La derivación de pacientes es una realidad muy presente en el ámbito de los servicios de asistencia psicoterapéutica; ocurre con relativa frecuencia que, por un motivo o por otro, es necesario interrumpir la terapia en el lugar en el que el paciente está acudiendo y recomendarle asistir a otro lugar, facilitándole esa transición en la medida de lo posible.
Esto no debe ser visto como un fracaso; el hecho de tener que remitir un paciente a otro equipo de expertos de la salud mental es saber adaptarse a una realidad en la que no todos los lugares son adecuados para ayudar a cualquier tipo de persona. Sobre todo, teniendo en cuenta que una parte de la psicoterapia consiste en ir descubriendo cosas acerca de la raíz del problema emocional o comportamental de quien necesita ayuda profesional.
Pero… ¿Dónde derivar pacientes en el ámbito de la psicoterapia? En las siguientes líneas abordaremos este tema partiendo de la base de que al remitir a un paciente, hay que tener como prioridad el bienestar de esta persona, aunque esto no es incompatible con la búsqueda de fórmulas para simplificar este proceso.
Los casos en los que hay que derivar a un paciente de psicoterapia
Estas son las situaciones más comunes en las que se hace necesaria la derivación de una persona que acude a psicoterapia:
- Hace mucho que no mejora como debería: la psicoterapia no debería volverse “crónica”.
- El profesional no cuenta con las cualificaciones adecuadas: este hecho puede revelarse a medida que se conoce más acerca el problema que sufre el paciente.
- Hay un conflicto de intereses: por ejemplo, el paciente y el terapeuta se han conocido en un contexto no profesional.
- El paciente lo pide: no hay que olvidar que la subjetividad del paciente y su capacidad de toma de decisiones debe ser respetada en temas tan personales.
Cómo elegir dónde derivar pacientes de terapia psicológica
Estos son los principales criterios y las pautas que es recomendable tener en cuenta al derivar pacientes en el contexto de la asistencia psicoterapéutica:
1. Seleccionar solamente centros debidamente acreditados
Dado que en el contexto español la práctica de la Psicología en el ámbito clínico y sanitario está regulada para garantizar unos estándares de calidad, es necesario que el profesional que deriva a un paciente evite que la transición sea a un centro que no le ofrezca esas garantías. En este sentido, es importante involucrarse activamente en saber si el lugar que está considerando para remitir al paciente cuenta con profesionales debidamente formados con la carrera universitaria en Psicología/Medicina y las especializaciones correspondientes en atención psicoterapéutica; incluso si el paciente no es consciente de que estos criterios de calidad existen.
2. La automatización de procesos es clave
Lo preferible en todos los casos es tener lo más automatizado posible el sistema de derivación de pacientes a otros centros de atención a la salud mental. En este sentido, las redes de centros de asistencia psicológica y psiquiátrica como Mentalia son una gran ayuda, dado que al tener una amplia diversidad de especializaciones y de ubicaciones, se maximizan las probabilidades de que la persona que necesita ayuda pueda ser atendida en cuestión de días, incluso si ha estado acudiendo a sesiones de terapia online y vive en otra ciudad.
3. Asegurarse de que no hay barreras de idioma
En el caso de que la terapia se haya desarrollado en la modalidad online, o si el lugar en el que el psicoterapeuta está afincado conviven varias lenguas, hay que asegurarse de que la diferencia de idiomas no será un impedimento para la transmisión de información entre un centro y el siguiente. A fin de cuentas, todo proceso de derivación de pacientes debe ir acompañado de un informe de diagnóstico o un documento con las observaciones del terapeuta que deriva.
4. No depender solamente de los terapeutas conocidos
Es cierto que el hecho de conocer personalmente a otro psicoterapeuta puede facilitar las cosas en algunos casos; sin embargo, hoy en día limitarse a este tipo de contactos informales resulta demasiado limitante, y se corre el riesgo de caer en lo que se conoce como Pensamiento Ilusorio, en el que la persona se autoengaña forzando la realidad para que encaje en aquello que le conviene por comodidad (en este caso, manteniendo un sesgo optimista acerca de la capacidad de ese otro psicólogo a la hora de tratar adecuadamente a la persona que está siendo derivada).
Mentalia Salud: la red de centros de salud mental de referencia
Mentalia Salud es una organización que basa su trabajo en los servicios de intervención psicoterapéutica y psiquiátrica mediante una amplia red de Centros de Salud Mental, Centros residenciales, Hospitales Psiquiátricos, Centros de Rehabilitación Psicosocial y viviendas tuteladas distribuidos por toda España.
Mentalia Salud
Mentalia Salud
Hospitales Psiquiátricos, Centros de Salud Mental, Hospitales de día y Centros de rehabilitación psicosocial
Como tal, dispone de profesionales en todos los ámbitos de la asistencia a pacientes con psicopatologías, utilizando un modelo asistencial integral; y también por ello, es una opción que ofrece simplicidad y plenas garantías en el proceso de derivar pacientes, ya que ofrece la certeza de que en su red de especialistas siempre habrá profesionales capaces de ofrecer una intervención a medida de lo que necesita la persona.