Diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento

Resumen de las diferencias entre estos conceptos usados para prevenir propagación de enfermedades.

Diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento

Con la llegada del coronavirus (COVID-19) y, durante estos días (marzo del 2020), escuchamos con mucha frecuencia estos tres términos: cuarentena, distanciamientos social y aislamiento. ¿Qué significa cada término? Se trata de tres conceptos muy similares, pero que albergan ciertas diferencias.

¿Qué diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento podemos encontrar? En este artículo hablamos de las cuatro más importantes, aunque, a través de las definiciones iniciales que os traemos de cada concepto, podremos entender mejor cuáles son éstas.

Luchando contra la enfermedad: ¿qué es cada concepto?

Antes de explicar las diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento, vamos a ver qué significa cada concepto. Se trata de tres medidas médicas utilizadas para evitar el contagio o la propagación de una determinada enfermedad, normalmente de tipo infeccioso, en la población.

Son medidas ampliamente utilizadas ante pandemias, como sería el actual coronavirus (que, en este caso, ya se han puesto en práctica en la mayoría de países para luchar contra la enfermedad).

1. Cuarentena

La cuarentena es un concepto de la medicina, que se utiliza para designar el aislamiento de personas (en sus casas), durante un tiempo no específico, como consecuencia de una enfermedad. El objetivo de la cuarentena es disminuir, evitar o eliminar el riesgo de que se extienda dicha enfermedad. Es decir, se busca evitar el contagio y detener la propagación de la misma.

Esta acción se utiliza para separar y restringir el movimiento de personas sanas, o personas sanas que pueden haber estado expuestas a personas contagiadas. La cuarentena, en el caso del coronavirus, por protocolo dura 14 días.

Además, también en el caso del coronavirus, se estima que una vez infectados por él, tardamos entre 5 y 14 días, como máximo, en manifestar los síntomas. Por lo tanto, pasada la cuarentena se puede ver si la persona ha manifestado síntomas o no (aunque hay personas contagiadas que no manifiestan nunca síntomas).

En estado de cuarentena, la población no puede salir a la calle (sólo para casos excepcionales). En España, la cuarentena implica sólo poder salir de casa para trabajar (con una autorización), para comprar, para sacar a pasear a las mascotas, para acompañar a personas mayores o menores, para tirar la basura, etc. En caso de incumplir estas normas, se puede recibir una multa o incluso ser detenido/a.

2. Distanciamiento social

Por su parte, el distanciamiento social engloba todas aquellas medidas de control de una infección, que tienen el objetivo de detener (o enlentecer) la propagación de una enfermedad de tipo contagioso.

A efectos prácticos, el distanciamiento social implica no poder estar muy cerca de las personas que nos cruzamos o con las que estamos (a unos dos metros de distancia), y evitar estar en grupos numerosos (en España, por ejemplo, la cuarentena implica el distanciamiento social en las colas de los supermercados, y también en la imposibilidad de salir a la calle acompañado/a, a no ser que sea de un menor, de una persona con discapacidad o de una persona mayor).

3. Aislamiento

El aislamiento se utiliza para separar a las personas que ya padecen la enfermedad contagiosa en cuestión de las personas sanas, para evitar que las primeras contagien al resto, disminuyendo así el riesgo de propagar la enfermedad.

Esta acción es utilizada por los hospitales y por los diferentes centros médicos, con el necesario control médico. En términos prácticos sería lo mismo que la cuarentena, pero en este caso, se utiliza sólo en personas ya enfermas.

4 Diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento

Ahora que desarrollaremos las principales diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento, entenderemos un poco mejor éste y los demás conceptos o medidas.

Como vemos, los tres fenómenos explicados, cuarentena, distanciamiento social y aislamiento social, tienen el mismo objetivo, que es el de evitar el contagio y la propagación de una determinada enfermedad entre la población. A su vez, se trata de procesos o acciones que se utilizan, sobre todo, ante pandemias.

Las pandemias son enfermedades epidémicas que, o bien afectan a casi todos los individuos de una determinada localidad, o bien se extienden por muchos países de forma exageradamente rápida. Un ejemplo de pandemia lo encontramos en la situación actual que estamos viviendo ya hasta 171 países, como consecuencia de la rápida propagación del coronavirus (COVID-19).

A raíz de este hecho se han aplicado, en la mayoría de estos países, los tres mecanismos o acciones que explicamos en el presente artículo. Hemos visto cómo la finalidad de estos tres conceptos es la misma; sin embargo, éstos presentan diferencias. Veremos las principales a continuación.

1. Naturaleza del término

La primera de las diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento tiene que ver con la naturaleza u origen de cada término; es decir, con el campo del que proceden (remarcar que no estamos hablando de etimología).

En el caso de la cuarentena, el término procede de la medicina (en el sentido de que es un término médico, ampliamente utilizado en este sector); en cuanto al distanciamiento social, aunque se utilice también en medicina, el concepto procedería de la psicología social; finalmente, el aislamiento también procedería de la psicología social, aunque luego se utilice para situaciones médicas como las pandemias.

2. Población a la que va dirigida

Otra diferencia entre las tres medidas radica en la población a la que va dirigida cada una, ya que existen matices al respecto.

La cuarentena va dirigida a toda la población (sana, sana que ha estado expuesta a personas contagiadas, y enferma), mientras que el distanciamiento social va dirigido a las personas sanas que aún no han contraído la enfermedad (las personas con la enfermedad directamente están aisladas, aunque también se les podría pedir el distanciamiento social), y finalmente, el aislamiento se aplica a las personas que ya han contraído la enfermedad, para evitar que la contagien al resto.

3. Grado o intensidad de la acción

Otra de las diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento, es el grado de intensidad de la acción, o hasta qué punto interfiere en la vida de la persona.

Así, mientras que el aislamiento tiene una intensidad elevada, en el sentido de que la persona directamente es aislada de su entorno (no puede ver a sus amigos, familiares y, en definitiva, a nadie), en la cuarentena la intensidad podríamos decir que es moderada, porque la persona sí puede ver a otras personas y estar en contacto con ellas (aunque esté recluida en casa, y deba aplicar las medidas de seguridad recomendadas).

Finalmente, el distanciamiento social implicaría el grado de menor intensidad, ya que en este caso las personas se pueden ver, pero no acercarse demasiado las unas a las otras.

4. Período de tiempo o duración

Finalmente, la cuarta de las diferencias entre cuarentena, distanciamiento social y aislamiento, tiene que ver con el período de tiempo de cada acción. La cuarentena es la única medida que tiene un período de tiempo estipulado y específico; el tiempo es determinado por el protocolo de cada enfermedad o pandemia.

Por su parte, el distanciamiento social no suele tener un tiempo estipulado, sencillamente dura lo que dura el estado de alerta ante esa enfermedad. En el caso del aislamiento, éste finaliza cuando la persona ya no manifiesta síntomas y cuando se demuestra que está curada (aunque deben seguirse aplicando las medidas de seguridad en cuestión).

Referencias bibliográficas:

  • Delgado, R.C., González, P.A. y Soler, A.R. (2009). Sistema sanitario y triaje ante una pandemia de gripe: un enfoque desde la salud pública. Emergencias, 21: 376-381.
  • Ledermann, W. (2003). El hombre y sus epidemias a través de la historia. Revista chilena de infectología, Edición aniversario: 13-17.
  • Real Academia Española. (2001). Diccionario de la lengua española [Dictionary of the Spanish Language] (22nd ed.). Madrid, Spain: Author.

Graduada en Psicología por la Universitat de Barcelona, con Máster en Psicopatología Clínica Infantojuvenil por la Universitat Autònoma de Barcelona. Especializada en Trastornos del Neurodesarrollo. Actualmente trabaja como Psicóloga infantil en la Associació Catalana del Síndrome X Frágil. Autora del libro "Vivir de memoria" (Editorial Círculo Rojo, 2018). Aficionada del deporte y la lectura.

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