Cuando la gente escucha la palabra “psicólogo”, inmediatamente suele asociarla a un hombre o una mujer que se encuentra sentado en una oficina escuchando y tomando notas de lo que su cliente le dice mientras está tumbado en un diván. Este es uno de los muchos mitos en torno a la profesión de psicólogo que se pueden escuchar a menudo.
Está claro que hay muchos psicólogos que llevan a cabo este tipo de práctica, lo que se conoce como psicoterapia. Pero los ámbitos de la psicología aplicada son muchos, y, por tanto, los psicólogos realizan distintas tareas y funciones, y trabajan con diferentes clientes: familias, organizaciones, deportistas, perros, entre otros.
Dentro del mundo de la psicología existe una gran variedad de trabajos, roles y especialidades que no tienen por qué parecerse mucho entre sí.
Las distintas clases de psicólogos
Los psicólogos disponen de áreas variadas de especialización. Dentro de éstas, algunos psicólogos se dedican al campo práctico, pero también a la investigación o a la docencia. Te sorprenderá saber, por ejemplo, que hay psicólogos que desarrollan su profesión en el campo de los videojuegos…
Como ves, las áreas de aplicación en que trabajan los psicólogos son múltiples, y por este motivo, a continuación te exponemos una lista con los tipos de psicólogos que existen y te explicamos sus principales funciones. Estas categorías no son mutuamente excluyentes, por lo que no es raro que una persona tenga funciones propias de dos o hasta tres tipos de psicólogos.
Del mismo modo, los campos de estudio de dos de estos tipos pueden ser el mismo, teniendo en cuenta que los psicólogos que se dedican a la investigación tienen una formación parecida a muchos otros que se dedican a intervenir sobre un tema específico, tal y como veremos.
12 tipos de psicólogos para entender esta disciplina
A continuación te explicamos qué clases de psicólogos existen y qué funciones realiza cada uno.
1. Psicólogos clínicos
Los psicólogos clínicos evalúan y tratan los trastornos mentales y emocionales.
Estas psicopatologías van desde crisis a corto plazo a dificultades que duran más tiempo. Algunos psicólogos clínicos se han especializado en distintas patologías: depresión, trastornos alimentarios, ansiedad, trastornos de la personalidad, etc. Otros se centran en poblaciones específicas: niños, adolescentes, drogadictos, entre otros. La psicología clínica está regulada por ley, por lo que es necesario haber cursado un máster oficial o una oposición (por ejemplo, el PIR) para poder ejercerla.
2. Psicoterapeutas
La psicoterapia es un modelo de intervención clínica que ofrece apoyo psicológico y una serie de técnicas para mejorar la calidad de vida de los pacientes.
La psicoterapia, en la mayoría de países, no está regulada por ley, y los problemas que trata no son de la misma gravedad comparados con los que suele abordar la psicología clínica. Los psicoterapeutas suelen tratar problemas cotidianos, problemas en las relaciones interpersonales o problemas de tipo emocional. Por ejemplo, dificultades en la relación de pareja, o el tratamiento para gestión del estrés.
3. Psicólogos educativos
La Psicología educativa hace de puente entre dos campos de estudio: la psicología y la educación. Se centra en los procesos implicados en el aprendizaje y de los individuos y en los roles que desempeñan los actores del ámbito educativo, así como el entorno en el que se produce este aprendizaje.
Así pues, el psicólogo de la educación suele trabajar en los centros educativos (por ejemplo, colegios) o centros de orientación educativa. Sus funciones son variadas, y puede trabajar de manera individual, por ejemplo en la evaluación y el tratamiento de trastornos del aprendizaje de un niño, o puede trabajar de manera multidisciplinar con otros profesionales de la educación.
4. Psicólogos del desarrollo
Los psicólogos del desarrollo pueden trabajar en muchas ocasiones como psicólogos educativos, puesto que el aprendizaje es una parte importante del desarrollo de un individuo.
Pero la psicología del desarrollo no solamente incluye a los niños o adolescentes en su campo de estudio y aplicación, sino que también incluye la vejez. Por tanto, estos profesionales también pueden trabajar en geriátricos. En las sociedades occidentales cada vez hay más personas mayores, por eso en las últimas décadas la labor de estos profesionales se ha convertido en imprescindible.
5. Psicólogos experimentales y otros investigadores
Los psicólogos experimentales realizan pruebas y experimentos para obtener nuevos conocimientos sobre distintos aspectos o fenómenos psicológicos. En psicología, sin embargo, también se utilizan otras metodologías que no siempre pasan por el uso del método experimental, como ocurre por ejemplo en los estudios de caso.
Los psicólogos que se dedican a la investigación pueden tener una formación propia del resto de tipos de psicólogos, pero en vez de intervenir sobre sujetos o colectivos, investigan sobre estos para obtener información con la que contrastar hipótesis u obtener datos específicos que les son encargados. Pueden estudiar aspectos de la psicología básica como por ejemplo la memoria, la atención, la percepción o los procesos de aprendizaje, entre otros, pero también fenómenos ligados a un contexto determinado, como la aparición y propagación de rumores o la generación de discursos específicos.
Suelen trabajar en universidades o centros de investigación públicos o privados, y recientemente ha habido un auge en el interés de las empresas por contratar a estos profesionales, debido a la importancia del desarrollo de programas I+D. Las grandes empresas están muy interesadas en temas como la percepción del consumidor ante determinado producto, o en temas de salud laboral.
6. Neuropsicólogos
Un neuropsicólogo es un profesional dedicado a la neuropsicología.
Para poder trabajar en este campo, es necesario tener estudios de Licenciatura o Grado en psicología, además de un postgrado en dicha especialidad. En ocasiones suelen ser psicólogos clínicos o psicólogos experimentales los que ocupan estos puestos, ya que muchos neuropsicólogos se dedican a la investigación. En el campo aplicado, pueden trabajar, por ejemplo, en la rehabilitación cognitiva, conductual y emocional de un paciente con daño cerebral, o en el diagnóstico precoz y la intervención en demencias.
7. Psicólogos sociales
Los psicólogos sociales estudian y trabajan sobre la conducta humana y los factores psicológicos que afectan al entorno social, comunitario o grupal.
Están interesados en aspectos como las relaciones interpersonales, intragrupales e intergrupales. También están interesados en temas como la cultura, los prejuicios o las actitudes hacia otros individuos, y desarrollan programas para grupos, para minorías excluidas, para colectivos desfavorecidos, entre otros. Aquí pueden englobarse también los profesionales dedicados al estudio de la psicología política y la psicología cultural, y también es normal encontrar en esta categoría a gente con formación en antropología y estudios de género.
8. Psicólogos organizacionales y del trabajo
Los psicólogos organizacionales y del trabajo aplican métodos y principios psicológicos en el entorno laboral y organizacional.
Sus labores son variadas, pero suelen trabajar en los departamentos de selección de personal, formación, salud laboral o desarrollo. También participan en evaluaciones del desempeño o estudios para saber el nivel de satisfacción de los consumidores. Además, en el entorno laboral, tienen especial importancia algunas variables psicológicas como son la motivación o el liderazgo.
9. Psicólogos forenses y criminalísticos
Los psicólogos forenses aplican principios psicológicos a los aspectos legales. Su experiencia es esencial en el juzgado. Pueden, por ejemplo, ayudar al juez a decidir qué padre debe quedarse con la custodia de un hijo al aportar información útil o evaluar la competencia mental de un acusado durante un juicio.
Los psicólogos forenses no son lo mismo que los psicólogos criminalistas. Para entender mejor la diferencia entre ambos campos de aplicación de la psicología, te invitamos a que leas nuestro artículo: “Diferencias entre Psicología criminal y Psicología forense”.
10. Psicólogos deportivos
A pesar de que el trabajo del psicólogo deportivo no es conocido por muchos individuos, pocos dudan de la importancia de los factores psicológicos en el rendimiento deportivo. Los psicólogos deportivos trabajan con los deportistas, con el entrenador, con el equipo y con toda la organización para maximizar el potencial del equipo o deportista. Algunas de las variables psicológicas que se trabajan son: autoeficacia, atención, motivación, nivel de activación o estrés. Pero también trabajan las relaciones interpersonales de los deportistas, la influencia del entorno o la comunicación.
Para saber más sobre el trabajo del psicólogo deportivo, puedes pinchar en este artículo: “10 motivos para poner un psicólogo deportivo en tu vida”.
11. Sexólogos
Los sexólogos son profesionales especializados en diagnosticar y tratar los trastornos psicológicos que afectan a las relaciones íntimas de los individuos (por ejemplo, la disfunción eréctil o la eyaculación precoz).
También se encargan de educar a los pacientes en los aspectos relacionados con una sexualidad sana.
12. Otros campos de aplicación
Pero esto no acaba aquí, pues hay profesionales de la psicología que se dedican a campos más reducidos de aplicación: psicología del tráfico y la seguridad vial, psicología del marketing, psicología aplicada a los videojuegos, psicología aplicada a la nutrición, psicología de los grupos, psicología canina, coaching...
En suma, la psicología es un ámbito que tiene conexiones evidentes con cualquier área económica, social y médica, y es por esta razón que la profesión de psicólogo puede encontrar especializaciones y aplicaciones muy variadas.
Más allá de los tipos de psicólogos
Hay que tener en cuenta de que, más allá de cómo clasifiquemos a los diferentes tipos de psicólogos, todos ellos ejercen una tarea fundamentalmente igual: el estudio del comportamiento y los procesos mentales y la aplicación de estos nuevos conocimientos en ámbitos como la psicología clínica, la educación, etc.
Es decir, que todos, desde sus diferentes ámbitos de actuación, ayudan a entender mejor quiénes somos y cómo podemos cambiar.
Referencias bibliográficas:
- Gadenne, V. (2006). Filosofía de la psicología. España: Herder.
- Morris, Charles (1997). Introducción a la Psicología (Novena edición edición). Prentice Hall.
- Myers, David G. (2005). Psicología. México: Médica Panamericana.
- Papalia, D. y Wendkos, S. (1992). Psicología. México: McGraw-Hill.
- Santamaría Ambriz, Rocío (2002). «Acerca del método psicoanalítico de investigación». Revista Universidades.