo a si será peor lo que viene de lo que ya tenemos. Es irracional porque aunque lo que tengamos sea malo, inmoviliza a la persona frente al cambio.
En definitiva, se refiere al miedo a lo desconocido, al miedo que aparece cuando nos cuesta visualizar el futuro que queremos.
3. Miedo al rechazo
El miedo al rechazo es un tipo de miedo que afecta a las relaciones interpersonales y que está íntimamente relacionado con la baja autoestima. Suele afectar a la persona sobre todo a la hora de encontrar pareja, pero también a otro tipo de relaciones interpersonales como la amistad o los compañeros de trabajo. El miedo al rechazo también se asocia al miedo al ridículo y a quedar mal delante de los demás.
4. Miedo a la soledad
El miedo a la soledad también es un miedo que no nos deja crecer, puesto que nos hace tener conductas de dependencia hacia otras personas, y por eso podemos llegar a anularnos y podemos dejar de lado nuestras propias necesidades e intereses para no estar solos. Las personas con miedo a la soledad pueden acabar inmersos en relaciones traumáticas y seguir en ellas a pesar del dolor que sienten.
5. Miedo al compromiso
El miedo al compromiso es el polo opuesto al miedo anterior, pues lo que preocupa a la persona es comprometerse con la alguien equivocado. Esto no quiere decir que debamos estar con alguien por la fuerza porque se puede vivir feliz estando soltero, pero puede provocar que al conocer a alguien interesante nos echemos para atrás y evitemos tener intimidad con esa persona y darle nuestra confianza.
- Es posible ser feliz y estar soltero tal y como te contamos en nuestro artículo “¿Es posible estar soltero y ser feliz? Los 8 beneficios de no tener pareja”
6. Miedo a la crítica
Uno de los miedos que están relacionados con la evaluación que los demás hacen de nosotros es el miedo a la crítica. Este miedo consiste en temer la desaprobación de los demás y a que lo que hacemos no guste a otros. Es muy incapacitante, por ejemplo, para las personas que intentan triunfar en el mundo del espectáculo. Tener miedo a la crítica puede llevar a la persona a rendir por debajo de su verdadero potencial.
7. Complejo de Jonás
El complejo de Jonás se conoce también como miedo al éxito, y es un fenómeno que ha sido estudiado desde el punto de vista de la psicología humanista. De hecho, es un término del que Abraham Maslow habló en su libro The Farther Reaches of Human Nature publicado en 1971.
El complejo de Jonás tiene que ver con la parte más alta de la “Pirámide de las necesidades humanas” propuesta por este psicólogo, es decir el concepto de autorrealización” o el de conseguir el máximo potencial que un individuo posee. Para Maslow, el complejo de Jonás se manifiesta cuando la persona tiene miedo a expresar su mejor versión.
- Puedes saber más en nuestro artículo: “Complejo de Jonás: el curioso miedo a alcanzar el éxito”