En los últimos años y con una clara influencia de la pandemia, buscar apoyo psicológico en la terapia es cada vez más común y normalizado en nuestra sociedad. Hace décadas, la idea de acudir a una consulta psicológica estaba ligada a la estigmatización del trastorno mental y era considerado algo raro o una decisión “extrema”. Hoy en día, cada vez más personas quieren cuidar su salud mental y no se entiende la terapia psicológica como exclusiva para personas con problemas psicológicos.
Todas las personas enfrentamos momentos de mayor debilidad psicológica o en los que necesitamos el apoyo de un profesional para ver las cosas de otra manera o aprender estrategias de afrontamiento emocional. Es común que en consulta terapéutica se traten temas relacionados con la falta de confianza propia o sentimientos de inseguridad, muy relacionados con la autoestima.
Y es que no solemos recibir una educación centrada en la construcción de una identidad o autoestima saludable. Construimos esta dimensión de nuestra personalidad mediante la experiencia y nuestra interacción con el entorno. Por ello, muchas personas tratan sus problemas de autoestima en terapia, sirviendo como una educación emocional y del amor propio. En este artículo vamos a comentar 5 señales de que la psicoterapia tiene un efecto en tu autoestima.
Señales de que la terapia psicológica está potenciando tu autoestima
Es común que no seas consciente de todos los cambios que ir a terapia estén teniendo en tu día a día y tu vida cotidiana. Por ello, puede ser muy positivo que te tomes unos minutos para reflexionar sobre de qué maneras la psicoterapia está teniendo impactos significativos y positivos en tu psicología.
1. Cambios en la percepción personal
Uno de los indicadores más claros de que la psicoterapia está teniendo un impacto positivo en tu autoestima es un cambio notable en tu percepción personal. La manera en que te ves a ti mismo/a y cómo te valoras puede experimentar una transformación significativa durante el proceso terapéutico.
Cuando comienzas la terapia, es posible que tengas una imagen de ti mismo negativa o distorsionada. Puedes estar atrapado en un patrón de autocrítica constante, enfocándote en tus defectos y debilidades en lugar de tus fortalezas y logros. Sin embargo, a medida que avanzas en la terapia, es probable que comiences a notar una evolución en esta percepción personal.
La terapia te brinda un espacio seguro para explorar tus pensamientos y sentimientos sobre ti mismo. Tu terapeuta te ayudará a desafiar creencias autodestructivas y a desarrollar una imagen más realista y compasiva de ti mismo. Esto puede manifestarse de varias maneras:
- Menos autocrítica: Notarás que te criticas menos a ti mismo/a de manera constante. Comenzarás a ser más amable contigo y a abrazar tus imperfecciones como parte natural de ser humano, aprender a tener compasión hacia tus acciones.
- Mayor autoconfianza: A medida que te das cuenta de tus habilidades y logros, ganarás confianza en tus capacidades. Sentirás más seguridad al abordar desafíos y enfrentar situaciones nuevas.
- Reconocimiento de tus logros: Empezarás a reconocer tus logros y éxitos, incluso los pequeños. En lugar de minimizar tus logros, los valorarás y celebrarás.
- Menos comparación con los demás: Dejarás de medir tu valía en función de lo que otros hacen o tienen. Aprenderás a valorarte por quién eres y lo que aportas al mundo.
2. Aumento de la autoaceptación
La autoaceptación es un componente esencial de una autoestima saludable, y la psicoterapia puede ser un catalizador poderoso para fortalecer este aspecto crucial de tu relación contigo mismo/a. Cuando la terapia está teniendo un impacto positivo en tu autoestima, verás un aumento significativo en tu capacidad para aceptarte tal como eres, con todas tus virtudes y defectos. Esta autoaceptación no significa que debas estar completamente satisfecho con todas tus acciones o rasgos de personalidad, sino que implica abrazar tu humanidad, con sus imperfecciones y áreas de mejora. Aquí hay algunas señales que indican que la terapia está contribuyendo a tu autoaceptación:
- Menos autocrítica destructiva: Comienzas a dejar de ser tu propio/a crítico/a más duro. En lugar de juzgarte constantemente por tus errores, te permites aprender de ellos y seguir adelante.
- Compasión hacia ti mismo: Desarrollas una voz interior más amable y compasiva. Te hablas con palabras de apoyo en lugar de autodesprecio.
- Aceptación de tus limitaciones: Reconoces tus limitaciones y defectos sin sentirte abrumado/a por ellos. Entiendes que nadie es perfecto y que está bien tener áreas en las que puedas mejorar.
- Mayor tolerancia a la frustración: Aprendes a lidiar mejor con la frustración y el fracaso. Te das cuenta de que un error o un contratiempo no define tu valía como persona.
- Menos necesidad de aprobación externa: Dejas de depender tanto de la aprobación de los demás para sentir tu valía. Comienzas a buscar validación principalmente desde dentro de ti mismo/a.
3. Desarrollo de habilidades de afrontamiento
Una señal clave de que la psicoterapia está contribuyendo de manera positiva a tu autoestima es el desarrollo de habilidades efectivas de afrontamiento. La vida está llena de desafíos y momentos difíciles, y cómo enfrentamos y superamos estas situaciones puede tener un gran impacto en nuestra autoimagen.
Durante la terapia, aprendes estrategias y técnicas para lidiar con el estrés, la ansiedad, la tristeza y otras emociones difíciles. A medida que estas habilidades de afrontamiento se vuelven parte de tu repertorio, observarás una mejora significativa en tu capacidad para manejar las adversidades de manera saludable. Estas habilidades de afrontamiento no solo mejoran tu capacidad para enfrentar las dificultades, sino que también tienen un impacto directo en tu autoimagen. Aquí están algunas señales de que estás desarrollando habilidades efectivas de afrontamiento:
- Mayor resiliencia: Empiezas a recuperarte más rápidamente de las dificultades emocionales. Las situaciones que solían abrumarte ahora te afectan menos y puedes adaptarte con mayor facilidad.
- Reducción del estrés: Aprendes a identificar fuentes de estrés y a aplicar técnicas para reducirlo. Tu nivel de estrés general disminuye, lo que contribuye a una mejor percepción de ti mismo.
- Manejo de emociones: Te vuelves más competente en la regulación de tus emociones. En lugar de sentirte desbordado/a por la tristeza, la ira o la ansiedad, desarrollas la capacidad de gestionar estas emociones de manera constructiva.
- Toma de decisiones más sólidas: Aprendes a tomar decisiones importantes de manera más informada y segura. Sientes más seguridad de tus elecciones y menor indecisión o auto-cuestionamiento.
- Menos evitación: Dejas de evitar situaciones o enfrentamientos que antes te resultaban incómodos. Te sientes más capaz de enfrentar desafíos en lugar de evitarlos.
4. Mayor resiliencia emocional
La resiliencia emocional es una habilidad fundamental que se refleja de manera notable cuando la psicoterapia está contribuyendo de manera efectiva a fortalecer tu autoestima. La resiliencia emocional se refiere a la capacidad de afrontar y recuperarse de los desafíos emocionales y adversidades de la vida de una manera saludable y adaptativa.
Cuando tu resiliencia emocional aumenta, experimentas una mayor capacidad para manejar las turbulencias emocionales con gracia y determinación. La resiliencia emocional no significa que no experimentarás dificultades emocionales o momentos difíciles en el futuro, sino que estarás mejor equipado para enfrentarlos y recuperarte de ellos. Esto no solo tiene un impacto positivo en tu bienestar emocional, sino que también refuerza tu autoestima. Aquí hay algunas señales que indican que estás desarrollando una mayor resiliencia emocional gracias a la psicoterapia:
- Menos reacción ante la adversidad: A medida que avanzas en la terapia, te vuelves menos propenso a reaccionar de manera excesiva ante situaciones estresantes o emocionalmente desafiantes.
- Mayor adaptabilidad: Comienzas a adaptarte mejor a los cambios y a las sorpresas que la vida te presenta. Te sientes más capaz de fluir con las circunstancias en lugar de resistirte a ellas.
- Recuperación más rápida: Si bien aún puedes sentir tristeza, ansiedad u otras emociones difíciles, notas que te recuperas más rápido de ellas. Tu capacidad para encontrar el equilibrio emocional mejora con el tiempo.
- Mayor claridad mental: La terapia te proporciona herramientas para afrontar el caos emocional. Esto genera una mayor claridad mental incluso en medio de situaciones difíciles.
- Desarrollo de una mentalidad de aprendizaje: Comienzas a ver los desafíos como oportunidades de crecimiento. Estás dispuesto/a a aprender de las dificultades y a aplicar esas lecciones en tu vida.
5. Relaciones más saludables
Una autoestima fortalecida a través de la psicoterapia no solo tiene un impacto en tu relación contigo mismo, sino que también se refleja en tus interacciones con los demás. Las relaciones personales desempeñan un papel crucial en nuestra vida y cómo nos vemos a nosotros/as mismos/as en el contexto de esas relaciones es un indicador importante de la salud de nuestra autoestima.
Cuando la psicoterapia está teniendo un impacto positivo en tu autoestima, observarás mejoras significativas en tus relaciones interpersonales. Aquí hay algunas señales de que estás experimentando relaciones más saludables gracias a tu autoestima fortalecida:
- Estableces límites saludables: Comienzas a establecer límites claros y saludables en tus relaciones. Eres capaz de decir "no" cuando es necesario, protegiendo tu bienestar emocional.
- Mejoras en la comunicación: Aprendes a comunicarte de manera más efectiva. Expresas tus pensamientos, necesidades y emociones de manera asertiva y escuchas a los demás con empatía.
- Selección de relaciones más saludables: Empiezas a atraer y mantener relaciones que son más respetuosas, fuentes de apoyo y positivas. Te alejas de relaciones tóxicas o dañinas.
- Menos conflicto interno: Experimentas menos conflicto interno en tus relaciones. No te sientes atrapado/a entre complacer a los demás y satisfacer tus propias necesidades y deseos. Una autoestima saludable te permite establecer relaciones desde un lugar de confianza en ti mismo y autorespeto. Cuando te valoras y te cuidas, tiendes a atraer relaciones que reflejan este nivel de respeto y cuidado. Además, estás más dispuesto a trabajar en relaciones existentes para mejorar la comunicación y la satisfacción mutua.