A la fascinante rama de la biología encargada del estudio e investigación de los seres vivos microscópicos se le llama microbiología. Estas formas de vida diminutas son conocidas como microorganismos, y es sorprendente todo lo que influyen en nuestra vida pese a ser inapreciables a simple vista. La gran mayoría de los microorganismos son unicelulares y se caracterizan por existir numerosas variedades en cuanto a forma y tamaño.
Aunque el ojo humano no sea capaz de verlos, se encuentran por todas partes. Mires donde mires hay microorganismos ya que consiguen sobrevivir en todo tipo de adversidades, debido a su gran capacidad para adaptarse incluso a condiciones ambientales muy extremas. Cuando hablamos de microorganismos, nos referimos a virus, bacterias, hongos, arqueas, protistas, algas, etc. Puede ser que al escuchar estos nombres, directamente lo relacionemos con suciedad, y todo tipo de enfermedades.
No obstante, aunque es cierto que algunos de ellos son patógenos, existen otros muchos que son beneficiosos e incluso necesarios para nosotros y nuestro medio ambiente. Si te has quedado con la intriga de saber más acerca de estos seres que solo se dejan visualizar a través del microscopio, estás en el sitio adecuado.
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Datos curiosos sobre los microorganismos
A continuación, entraremos en el maravilloso mundo de la microbiología y presentamos 20 curiosidades y datos acerca de los microorganismos.
1. En el cuerpo humano hay más microorganismos que células humanas
Eres el anfitrión de billones de bacterias que viven en tu interior de forma organizada y en constante actividad. Los expertos estiman que por cada célula humana, hay hasta diez veces más células microbianas. De hecho, tal es la magnitud, que si tomáramos todas estas bacterias y las colocaremos en una balanza, pesaría entre 2-3 kilos.
2. En tu boca hay más bacterias que humanos en la Tierra
En la boca de cualquiera de nosotros, hay más bacterias que personas en el mundo. En la boca se encuentran más de 600 tipos de especies de microorganismos. En definitiva, se sabe que por cada gota de saliva, hay más de 100 millones de bacterias. Si echamos cálculos, sobrepasa el número de habitantes en la Tierra.
3. La vía láctea se queda corta en comparación con tu cuerpo
Los microorganismos que residen dentro de ti suman un total de 40 millones de millones. Según los expertos, la vía láctea tiene entre 150-250 mil millones de estrellas. Por tanto, una vez más, las bacterias ganan.
4. En la cocina, los microorganismos son unos buenos
El ser humano lleva utilizando los beneficios de los microorganismos en la gastronomía desde hace muchos años. El queso y el yogur son unos ejemplos claros, ya que gracias a las bacterias, se consigue la textura y sabor que a todos nos gusta tanto.
5. ¿De dónde viene el olor a lluvia?
El típico olor a lluvia que se respira tiene mucho que ver con los microorganismos. Las bacterias no tienen olor, pero en el caso de la lluvia, entra en juego una especie microbiana llamada actinobacteria. Las actinobacterias desprenden unas diminutas esporas cuando la temperatura sube levemente. A continuación, cuando las gotas de lluvia golpean el suelo, estas esporas se disparan para expandirse en el aire, produciendo este olor característico a lluvia.
6. Solo 500 microorganismos son perjudiciales para nosotros
Los pobres microorganismos se han llevado toda la mala fama durante mucho tiempo. Siempre se ha relacionado las bacterias con enfermedades y lo cierto es que para todos los microorganismos que existen, solo 500 son patógenos para los seres humanos. Y esto no se queda aquí. De esos 500, solo 50 realmente nos provocan enfermedades.
7. ¿Realmente, cuántos microorganismos hay en la Tierra?
Muchos no, muchísimos. Para hacerte a la idea, vamos a imaginar lo siguiente: si pudiéramos colocar todas las bacterias que existen en el mundo en una línea recta, como formando una fila india, sería tan larga, que se extendería por 10 millones de años luz.
8. Fueron las primeras formas de vida que surgieron
Se estima que los microorganismos llevan en la Tierra casi 4.000 millones de años. Si ya este dato por sí solo resulta fascinante, se debe tener en cuenta que los primeros mamíferos poblaron la Tierra hace 220 millones de años, las plantas hace 530 millones y por supuesto, los humanos hace tan solo 250.000 de años.
9. El aliento matutino tiene su explicación en los microorganismos
Hablemos del aliento matutino y lo desagradable que suele ser. Esto se debe a que durante toda la noche, se producen compuestos volátiles por parte de las tantas bacterias que habitan nuestra boca. Para paliar este olor, lo más recomendable es enjuagarse la boca al levantarse.
10. Son pequeñas, ¿pero cuánto?
Hasta ahora ha quedado claro que los microorganismos son seres diminutos que solo se dejan visualizar a través del microscopio. Pero realmente, ¿qué tan pequeñas son? Se calcula que su tamaño se mueve alrededor de 0,5-5 micrómetros. Para que se comprenda mejor, hazte a la idea que en un milímetro entran hasta mil bacterias colocadas en fila.
11. Ni Marte puede con ellas
Los expertos están comenzando a afirmar que hay bacterias que podrían sobrevivir en Marte. Debido a su gran capacidad de adaptación, ni la falta de oxígeno, las bajas temperaturas, o la elevada radiación pueden afectar o interferir en estos microorganismos.
12. Quorum Sensing, ¿qué es?
Las bacterias tienen una forma de comunicación única que han ido desarrollando con el paso de los años: Quorum Sensing. Cuando los microorganismos están formando una población, producen unas moléculas concretas que actúan como palomas mensajeras. Con el Quorum Sensing, consiguen transmitir unas a las otras información acerca del medio en el que están o de las estructuras o poblaciones que deben formar.
13. Las mayores pandemias de la humanidad han sido por su culpa
Centrándonos en los microorganismos patógenos, cabe destacar que estos han sido los responsables de la mayoría de las pandemias a lo largo del tiempo, provocando la muerte de muchas personas. Algunos ejemplos son el SIDA, la Peste Negra, la Gripe Española, entre muchos otros.
14. La bacteria más letal
Quizás te preguntes cuál es la bacteria más letal del mundo, aquella capaz de matar a muchísimas personas. La respuesta es: Burkholderia mallei. ¿Cómo llega a los humanos? Nos infectamos de esta bacteria a través de los caballos, provocando una enfermedad llamada “muermo”. La letalidad de la misma se sitúa alrededor del 95% si no se toman medicamentos, pero, aunque se empiece con un tratamiento, más de la mitad también mueren. El número es alarmante.
15. No las menosprecies, porque sin ellas, no podrías vivir
Las bacterias de nuestro microorganismo son indispensables para nuestra supervivencia. Establecemos una relación simbiótica con ellas, donde nosotros les proporcionamos un lugar donde reproducirse, crecer y vivir y ellas nos ayudan en distintas funciones necesarias para nosotros como: absorción adecuada de nutrientes, combatir patógenos, mantener la piel en buen estado, producen vitamina, neurotransmisores, ayudan con la digestión, etc.
16. Los microorganismos pueden interferir en tu salud mental
Cómo los microorganismos afectan a nuestra salud mental es un tema en pleno auge en el mundo de la psicología. Se sabe que las bacterias que habitan en nuestro intestino son capaces de producir neurotransmisores y alterar la química cerebral, que por consiguiente, se encuentra estrechamente relacionado con la aparición de la sintomatología depresiva, ansiosa, y otros trastornos neuropsiquiátricos.
17. Tienes un microbioma único que te diferencia
Desde que nacemos, poco a poco vamos creando una huella bacteriana que nos diferencia del resto. Por culpa de nuestros hábitos, estilo de vida y alimentación, creamos un microbioma particular, donde las especies de la misma, se han ido adaptando a las distintas situaciones a las que las hemos expuesto. Por tanto, al igual que ocurre con las huellas dactilares, no hay otro ser humano con la misma huella bacteriana que tú.
18. El olor a transpiración también tiene su razón en los microorganismos
Las bacterias viven por todas partes de tu cuerpo, y la piel de tu axila no se queda atrás. Durante la sudoración, los microorganismos se alimentan con gran intensidad de la piel de la mencionada parte de tu cuerpo y esa peculiar actividad provoca el particular olor a sudor.
19. Una razón más para tener perro
Los perros olisquean, lamen y tocan todo tipo de sustancias cuyos niveles sanitarios son, cuanto menos, cuestionables. Por ello, cuando regresan a nuestra casa, a través del hocico, boca, patas y pelo están introduciendo enormes cantidades de bacterias en el hogar. Pero que esto no nos alarme, ya que aparte de reforzar nuestro sistema inmunitario, también pueden hacernos llegar bacterias beneficiosas para nuestro cuerpo. En otras palabras, los perros incrementan la diversidad de bacterias beneficiosas en nuestros hogares.
20. Los microorganismos bioluminiscentes
¿Alguna vez has visto una especie marina que produzca luz y te has preguntado el porqué? La responsable de esto es la bacteria conocida como Vibrio fischeri. A través de distintas reacciones bioquímicas, esta es capaz de generar luz y curiosamente, aquellas especies marinas de las que hablábamos, hospedan esta bacteria en su interior.
