La entrevista por competencias (o entrevista conductual) es un tipo de entrevista que emplean los expertos en selección de personal, ya que aporta más ventajas y es más eficaz en la predicción del desempeño laboral que la entrevista tradicional.
Hacer una buena entrevista va a determinar si realmente somos aptos para el puesto al que optamos. Por lo tanto, si queremos sacar lo mejor de nosotros mismos delante del entrevistador, es importante conocer el funcionamiento de la entrevista conductual.
Entrevista por competencias: todo lo que debes saber
Durante una entrevista por competencias, y para llegar a saber si la persona entrevistada es la persona idónea para el puesto, el reclutador va a centrarse en la obtención de ejemplos conductuales de la vida personal, académica y profesional del postulante.
El experto en selección de personal, tras conocer previamente las necesidades tanto del puesto como de la organización, va a observar si la motivación, el conocimiento, las capacidades o los valores de la persona entrevistada, encajan con las necesidades de la empresa.
Analizando las claves para superarla y conseguir el trabajo
A diferencia de la entrevista tradicional, que se centra en aspectos superficiales como los conocimientos, la experiencia o el nivel educativo, la entrevista de competencias valora otras habilidades necesarias para el puesto y la organización concreta, como pueden ser: la manera de relacionarse con los compañeros, las ganas de trabajar en la compañía, la capacidad de liderazgo, etc. La entrevista por competencias, por tanto, indaga sobre aspectos más profundos que predicen de mejor manera el desempeño futuro del candidato.
El concepto de competencia
El concepto de competencia surge de la necesidad de valorar no sólo el conjunto de los conocimientos, las habilidades y destrezas que una persona puede poseer, sino de apreciar su capacidad de emplearlas para responder situaciones concretas y resolver problemas que pueden surgir en el ámbito laboral. Además, hace referencia a las condiciones del individuo y sus comportamientos, y tiene en cuenta el componente actitudinal y valorativo que está presente en sus acciones.
El concepto de competencia es multidimensional e incluye cuatro componentes distintos:
- Saber ser: es la dimensión personal, las actitudes y valores que guían el comportamiento.
- Saber: es la dimensión técnica, y se refiere los datos académicos, o conocimientos que la persona posee.
- Saber hacer: es la dimensión metodológica, la capacidad de aplicar el saber. Son habilidades, destrezas, métodos de actuación, etc.
- Saber estar: es la dimensión participativa. Hace referencia a las capacidades relacionadas con la comunicación interpersonal y el trabajo cooperativo.
El trabajo previo de una entrevista por competencias
Cuando los entrevistadores hacen preguntas basadas en competencias, están buscando respuestas que demuestren que una persona va a responder con éxito a los desafíos del puesto, que encajará en el grupo de trabajo y que usará efectivamente sus habilidades y experiencia en las tareas diarias. Por lo tanto, dependiendo de un puesto u otro, las preguntas del entrevistador pueden estar directamente relacionadas con las tareas específicas del trabajo, con sus habilidades interpersonales o con su grado de motivación que le produce el empleo.
Por ejemplo, las preguntas serán diferentes para un operario de fábrica que para un recepcionista. Cada uno de estos puestos requiere unas habilidades diferentes, unas competencias específicas. Pero además, en el caso del recepcionista, no será lo mismo trabajar en un hotel de cinco estrellas que en uno de tres. La clientela de uno u otro hotel, va a propiciar que los candidatos posean unas actitudes u otras.
Para poder definir correctamente las competencias necesarias, debe haber un trabajo previo por parte del departamento de recursos humanos o del reclutador, en el que se obtenga un conocimiento del puesto (las tareas, los horarios de trabajo, etc.) y de los aspectos de la organización que van a influir en el trabajo (por ejemplo, el clima laboral, los valores de la empresa, etc.). Toda esa información se traducirá a un lenguaje claro, es decir, se van a definir bien las conductas y las habilidades que se requieren. Esto va a permitir que el entrevistador sepa exactamente las necesidades específicas del puesto, y va a facilitar su capacidad de predicción en el proceso de selección, es decir, va a permitir saber si el trabajador encaja tanto en el trabajo como en la compañía.
¿Cómo prepararse para una entrevista de competencias?
Una entrevista es esencialmente un casting, por lo tanto, hay que ir bien preparado para evitar caer en "Los 10 errores más comunes que se cometen en una entrevista de trabajo".
Para mostrar la mejor imagen de uno mismo, os vamos a dar algunos consejos y tips que pueden serte muy útiles de cara a superar el filtro que imponen los departamentos de recursos humanos de las empresas.
1. Conócete a ti mismo
Conocerse a uno mismo es imprescindible para hacer una buena entrevista. Anota tus virtudes y tus defectos, y piensa en lo que puedes aportar a la empresa si eres el seleccionado.
2. Investiga sobre el puesto
Debes investigar sobre el puesto que se ofrece, así podrás saber las competencias necesarias para el trabajo. Además, puedes volver a leer la descripción de la oferta para conocer las funciones y los requisitos que exige la compañía.
3. Busca información sobre la organización
Investiga sobre los valores que promueve la organización, su cultura, indaga sobre el área en el que trabajarás, etc. Seguro que mirando su página web puedes encontrar información importante.
4. Prepara las preguntas
Si has seguido los pasos anteriores, es posible que tengas una idea de las competencias más importantes para el puesto al que aspiras. Ahora puedes preparar bien las posibles preguntas que creas que pueden surgir durante la entrevista. Piensa en ejemplos de tu experiencia que demuestran que tienes esas competencias, y prepara anécdotas y ejemplos. Sobretodo explica lo que tú hiciste en la situación que vas a explicar. No necesitas aprenderte exactamente lo que vas a decir, pero puedes tener una idea de lo que te van a preguntar. De esta manera irás más seguro y responderás a las preguntas con más fluidez.
Si no estás acostumbrado a asistir a entrevistas por competencias, el modelo STAR (Situation, Task, Action, Result) puede ser útil para que estructures bien las respuestas. Una vez que tengas la competencia, piensa en la situación (situation), la tarea (task), la acción (action) y el resultado (result) de lo que vas a explicar. De esta manera vas a construir mejor las respuestas y no te olvidarás de ningún dato.
Bonus: Preguntas frecuentes en una entrevista por competencias
Para acabar, os presentamos algunas de preguntas con sus respectivas competencias:
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Orientación al cliente: Cuéntame una situación en la que consideres que resolviste satisfactoriamente las necesidades de un cliente. ¿Cómo actuaste en esta situación?
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Resolución de problemas: Cuéntame un problema que hayas encontrado en tu anterior trabajo. ¿Qué solución tomaste? ¿Por qué?
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Resistencia al estrés: ¿Cuándo consideras tú que has estado en una situación verdaderamente estresante? ¿Cómo reaccionaste?
Si necesitas saber más sobre las preguntas frecuentes en las entrevistas, no dejes de leer:
"Las 10 preguntas más comunes en una entrevista de trabajo (y cómo enfrentarse a ellas)"