Drogas de sumisión: qué son, tipos, efectos, y qué hacer ante ellas

Veamos cuáles son los principales tipos de drogas de sumisión y varios consejos de prevención.

Drogas de sumisión

La sumisión química es un método de violencia que se ha llegado a popularizar en los últimos años en diversos países y es por ello que es importante informar en qué consisten este tipo de sustancias.

Las drogas de sumisión son sustancias utilizadas con diferentes fines delictivos como robos, abusos sexuales y/o violaciones. Estas sustancias pueden llegar a anular completa o parcialmente la voluntad de las víctimas y además es frecuente que no recuerden nada de lo sucedido o, en caso de tener recuerdos, estos suelen estar incompletos.

En este artículo veremos en qué consisten las drogas de sumisión y también apuntaremos algunos consejos sobre el modo de actuación en caso de sospechar que alguien pudiera estar empleando estas sustancias con nosotros o alguien cercano.

¿Qué son las drogas de sumisión?

El uso de drogas de sumisión es una práctica delictiva que se ha ido extendiendo alrededor de todo el mundo en los últimos años, siendo utilizadas con diversos objetivos, entre los que cabe destacar el robo, el abuso sexual y/o las violaciones. El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses de España ha revelado algunos datos al respecto, entre los que cabe destacar que se calcula que 1 de cada 3 agresiones sexuales se podría haber producido mientras que la víctima se encontraba bajo los efectos de las drogas de sumisión.

Las drogas de sumisión son unas sustancias que causan diversos efectos en las víctimas como un estado de inconsciencia o semiinconsciencia que puede llegar a generar confusión y que además dificulta el reconocimiento de lo ocurrido mientras se está bajo los efectos de este tipo de sustancias, al experimentar las víctimas amnesia parcial o total de los hechos.

Tipos de drogas de sumisión

Los expertos afirman que la sumisión química se utiliza principalmente para agredir sexualmente a las víctimas; no obstante, también ha habido casos en los que este método se llegó a emplear para robar a ancianos en sus domicilios, con el fin de modificar el comportamiento de personas con dificultades para dormir o para obtener dinero o bienes cuando la víctima se encuentra bajo los efectos de estas drogas.

En función de la forma en que se haya producido la ingesta de las drogas de sumisión, de acuerdo con la literatura científica, hay 3 tipos de sumisión química.

1. La sumisión química premeditada o proactiva

En este caso estaríamos hablando de aquellas circunstancias en las que el asaltante, de forma deliberada y encubierta, le proporciona a la víctima una o varias sustancias incapacitantes o desinhibidoras (drogas de sumisión) con el objetivo de someterla sexualmente y/o robarle.

2. La sumisión química oportunista

En este otro caso estaríamos hablando de aquellos casos en los el asaltante se aprovecha de una víctima que se encuentra intoxicada por una o varias sustancias o alcohol que había ingerido previamente de forma voluntaria; en otras palabras, aquí el asaltante se habría aprovechado de personas que se encontraban bajo los efectos del alcohol y/o las drogas.

3. La sumisión química mixta

Por último, en estas circunstancias la víctima ha ingerido de manera voluntaria alcohol y/o otro tipo de sustancias y, al mismo tiempo, el asaltante le habría administrado de manera encubierta alguna sustancia incapacitante a mayores cantidades con el objetivo de aprovecharse de la víctima.

¿Cuáles son las drogas de sumisión más utilizadas?

Dentro de la categoría de las drogas o sustancias que suelen emplearse para la sumisión química podemos encontrarnos con una amplia variedad. A continuación vamos a ver cuáles son las drogas de sumisión más usadas y también explicaremos sus principales efectos.

1. Alcohol

Para empezar, el alcohol podría considerarse como la sustancia más empleada en la sumisión química debido a que es la que se encuentra más aceptada socialmente y además, las víctimas podrían estar consumiendo previamente de forma voluntaria, de manera que las personas asaltantes pueden aprovecharse de la situación y atacar en aquellos momentos en los que la víctima se encuentre en peores condiciones. Es un ejemplo de sumisión química oportunista.

2. Benzodiacepinas

Estas sustancias (p. ej., flunitrazepam, lorazepam, zopiclona, zolpidem, etc.) son medicamentos hipnóticos, neurológicos, anestésicos o sedantes que deberían consumirse exclusivamente con receta y bajo prescripción médica por diferente motivos de salud; sin embargo, en la actualidad muchos asaltantes recurren a estas sustancias con el fin de diluirlas en las bebidas de las víctimas mientras se encuentran de fiesta con el fin de que lleguen a ingerirlas de manera involuntaria. Cuando se ingieren con la bebida se puede sufrir somnolencia, de manera que la víctima queda en total o parcial estado de inconsciencia.

3. Éxtasis líquido

El éxtasis sería una de las principales sustancias que se utilizan para la sumisión química, ya que estaríamos hablando de una droga incolora, incolora y sin sabor, por lo que es imperceptible para quienes ingieren esta sustancia. Otro motivo por el que esta sustancia es utilizada con bastante frecuencia con fines delictivos es que a las pocas horas de haber sido ingerida ya es indetectable en el organismo, de manera que no suele dejar rastro.

Hay quienes ingieren el éxtasis por voluntad propia debido a sus efectos causados como un posible “aumento de la sociabilidad”, sin embargo, también puede llegar a ocasionar somnolencia, confusión, obnubilación y dolor de cabeza, de manera que resulta muy peligrosa ya que cuando una persona consume esta sustancia se vuelve más vulnerable frente a posibles asaltantes. Por todo ello, resulta desaconsejable su consumo aunque sea con fines recreativos.

4. Burundanga

Lo popularmente conocida como burundanga, también se denomina escopolamina y es una de las drogas de sumisión más utilizadas al producir efectos alucinógenos en las víctimas además de sueño, lo que puede facilitar la sumisión. Por otro lado, esta sustancia también puede provocar hipertensión y, si se ingiere en grandes dosis, podría ocasionar deficiencias cardiacas y/o respiratorias por lo que se considera una sustancia sumamente peligrosa.

5. Ketamina

Dentro de las drogas de sumisión más usadas cabe destacar también la ketamina, un anestésico disociativo que se suele utilizar para la anestesia en el ámbito de la medicina y la veterinaria; sin embargo, debido a sus efectos lamentablemente se ha empezado a utilizar con fines de sumisión química.

Esta sustancia suele presentarse como un líquido translúcido, aunque también se puede encontrar de diversas formas: en forma de polvo blanco (cristales de color blanco) o en cápsulas o comprimidos. Es por ello que esta sustancia podría administrarse por diferentes vías: intramuscular en inyecciones, rectal, nasal, oral o incluso pulmonar al fumarse cuando se encuentra en forma de polvo blanco.

En pleno 2022, se han extendido los casos en los que las víctimas habían recibido un pinchazo en el muslo o en otras partes del cuerpo cuando se encontraban de fiesta y algunos expertos aseguran que una de las sustancias que más se suelen inyectar en este tipo de casos es la ketamina. Es importante que cuando una persona detecte que ha recibido un pinchazo o sospeche de ello que pida ayuda inmediatamente y, a ser posible, que acuda a alguien de confianza y llame a las autoridades o los Fuerzas y Cuerpos de seguridad lo antes posible.

6. Butirolactoma

El butirolactona, también conocido como GBL (gamma-butirolactona), es un precursor de GHB que suele diluirse en agua o en cualquier tipo de refresco debido a que no se debería mezclar con bebidas alcohólicas. Este depresor del sistema nervioso central suele tomarse por vía oral y podría dejar KO a una persona en pocos minutos, curando los efectos entre 1 y 3 horas. El modo de empleo de esta sustancia suele ser a través de unas gotas que se echan en la bebida de las víctimas por lo que hay que tener mucho cuidado y no perder de vista nuestra bebida en ningún momento.

Los síntomas a corto plazo de esta sustancia suelen ser: cefaleas o dolores de cabeza, temblores, incontinencia urinaria o dificultades respiratorias; mientras que los efectos a largo plazo son los siguientes: euforia, náuseas, vómitos, somnolencia, confusión, pérdida de memoria, inconsciencia, disminución de la frecuencia cardíaca y respiratoria, bajada de la temperatura corporal, convulsiones y también existe el riesgo de que la víctima entre en un estado de coma o le llegue a causar la muerte.

Las señales de alerta de una agresión con drogas de sumisión

Los síntomas más comunes cuando una persona se encuentra bajo los efectos de las drogas de sumisión son los que vamos a enumerar a continuación:

  • Amnesia anterógrada: incapacidad para poder recordar nuevos hechos mientras alguien esté bajo los efectos.
  • Sedación: por lo que la capacidad de atención, vigilia y respuesta frente a la agresión del asaltante se ven mermadas.
  • Efectos alucinógenos, así como también desorientación espacial y temporal de la víctima.
  • Desinhibición: por lo que la víctima podría llegar a aceptar actos que estando en condiciones normales no habría aceptado.

Por otro lado, estas son las principales señales de alerta de que podrías haber sido víctima de las drogas de sumisión por lo que es importante que las tengas en cuenta y actúes de inmediato buscando ayuda:

  • Tienes dificultades para moverte o te mueves con menos soltura de lo habitual.
  • Te empieza a doler la cabeza.
  • Sientes náuseas o tienes ganas de vomitar.
  • Te ha entrado mucho sueño.
  • Tienes visión borrosa.
  • Ves u oyes cosas extrañas.

Junto a las señales mencionadas anteriormente hay que añadirle la señales que te podrían alertar de que has sido víctima de abuso sexual a causa de la sumisión química:

  • Te encuentras en un estado de desorientación.
  • No eres capaz de recordar lo que ha ocurrido en las últimas horas o incluso en los últimos instantes.
  • Tienes la ropa mal puesta o incluso notas que te falta alguna prenda.
  • Te encuentras en un lugar desconocido y no recuerdas cómo habías llegado hasta allí.
  • Te encuentras con personas desconocidas.
  • Cuando encuentras a alguien conocido o a tus amigos te dicen que la última vez que te vieron te comportas de forma extraña.

Esta última señal es importante tenerla presente y, en caso de que alguien se esté comportando de manera extraña, sus amigos se verían estar al cuidado y no perder de vista a esa persona en ningún momento y bajo ninguna circunstancia hasta que se encuentre a salvo en su casa.

¿Cómo actuar en caso de haber sido víctima o tener alguna sospecha?

Si una persona siente que ha sufrido un pinchazo o escozor en alguna zona de su cuerpo o incluso que su bebida tiene un color distinto y además si siente indispuesta para decírselo a personas de su entorno más cercano, debería solicitar ayuda de inmediato a posibles testigos o personas que se encuentren próximas que pudieran brindarle ayuda y sacarla de la zona de peligro.

Lo antes posible se debería contactar con el Servicio de Atención de Emergencias, que en la Unión Europea e incluso en algunos países de Latinoamérica es el teléfono 112, con el fin de comunicarles lo sucedido y así se podría recibir asistencia médica y protección por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad lo más pronto que sea posible, así como también para que puedan buscar al agresor. Mientras llega la asistencia, la víctima de la sumisión química debería estar acompañada y a salvo con el fin de evitar cualquier tipo de agresión.

Es importante acudir a un centro sanitario rápidamente con el fin de que los profesionales realicen la evaluación y las analíticas pertinentes con el fin de detectar las posibles drogas de sumisión en el organismo que pudieran confirmar los indicios de delito.

En el caso del entorno cercano a la víctima, no deberían separarse de ella en ningún momento con el fin de que esté segura y también es importante que la acompañen hasta el centro sanitario. También podrían ser quienes avisen a los familiares de la víctima con el fin de que puedan acudir en su ayuda lo antes posible.

Consejos de prevención frente a una posible agresión con drogas de sumisión química

Además de los pasos a seguir a modo de actuación frente a las drogas de sumisión es importante tener presentes algunos consejos que son de ayuda para prevenir una posible agresión con este tipo de sustancias:

  • No se debe consumir drogas debido a que, a parte de sus efectos nocivos, nos vuelven más vulnerables frente al agresor.
  • No abusar de bebidas alcohólicas.
  • Vigilar en todo momento lo que bebemos y comemos con el fin de que no nos echen ninguna droga de sumisión.
  • Prestar una total atención cuando nos están sirviendo comida o bebida.
  • No abandonar en ningún momento nuestra comida o bebida ni tampoco dejarlas bajo vigilancia de desconocidos.
  • Desconfiar cuando nos ofrezcan bebida o comida que no hemos pedido.
  • Bechtel, L. K. & Holstege, C. P. (2007). Criminal Poisoning: Drug-Facilitated Sexual Assault. Emerg Med Clin North Am., 25(2): pp. 499 - 525.
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  • López, E. (2018). Sumisión química: Guía informativa para adolescentes y jóvenes. Cuad Med Forense, 24(1-2), pp. 23-26.
  • López, M. et al. (2005). Sumisión química: Antecedentes, situación actual y perspectivas. Protocolos de actuación para estudios multicéntricos. Revista de Toxicología, 22(1): pp. 119-126.
  • Ministerio de Justicia (2012). Instrucciones de actuación en casos de agresión sexual
  • con sospecha de intoxicación. Madrid: Ministerio de Justicia.
  • Observatorio de Adicciones y Consumos problemáticos (s.f.). Sumisión Química: Abordaje para una política pública de prevención. Buenos Aires: Defensoría.

Psicólogo

Mario Arrimada es Graduado en Psicología en la Universidad Pontificia de Salamanca y dispone de un Máster de Actualización en Intervención Psicológica y Salud Mental en la Universidad a Distancia de Madrid. Varios cursos de formación, entre ellos el de Experto en Trastornos de la Personalidad con la Asociación Española para el Fomento y Desarrollo de la Psicoterapia, de Experto en Mindfulness y de Experto en DSM5 y CIE11, ambos en la UDIMA.

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