Decepción, o por lo menos un gran asombro es el sabor que nos deja el comportamiento humano durante la emergencia sanitaria cuyo protagonista es el coronavirus tipo 2 del Síndrome Respiratorio Agudo Grave (SARS) y sus variantes.
No estábamos preparados, eso es evidente. Ni siquiera hay prueba segura del origen del virus. Tampoco es posible conocer cuándo aparecerá el siguiente, pero sí es factible prepararse psicológicamente, de manera que podamos salir victoriosos de la encrucijada que plantean las emergencias globales.
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Generalización, Distorsión, Eliminación
Mucha controversia y comportamientos cuestionables se generaron sobre las vacunas. Analizando lo ocurrido, descubrimos imperceptibles mecanismos influyendo sobre el pensamiento. Si conocemos su “modus operandi”, evitaremos la repetición del caos que cambió para siempre nuestra forma de vida.
Para ello, de la Programación Neurolingüística (PNL), que es un conjunto de modelos que estudian la conducta humana, revisaremos los Filtros Perceptuales: Generalización, Distorsión, Eliminación. Ellos son extremadamente útiles e indispensables para la vida, ya que reducen y catalogan el gigantesco caudal de información que llega al cerebro desde el mundo exterior, permitiéndole a la mente realizar su trabajo. Estas operaciones ocurren sin tregua y, gracias a ello, usted va creando su imagen de lo que le rodea o sucede (los mapas), esto es, una simplificación de la realidad combinada con su propia interpretación.
El problema estriba en que el ser humano olvida la diferencia entre todo lo que percibe (la realidad) y las ideas que se forman sobre lo percibido (el mapa). Luego toma sus percepciones como la realidad. Produciendo conceptos, juicios y razonamientos más, menos, o completamente alejados de la verdad.
El éxito o el fracaso de su desempeño personal depende de los mapas. Debido a que estos son la materia prima de sus pensamientos, su forma de expresarse y su comportamiento.
Generalización
Se produce cuando su cerebro traslada algo que sucedió una vez, a todas las experiencias similares (generalizadas) en combinación con el miedo.
Al acariciar un perro y recibir una mordida, usted generaliza nunca acariciar perros desconocidos, actuando de este modo se obtiene certidumbre sobre qué hacer en un momento dado. Pero, cuando el miedo interviene, la persona acoge la certeza (generaliza) que todos los perros la morderán, desarrolla cinofobia y decide nunca tener mascotas. Las 700 millones de personas que sufren una fobia lo atestiguan.
“Siempre, nunca, todo, nada y frases similares” son formas de generalización.
Durante la pandemia se generalizó (con miedo) cualquier noticia, falsa o verdadera, sobre la vacuna, produciendo certezas que iban desde la muerte inmediata al vacunarse, hasta la seguridad de una conspiración para dominar o matar. Muchos decidieron no vacunarse.
Un premio Nobel afirmó: “Las vacunas producen las variantes”. La realidad es que ya había variantes antes de iniciar la inmunización. Las personas generalizaron que, al ser premio Nobel, lo sabe todo y nunca hablará sin fundamento; esto resultó falso.
Por otra parte, el tema de las conspiraciones mundiales para dominar el mundo, (Illuminati, Grupo Bilderberg, extraterrestres etc.) no es nada nuevo, también es producto de la mezcla de la generalización con el miedo.
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Distorsión
Ocurre cuando planificamos viajes, presupuestos, inventos, construcciones o el almuerzo. Indispensable para el progreso de la humanidad, la distorsión se convierte en un peligroso obstáculo al agregarle una dosis de miedo.
Se inventan o aceptan afirmaciones como: metales atraídos por el cuerpo, mutaciones, impotencia, esterilidad, virus extraterrestre, reducción y control de la población mundial, inyección de microchips, bioluminiscencia por vacuna más antenas 5G, seremos zombies en 3 años, las vacunas contienen compuestos no divulgados etc.
Un ejemplo: la noche de Halloween de 1938 en USA se emitió por radio una adaptación de la obra de Orson Welles: “La guerra de los mundos” donde se informaba que los marcianos aterrizaban y mataban a todos. Resultado: pánico, caos vehicular, telefónico etc.
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Eliminación
Este filtro actúa siempre que la persona descarta, omite o elimina cierta información debido a que la ha olvidado, le teme o no la considera relevante. Se utiliza para estudiar, manejar un vehículo o dialogar en una fiesta, usted “elimina” las distracciones para poder conversar, analizar el tráfico o hacer las tareas. La eliminación le ayuda a no distraerse para lograr su objetivo.
Después de ver una película de terror mucha gente suele dormir con la luz encendida. Saben que en su cuarto no hay ningún muñeco asesino, pero su temor los controla, produciendo la eliminación de la realidad (la amenaza no existe), ocasionando que la idea de ser atacado los domine.
La muerte por COVID-19 con todas sus dolorosas y escalofriantes situaciones, instalan el miedo y la desconfianza como origen de la mayoría de las acciones, lógicas o no (compra masiva de papel higiénico), que ejecutamos los seres humanos. Nos centramos en todo aquello que justifique el temor y descartamos la abundante información científica que está disponible en sitios web científicos acreditados.
Como resultado, usted ya no es capaz de discernir entre la verdad o la mentira, desconfía de todo y de todos. Por lo tanto, elige no vacunarse y hasta hace campaña para que nadie más se vacune.
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¿Qué hacer?
Para actuar de manera ideal, infórmese adecuadamente y no permita que los Filtros Perceptuales entren en acción ante el miedo. Pero el primer paso es el más difícil: reconozca que está asustado. Luego dese cuenta del sabor psicológico de este estado emocional, es decir, las sensaciones características que lo acompañan. Así podrá detectar y evitar la aparición del miedo en el razonamiento o en sus juicios, confrontándolo con la realidad.
Entrénese en métodos de autocontrol. Ejemplos: Mindfulness o meditación Zen. El hecho de tomar consciencia transformará radicalmente sus conceptos, creencias y comportamientos.
Si le resulta difícil o cree que no puede, busque ayuda profesional, resulta impostergable descubrir, admitir y luego conquistar el temor que le ha dominado en esta pandemia. De lo contrario, será presa fácil del miedo y este le impedirá reconocer que el primer responsable de proteger su vida y la de los demás es usted.
¿Listo para la próxima emergencia global?
