El término "sobrecompensación" fue ampliamente estudiado por el médico y psicoterapeuta vienés Alfred Adler, ampliamente conocido por ser el fundador de la escuela de la psicología individual, así como también por haber sido colaborador de Sigmund Freud.
La sobrecompensación en psicología viene a ser la exageración o engrandecimiento de una capacidad determinada que posee una persona con el objetivo de disimular o tapar otra característica o capacidad que considera que son inferiores en comparación con otras personas, pudiendo ser esta autopercepción real o imaginaria. En la teoría de Adler, la sobre compensación está estrechamente relacionada con el complejo de inferioridad.
En este artículo veremos con más detalle en qué consiste tanto el concepto de sobrecompensación como el complejo de inferioridad.
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¿Qué es la sobrecompensación?
Aunque el concepto de sobrecompensación ya había sido utilizado por Sigmund Freud, fue Alfred Adler, el fundador de la escuela de la psicología individual, quien introdujo este término en su teoría en relación a los sentimientos de inferioridad sufridos por algunas personas, gracias a la cual este concepto tomó una mayor consideración en el campo de la psicología.
Y es que en la teoría de la psicología individual de Adler tiene como uno de los fundamentos la creencia de que una de las principales motivaciones del psiquismo de las personas es esa tendencia a tratar de compensar las propias características físicas que la personas considera que son “inferiores” a las de otras personas.
En otras palabras, la sobrecompensación se trata de la tendencia a tratar de exagerar una serie de capacidades que posee una persona con el fin de tapar o compensar otras capacidades o características propias que considera que son inferiores a las de otras personas, pudiendo ser estas reales o incluso imaginarias, fruto de una exageración creada en su imaginación.
En el proceso de la sobrecompensación también puede pasar que una persona tenga cualquier tipo de impedimento físico o cognitivo e intente corregirlo de una manera desmedida e incluso exagerada.
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Sobrecompensación y complejo de inferioridad en psicología
El complejo de inferioridad se compone de una serie de actitudes, representaciones mentales y conductas relacionadas con un sentimiento de inferioridad con respecto a otras personas. Podría decirse que el complejo de inferioridad es una sensación personal de inadaptación.
Adler en su teoría de la psicología individual utilizó este constructo para dar un significado central a esa forma de autopercibirse que tienen algunas personas, relacionando alguna aptitud o característica física, que ellos consideraban que es inferior con respecto a la funcionalidad que consideran que debería tener (p. ej., una persona tiene complejo con sus brazos por que piensa que son “demasiado delgados” y que no le van a permitir coger objetos pesados, pudiendo incluso llegar a infravalorar su propia fuerza).
Entonces, en su teoría se refería a que las personas trataban de realizar una sobrecompensación de esa característica física que les causa el complejo o sentimiento de inferioridad (p. ej., para “compensar” ese complejo que tiene con sus brazos, suele llevar siempre camisetas de manga larga).
Adller se interesó especialmente por el estudio del complejo de inferioridad y los efectos negativos y positivos de la autoestima durante la época en la que trabajó con niños que tenían algún tipo de discapacidad física, en los que observó notables diferencias en la capacidad de logro de sus pacientes, y es que algunos de ellos logran grandes éxitos en el deporte, viendo en ellos una gran motivación por superar sus propias capacidades día a día. Al mismo tiempo, otros pacientes se sentían abatidos por su discapacidad y no tenían motivación alguna para intentar progresar. Por tanto, Adeler comprendió que esas diferencias se debían a la autoestima de cada uno de ellos,
En psicoanálisis, hay manuales sobre el tema que explican que el complejo de inferioridad se ha caracterizado por una lucha por alcanzar ciertas metas irreales o inalcanzables, provocando de esta manera inseguridades y complejos en la persona.
Freud consideró que el complejo de inferioridad se trataba de un síntoma que debía de analizarse en las sesiones de psicoterapia en referencia la posibilidad de que hubiera dos tipos de causas para ese complejo: reales o imaginarias. Asimismo, Freud se refería al complejo de inferioridad, sin importar que su causa sea real o imaginaria, como una serie de pensamientos sobre uno mismo que podrían desencadenar sentimientos de culpabilidad o incluso de depresión, siendo en todo caso una evaluación negativa de uno mismo.
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Psicología individual de Alfred Adler
Para entender mejor la sobrecompensación es conveniente conocer mejor la teoría de la psicología individual de Adler, que en su enfoque psicológico hace hincapié en estudiar y comprender a las personas, con todas sus características, como un todo que está en contacto con el ambiente en el que viven, ya que Adler concibe al ser humano como un ser unitario que se fija en su entorno. Es decir, que se ve influido por lo que ocurre en la comunidad en la que vive. En cambio, Freud daba menos importancia al contexto ambiental y se centraba más en la vida intrapsíquica de las personas.
A su vez, Adler ve al ser humano como un ente que se preocupa por su futuro, y no tanto en su pasado, como hacía Freud, lo que le guía por su propio instinto de superación, lo que mantiene a las personas motivadas a poner en marcha una serie de tareas que permitan la consecución de unas metas que previamente se han propuesto.
Por lo tanto, hay dos ideas fundamentales en la teoría de Adler: el afán de superioridad y el sentido de comunidad de las personas.
Ese sentido de comunidad viene dado por el hecho de que las personas somos seres sociales que necesitan las relaciones y la unidad con otras personas para su supervivencia. Por otro lado, el afán de superioridad es esa motivación que tienen las personas para mejorar a lo largo de su vida y también está relacionado con el sentido de perfeccionismo. Entonces ese afán de superioridad y de perfeccionismo son producidos en el contexto social, dado que por naturaleza los seres humanos tienden a ser competitivos y a compararse con los demás.
Al mismo tiempo, ese afán de superioridad y de perfeccionismo suelen desencadenarse por los intentos de las personas para compensar algún sentimiento de inferioridad, al percibir alguna clase de debilidad o punto débil propio en comparación con el de otras personas de nuestro entorno, y esto podría verse como una manera de sobrecompensación. Según Adler, todas las personas sufren ese sentimiento de inferioridad en algún momento de su vida y en alguna medida, por lo que intentan de alguna manera su sobrecompensación.
Adler considera que este sentimiento de inferioridad podría ser muy pronunciado y causar un gran malestar en aquellas personas que sufren problemas complicados a lo largo de su infancia que les haga sentirse inseguros o también en aquellos que sufren una limitación física de cualquier tipo. La importancia que Alfred también daba a la repercusión de las experiencias durante la infancia en la edad adulta viene dada de la influencia que tuvo Freud en él, y es que Adler también consideraba que determinados sucesos complicados en la infancia podrían condicionar el resto de la vida.
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Su relación con el estilo de vida de las personas
Según la teoría de la psicología individual de Adler, todos los seres humanos viven impulsado por un impulso de superación, lo que él denomina como un estilo de vida, que se puede entender como todas las elecciones y todos los actos que una persona va haciendo a lo largo de su vida con el fin de que haya una sobrecompensación de los sentimientos de inferioridad que vive la persona.
Entonces las personas, según Adler, suelen llevar un estilo de vida que le dé un sentido a sus creencias y al mismo tiempo permita que progresen hacia sus objetivos.
Aquí vemos otra vez la premisa que tiene Adler acerca del hecho de que las personas funcionan como un todo que trata de conseguir un futuro prometedor y que supere la situación actual en que viven, de manera que se produzca una mejor constante en diferentes ámbitos que cada persona considere importantes y que además sirvan a modo de sobrecompensación de algún sentimiento de inferioridad.
La teoría de Adler acerca del estilo de vida tiene tres conceptos centrales:
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Finalismo ficticio: las personas son finalistas dado que siempre están buscando conseguir unos objetivos.
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Yo ideal: está constituido por el conjunto de objetivos para el futuro que tiene cada persona.
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Yo creativo: parte de la personalidad que le da sentido al pasado, corrige errores y los utiliza para buscar un mejor futuro.
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Ejemplo de sobrecompensación
En la infancia y en la adolescencia es muy frecuente la comparación con otras personas, al mismo tiempo que las personas suelen ser más inseguras en estas etapas de su vida debido a la falta de madurez, entre otros factores, al mismo tiempo que todavía no se ha desarrollado por completo su autoconcepto ni su personalidad.
Cuando un niño se siente inferior, por tener la percepción de que está rodeado de otros niños que son más inteligentes y fuertes, dicha inferioridad le motiva para hacer determinadas cosas con el fin de superarse y lograr unos objetivos concretos, lo que podría suponer una manera de sobrecompensación.
Hay que tener en cuenta que si ese niño tiene un equilibrio psicológico, obtener éxito podría ser beneficioso y consolidar la confianza en sí mismo, mientras que si no tiene un equilibrio mental, obtener éxito no alivia sus sentimientos de inferioridad, por lo que podría desarrollar un complejo de inferioridad.
